Sus ojos mirando a través del cristal empañado de esa pequeña ventana del motel, observa a la gente pasar ajena a lo que está sucediendo en el segundo piso del edificio del frente, ignoran la ceniza que cae del cigarrillo que con dificultad ella logra sujetar.
Cierra su puño con fuerza sujetando la cortina roja, su respiración entre cortada sigue empañando el cristal y sus pechos rebotan contra la ventana.
Su mente sigue perdida en los recuerdos a pesar que su cuerpo se mantiene preso de unas fuertes manos.
Sus mejillas enrojecidas y su cuerpo sudado es lo único que la mantiene unida a la realidad que se encuentra viviendo.
Los recuerdos la envuelven y le impiden pensar con claridad.
Ella se encuentra perdida en sus propias dudas ¿Donde se encontrará el?
¿Que estará haciendo? ¿Estará acariciando otro cuerpo? ¿Estará besando otros labios? ¿Estará descubriendo otra piel?
¿O solo seré yo la que necesita entregarse para olvidar?
De pronto siente como lijas las manos que la sujetan, como si quemaran cada parte de su piel, siente como se ensucia de a poco su cuerpo y su alma, lo que ella siempre fue.
Se pierde en la bruma y sus ojos se empañan con las lágrimas. Reprime el llanto que su amante confunde con gemidos.
Las lágrimas caen quemando sus ojos, siente el chasquido de su corazón rompiéndose, sabe que no sirve de nada sentirse mal, sabe que no importa que tanto ame, su amor jamás le corresponderá, sabe que sin importar que haga, de nada le vale sentir.
Y se cierra, su pecho y sus ojos, las últimas lágrimas caen y su mirada se vuelve vacía, no hay más en ella, no existe nada más y nunca más lo habrá, su alma cayó en el olvido y ahora ella no es más que un cuerpo vacío.
ESTÁS LEYENDO
Erotic Moment
PoesíaRelatos de momentos censurados que se desprenden de aquel tabú para contar cada pequeño detalle de agonía, tristeza y sensualidad. El Erotismo jamás fue tan poético como lo es ahora.
