Stuart comenzó a hablar.
—Primero, quiero que vayas hilando todo, ¿Recuerdas lo ocurrió que cuando el primo de Regina, el policía, me entrego?
—Algo de que habías estado encerrado dos años, pero fue un error o te dejaron salir.
—1998, viejo, no fue un maldito error, fue un trato que hice, fui elegido por unos agentes, estos tipos llegaron una mañana, creo que habían pasado unas dos semanas de que había llegado, me hablaron y según ellos fui seleccionado por los cargos que tenía y cómo fue que ocurrió, el tipo al que dispare, el cual murió en el hospital pero me inculparon de haberlo matado del disparo, ¿Hasta aquí todo bien?
—Sí, dos tipos, me imagino sujetos de una organización fuerte del gobierno.
—Estas en lo correcto, bueno la cuestión es que me ofrecieron entrar en un programa experimental, la recompensa de si pasaba algunas pruebas era la reducción de mi condena, pero de fallar estaba firmando mi sentencia de muerte.
— ¿Qué clase de pruebas? ¿Donde?
—El donde es lo interesante de la historia, y es algo que me sigo preguntando desde hace más de diez años, en Dallas, naturalmente hace un calor de los diez mil demonios, pero cuando fui trasladado me llevaron en una furgoneta totalmente tapada, me taparon los ojos con una mascarilla, lo único que se, es que hicimos varias paradas para ir al baño o comer algo, obvio yo solo escuchaba y sentía, pero por lo que mis sentidos me indicaban iba con dos agentes diferentes a los que me habían entrevistado, todo el tiempo sentí calor, un calor abrazante, perdí la noción del tiempo, no sé cuántos días estuve viajando, pudo haber sido un par de días, unas horas, realmente me encontraba totalmente desorientado y eso era parte de las pruebas, no saber en dónde estaba, mi única respuesta lógica, calor.
— ¿Y llegaste a otra cárcel?
—No llegamos a una especie de, lo que quiero pensar, base en forma de cráter, al principio bajamos unas escaleras, pero se sentía que estas escaleras eran grandes y de piedra, luego llegue a un edificio donde sentí la más fresca briza, una bendición artificial, que solo un aire acondicionado en medio de un maldito infierno cálido puede ofrecer, después me quitaron la mascarilla y me encontraba en una pequeña oficina, un sujeto con traje y otro con una bata me comenzaron a explicar que lo único que iba a hacer es que iba a convivir con otros reos de otras cárceles del país un par de días y que me iban a llamar según fuera mi turno, después volvieron a taparme los ojos y me llevaron a una celda de primera tenía muchas comodidades como para tratarse de un castigo, tenía una cama, pequeña pero cómoda, un escritorio con hojas y pluma y un baño con total privacidad, cuando mi estómago comenzó a pedirme comida, esta llego por la rendija, ¿Sabes que era?
— ¿Comida enlatada?
—Un corte de carne Rib Eye con puré de papas y algunos vegetales...
Pero Rodrigo hizo memoria y recordó algo.
—Espera, ¿No es eso lo que comimos el día que conocimos a Lanne?
—Veo que alguien ha puesto atención, exactamente lo mismo.
Rodrigo, trataba de imaginarse que tenía que ver Lanne con todo esto, donde era la parte en la que ella encajaba, pero Stuart continuaba platicando.
—Para mí aquella comida fue un platillo para doblegarme, para sentirme comprometido a cooperar, mi cabeza se llenó de tantos cuestionamientos, pensé que era: veneno, somníferos, algún medicamento que te hiciera más fácil la cooperación, pero no, simplemente era eso un platillo normal, extravagante para unos prisioneros, pero nada fuera de lo común, al día siguiente entre a una sala con los demás reos, el guardia nos dijo que todo lo que dijéramos seria grabado, podríamos comentar lo que fuera con la excepción de mencionar nombres y direcciones exactas, a lo sumo podíamos mencionar el lugar del que veníamos. En aquella sala había cuatro hombres: un anciano al que habían condenado a varios años de prisión por haber abusado de unas mujeres en el metro de Nueva York, Un negro condenado a unos meses por asaltar una licorería en Montana, Un sujeto caucásico, como yo, pero con un peculiar acento sureño de bigote largo condenado por atropellar y matar a una pareja de jóvenes que iban caminando por una de las calles de Luisiana y un panameño que era presuntamente inocente de haber matado a un anciano en California.
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Los Reyes De La Isla
Science FictionUn grupo de investigadores encuentran un mamut en perfecto estado y raíz de esto se desata una epidemia mundial en donde solo algunos son inmunes. Es ahí donde un Abogado y un Matón se unen para escapar de varias empresas farmacéuticas que captura...