Un final distinto

Prologo

Él y yo nos habíamos hecho muy buenos amigos con el paso del tiempo, al principio en el primer año sí era un idiota, pero conforme pasaban los años dejaba de decirme "sangre sucia" o "come libros" ya hasta comenzaban a ser agradables las peleas, incluso habíamos llegado a entablar una linda amistad. Ante los ojos de los demás seguíamos siendo los rivales de siempre, pero teníamos un lugar donde nadie iba, él y yo siempre acudíamos a la torre de Astronomía la cual ya estaba cerrada al paso de los estudiantes pero por esa misma razón era el lugar ideal para ir sin ser molestados, tres noches a la semana, había semanas enteras en las que nos veíamos todas las noches solo para conversar o contarnos uno que otro sueño al salir del colegio, a veces hasta nos saltábamos los almuerzos con tal de estar un poco más, con el tiempo fuí siento poco a poco sentimientos por él, ya no quería que solo fuéramos amigos. En una ocasión le confesé mi amor con el miedo de ser rechazada, para mí sorpresa era mutuo, queríamos estar juntos, estuvimos aproximadamente así todo el sexto año, todo en secreto y muy discreto.

Ginny y yo habíamos comenzado a salir ese verano, toda su familia estaba encantada de que precisamente yo fuera el que saliera con la pequeña de la familia y como todos los veranos se terminaban había que volver al colegio. A nadie se le hizo raro de Hogwarts que ella y yo saliéramos, pero ese curso pasaron cosas algo raras, para mí sorpresa Draco Malfoy había cambiado, ya no solía ser el mismo chico inmaduro que conocimos, era más ¿Cortés?, Y ya no nos insultaba tanto, en una ocasión comenté que era parte de algún plan su cambio y Hermione se había molestado por dicha acusación, me pareció de lo más raro pero decidí no seguir con el tema. Tiempo después me alejé un poco de mi mejor amiga por el siempre hecho de que ya no la veía, ni siquiera en las horas de comer y siempre que la veía estaba algo colorada, probablemente estaba mal de salud pero no me sentía en posición de decirle que fuera a la enfermería...

Antes de ir a la estación en mi sexto año, mis padres me soltaron la bomba de que me casaría con un amigo cercano entré en pánico, no quería ni loca casarme con Draco o con Theo, eran completamente diferentes a mi en muchos aspectos, pero calmaron esa ansiedad cuando escuché "Te casarás con el joven Blaise Zabini", sentí un alivió, llámenme loca, pero no sonaba mal. Tiempo atrás había notado lo mucho que había cambiado Blaise, le daría una oportunidad de conocernos de otra manera que no fuéramos amigos ¿Por qué no?. Al llegar y subir al tren, nos fuimos juntos y aprovechamos para hablar sobre el tema, estuvo de acuerdo conmigo y empezaríamos a intentarlo, al poco tiempo les confesamos nuestro compromiso a los chicos y se veían confundidos pero nos apoyaron, pero había un chico de cabellera blanca que estaba perdido en sus pensamientos, él tenía algo, pero no importaba, siempre nos decía qué pasaba sin presionarlo.

Este año sería algo duro, mis padres habían decidido terminar con su matrimonio por las infidelidades de mi padre, madre había dejado todo atrás y decidió iniciar nueva vida en América, tuve que quedarme en Inglaterra por el colegio, nada era agradable y al comenzar el año había caído en depresión, me la pasaba solo e intentaba alejar a mis amigos, hasta que un día que merodeaba por el castillo me topé con una rubia algo curiosa, había escuchado que estaba loca porque se la pasaba hablando sola, intenté ignorarla, pero ella habló, a mi espada solo escuché "tienes una mirada muy triste y una cara muy linda", me impresionó la confianza con la que hablaba, después de eso notaba más su presencia hasta que un día decidí seguirle el hilo de la conversación, hablábamos por horas en los pasillos, en las aulas vacías, también en el lago del colegio, notaba como los curiosos nos veían pero ignoraba los comentarios que hacían, un día regresabamos cada quien a su sala común hasta que vimos caminar a ¿Malfoy y Granger? ¿Juntos? "Los he visto varias noches juntos" intenté seguir el camino d ignorar lo que habíamos visto, Luna y yo al poco tiempo empezamos a salir, no le agradó a muchos pero no importaba, yo me había enamorado de ella y ella de mi. Ella me había salvado de la depresión y yo juré cuidarla de todo mal.

Astoria era un año menor que yo cuando la conocí a la edad de 14 años en un baile que dirigía el colegio, recuerdo muy bien el lindo vestido que traía puesto, parecía toda una princesa, desde entonces somos muy buenos amigos, tanto es así que durante un año fue mi mejor amiga hasta que el año pasado la convertí en mi novia oficial, esa noticia fue una bomba para todos, su hermana en todo ese año no quiso nunca nuestra relación, ella era una niña mimada, pero no la culpaba, solo protegia a su hermanita, como yo lo hacía con Ginny. Hacíamos todo juntos, era mi primer relación y quería que siguiera siendo mía por mucho tiempo más, verla feliz era mi perdición y esperaba algún día tener una casita y ella agarrada de mi mano.

Al principio la noticia de que mi pequeña hermana salía con Weasley no me gustó para nada, pensé que solo quería jugar con su joven corazón pero a dónde ellos fueran yo me les pegaba, quería ver de cerca que ese pelirrojo alto fuera respetuoso con ella, pero con el tiempo me dí cuenta que era bueno y cedí, no porque lo haya aceptado, sino que con pasar tanto tiempo con ellos terminé juntandome también con Neville, el tonto amigo de Weasley. Él era un encanto de hombre después de tres meses de conocerlo comencé a salir con él oficialmente, a veces no las ingeniábamos para que durmiera en mi recamara, no veía más que no fuera mi novio, mi hermana y el pelirrojo, me enfoqué en mi relación pero no descuidaba mi amistad con Pansy, ni con los chicos, ellos eran mi soporte y más cuando mis papás se enteraron de nuestras relaciones.