30 Day OTP Challenge || SYSACK

Contra La Pared

Drabble

Ni siquiera puedo recordar el momento exacto en el que comenzamos a desviarnos de nuestras actividades.

Hay pintura azul en mi rostro y manchas de pintura blanca en el rostro de él. Intente hacerle un bigote al chico lampiño y en su lugar parece que acaba de beberse un vaso de leche.

Mi mano derecha esta metida hasta el fondo de sus pantalones y la otra recargada en la pared con pintura fresca; los jadeos que provoca mi toque me ponen duro con cada segundo que pasa.

En su cabello también hay pintura y la puedo ver ahora que los mechones negros caen por frente pegándose con el sudor a su piel blanca.

Beso su boca entre abierta aprovechando para invadir toda la cavidad con mi lengua. Se ve perfecto frente a mí, recargado sobre la pared.

Saco mi mano de su ropa interior y mi novio suelta un sonido de queja que me hace soltar una risa. Lo volteo para que quede de frente a la pared y se recarga sobre ella sin importarle que su mejilla se este llenando de pintura.

Bajo sus pantalones y con ellos sus boxers.

No creo que él realmente necesite ser estirado, no después de las tres sesiones que hemos tenido ésta misma mañana. Pero aún así lo hago porque oirlo gemir siempre será necesario.

Introducirme en él siempre se ha asemejado a entrar en alguna clase de paraíso terrenal. Privado y exclusivo para mí.

Doy embestidas suaves al principio, lo miro apoyar sus manos a la pared. Tratando inútilmente de obtener algo de que sujetarse.

Sé que he encontrado su próstata, porque sus gritos de placer pidiéndome que siga y su manera en que se remueve entre mi cuerpo y el muro de ladrillos es simplemente gloriosa.

Empujo dentro de él una y otra vez y nunca me cansaré de esto porque me encanta, porque lo quiero, porque estoy enamorado de éste hombre, porque lo amo y porque ahora tendremos un departamento para pasar cada momento íntimo que queramos.

Sigo con mis espujes, más profundos y rápidos y siento mi muerte en cuando él aprieta su trasero al rededor de mi pene.

Su cara es un desastre sudoroso con pintura por todas partes y me encanta, porque él es toda una obra de arte.

Me corro dentro de él y él se viene contra la pared que recién habíamos pintado.

"No creo que la pintura alcance sí sigues haciendo que pintemos dos veces."

"Pues deja de recargarme contra cada pared que ves, Sykes"

"Es inevitable. Eres toda mi adicción."