Capítulo 16: Una solución para casi todo.

15 0 1
                                    

Ahí estaba Rodrigo en aquella habitación helada.

— ¿Todo esto eres tú?, no lo entiendo que tiene que ver esto con mis pesadillas.

— Rodrigo, quiero que veas todo lo que soy y tengas fe en la ayuda que te voy a dar.

— Sigo sin entender nada.

— Hace unos cinco años una mujer cometió un grave error, una traición altísima con la que yo también fui afectada, ¿Quieres saber cuál fue su destino?

— Su...supongo que sí.

— Eliminaron sus recuerdos, todo lo que sabía de la isla, absolutamente todo, y fue regresada a su país de origen con cinco mil dólares como liquidación, agentes de seguridad la vigilaron por un par de meses, en el reporte que entregaron mencionan que aquella mujer perdió la cordura, busco y pregunto qué era lo que había hecho durante todo ese tiempo, pero al ser una mujer solitaria y su madre, una mujer muy anciana recluida en un asilo, nadie le pudo responder que paso tiempo en una isla del pacifico, termino internándose en un hospital psiquiátrico.

— ¿Cómo fue eliminaron sus recuerdos?

— Con una máquina especial, la cual se encuentra aquí.

— ¿Quieres que olvide todo acerca de mi esposa para no soñar con ella?, Lanne eso es enfermo, fue trágico, me afecta y me duele, pero no es como que quiero olvidar a una maravillosa mujer como Silvia.

— Ahora espero que entiendas el porqué de que estas en esta habitación, después de ese incidente, se hicieron pruebas y se mejoró la eliminación de recuerdos de manera unitaria, lo que te ofrezco es poder olvidar el recuerdo de tu esposa muerta.

— ¿Pero seguiría recordándola?

— Todo, excepto lo que no quieres recordar.

— ¿Qué debo hacer?

— Vamos a la sala de destitución.

Rodrigo salió de la helada habitación y subió al ascensor, Lanne controlaba su dirección, subió varios pisos fue horizontalmente y volvió a subir.

— Rodrigo, hemos llegado, dirígete a la primer puerta.

Rodrigo vio un pasillo con puertas, como de costumbre, solo que esta vez le recordó al pasillo de las habitaciones donde él dormía. Al entrar se encontró con lo que parecía la extraña combinación de un consultorio de un dentista con la de una sala de resonancia magnética y a su izquierda un gran vidrio oscuro.

— Rodrigo, necesito que te quites todo lo que lleves de metal.

— No llevo nada de metal.

— Excelente, detrás del vidrio a tu izquierda están los controles, yo los operaré.

— Supongo que debo sentarme en la silla.

— Exacto, la silla se ira reclinando para que puedas entrar en la cámara de destitución, ahí dentro estará oscuro y las luces de la habitación se apagaran, cuando esto ocurra un visor se desprenderá del techo de la cámara, colócalo y ajústalo a tu gusto y mantén los ojos bien abiertos hasta que escuches una alarma. ¿Entendido? ¿Quieres que repita algo?

— Todo está bien.

Rodrigo siguió las ordenes, se sentó en la silla y está poco a poco se fue ajustando hasta obtener la forma de una camilla y entro en la cámara, Rodrigo estaba nervioso, pues olvido preguntar si aquel proceso dolía.

— Rodrigo el visor bajara, y esto es muy importante, quiero que mantengas en tu mente el día que todo sucedió, quiero que recuerdes que era lo que estabas haciendo antes de ir a ver el accidente, ¿Que recuerdas?

Los Reyes De La IslaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora