La Obsesión Del Millonario

Capitulo 15.

Mi cabeza duele, no quiero abrir mis ojos todo lo que hice mierda si que estuvo mal. No puedo creer viniendo de mi.

Todavía Eros tuvo que traerme aquí a mi departamento, mierda y más mierda. Sobe mi cabeza tratando de aliviar el dolor, y el horroroso tono de llamada se hizo presente.

Sin ver quien era conteste.

–¿Que quieres?–pregunte molesta

–¿Perdón?todavía que me preocupo por ti–susurraron en la otro línea esa voz la conozco. Y como no hacerlo (Louis)

–¿Dime de una vez que cada que hablo siento que me pegan con un martillo–dije

–bien–dijo alargando la "e"–en la cocina te deje tu desayuno sali a desayunar con un amigo también te deje algo para la resaca.–hablo y colgó.

Mátame jesus, y si es que existes.

No es que no crea en el pero nunca me inculcaron una religión así que me es indiferente.

Me levanté de mi cama apoyando mis codos sobre el colchón y cerré mis ojos por el mareo que se avesinaba. Unas ganas de vomitar se hicieron presentes, enseguida me levanté y fui directo al baño vomitando todo.

–joder–susurre después de desechar todo.

Me ví en el espejo y me veo terrible, tengo el rimel corrido mi delineado se corrió hacia mi ceja pareciendo que tengo los ojos rasgado y con mi labial corrido parezco payaso.

Suspire y y eructe ese eructo me dio más ganas de vomitar, cerré mis ojos tratando de calmarme. Odio vomitar.

Después de que los mareos se fueran, pose mis manos sobre el lavamanos y abrí la llave dejando que corriera, puse mis manos y empecé a lavar mi rostro dejando que el agua fría en mi cara me tranquilizara. Me lave mis dientes y sali del baño en busca de unas toallas húmedas.

Al encontrarlas limpie mi cara por segunda vez retirando los restos de maquillaje y fui directo a la cocina por que mi estómago rugia.

Tome mi desayuno hecho especialmente por mi queridísimo hermano tome mi pastilla y me senté en el sofá encendiendo la TV.

–el señor magnate Eros Ramazzotti ah declarado que es soltero nuevamente –dijo la mujer que daba las noticias y casi me atraganto.

–bueno clara ya se veía venir a su esposa, Leah Thompson se le veia muy alegre con otros hombres–dijo el hombre a su lado.

Me volví a atragantar por segunda vez al ver a Carlo en una foto junto a mi, estábamos en el centro comercial, joder.

Me levanté enfurecida y tome mi celular y antes de marcar tocaron la puerta de mi casa, camine hasta la puerta y la abrí viendo a un Eros agitado.

Frunci mi ceño y al momento en que el levanto su rostro plasme mi mano en su mejilla, desde hace tiempo tenía ganas de hacer algo así.

–¡ERES UN VIL IDIOTA !–grite ocasionando que mi cabeza doliera.

–leah escúchame un momento ¿Si?–hablo autoritario

–¿o si no que? Ya viste –señale la Tv–me dejan como una puta Eros quien les dió el permiso de usar mi nombre jodida madre la has cagado, la cagaste–caminaba de un lado a otro jalando mi Cabello frustrada.

–leah, hice todo lo posible par que esto no saliera a la luz –dijo entrando a mi casa

–no entres a mi casa, ¡vete!–alargue mi mano en dirección hacia la puerta –si realmente lo hubieras querido lo hubiera refundido por debajo de la tierra ¿Me crees tonta acaso?–pregunte