¡Increíble! Aunque ¿Qué digo increíble? Era de esperarse, si mi papá no fuera mi papá yo tambien ya me lo hubiera fajado, pero maldito ¿Cómo puede hacerle esto a mi mamá? Aunque podía sacarle provecho a esto, salí corriendo a subir las escaleras y toque la puerta de mi papá.
Harry: -¿____TN?
Jane: -No, papá...soy yo.
Harry: -¿Jane? Dame un segundo- suspuse que se estaba vistiendo, a los segundos abrió la puerta- ¿Qué pasa hija?
Jane: -¿Puedo entrar?- traía una camiseta y shorts, sus músculos resaltaban y estaba algo sudado, maldito ¿Por qué tuviste que ser mi padre? Estás muy bueno.
Harry: -Claro, pasa- me dio entrada, me acosté en su cama.
Jane: -¿Podemos hablar?
Harry: -Sí- se acostó a la par mía.
Jane: -Creo que nos hablamos muy feo allá abajo hace unas horas.
Harry: -Eso creo.
Jane: -No pretendo convencerte de ir a Las Vegas porque sé que no lo harás.
Harry: -Así es. Te amo, Jane. Eres mi única hija mujer y no quiero que te pase nada malo, sé que tienes un carácter fuerte y dominante, incluso más que tu madre. Disculpa si sentiste que te ofendí.
Jane: -En todo caso fui yo la que hice mal en hablarte así ¿Aún me quieres?
Harry: -Jane, yo voy a quererte así tengas escamas.
Jane: -Las escamas se producen por una enfermedad de transmisión se...
Harry: -¡Ok ok! No busquemos motivos para discutir.
Jane: -Te amo, Hazza- lo abracé.
Harry: -Tu madre debe dejar de contarte nuestras cosas- me abrazó.
Jane: -Papá, me asfixias- dije pataleando.
Harry: -Lo siento- me acomodé sobre su pecho.
Jane: -Eres muy guapo, cualquier mujer se moriría por que le hicieras caso.
Harry: -Gracias, hija- Me propuse sacarle información- Pero sigues castigada.
Jane: -Lo sé, no me lo recuerdes.
Harry: -Es tarde ¿Dejaste sólo a Edward?
Jane: -Creo que está abajo con mamá, así que quise tambien tener un tiempo padre-hija.
Harry: -¿Qué es lo que quieres?
Jane: -Nada. Sólo que a veces me siento sola, incomprendida y además, no lo sé. Mamá adora a Edward, y yo tambien necesito de mi papá.
Harry: -Jane ¿Sientes llamativo el desorden?
Jane: -Es divertido hacerlo, te sientes fuerte...tú muy bien lo sabes, el día que hiciste lo del bungee con mamá y todo lo demás.
Harry: -Sí, pero todos tenemos que tener límites...sé que debo dejarte crecer, pero eres mi niña y es un poco difícil, compréndeme.
Jane: -Y tú compréndeme a mí, pongamos ambos de nuestra parte ¿Te parece?
Harry: -Está bien- me abrazó, la puerta se abrió.
TN: -¿Qué es lo que quiere?
Harry: -Según ella, nada- rió.
Edward: -Eso no me lo creo.
Jane: -Eres un...-mi papá me miró- nada- rodeé mis ojos.
TN: -Que milagro están tan cariñosos- se sentó en la cama con Edward.