Estoy cansada de absolutamente todo, no he dicho nada a las chicas sobre el asunto con mi familia, pero hasta este punto me voy dando cuenta que todo lo que quiero es ser aceptada en esta sociedad, aunque no lo quiera aceptar.
Tengo 1 mes sin salir ni comprar absolutamente nada de ropa, siempre que las chicas quieren salir pongo cualquier estúpida excusa que se me ocurra, soy toda una experta en mentir ahora, las cosas que he hecho en este mes que para mí fue eterno es; mentir, MENTIR y M E N T I R, tampoco me he disculpado con mis padres pero aún así me hablan, y todavía no logro adaptarme a esta nefasta vida, y ni hablar de Ian, desde aquella vez que me llamó zorra no he contestado ninguna de sus llamadas, pero el siempre está molestando. Escuché que alguien tocó la puerta.
- Hola, antes de que me cierres la puerta en la cara, te pido que me escuches.
- Ya deja de humillarte así Ian, no pienso regresar contigo, no pienso salir contigo y mucho menos arreglar las cosas.
- Por favor, déjame hablar.
- Tienes 5 minutos.
- ¿cuantas veces tengo que decir lo siento? De verdad te amo Sara, discúlpame por favor, te juro que te quiero más que a nadie en este mundo.
Soy un poco tonta, pero ni de puto chiste regreso con el, aún así sea muy guapo, entendí desde que media escuela se rió de mí, no dejaré que pase de nuevo.
- No me interesa que digas que me amas, esto termino y tienes que aceptarlo, así que deja de humillarte porque provocas que quiera hablarte menos, adiós y no vuelvas a venir.
De verdad me siento jodidamente mal, aunque tengo que demostrar lo contrario para que mis amigos no noten nada raro, me siento muy muy mal, tan mal como para matarme en este momento, aunque no hay necesidad de quitarme la vida, estoy segura que moriré de tristeza.
- ¿Quién era? -dijo mamá.
- Era Ian, aún quiere que regresemos, es muy estúpido.
- Si vuelve a venir no abras la puerta de nuevo.
- Ok, ¿a donde vas?
- Iré a pedir un préstamo, cada vez el dinero va peor cariño, pero vas a ver qué mejorará pronto, y se que es difícil que te adaptes pero no podemos hacer más. Vuelvo más tarde.
Me controlé diciendo un "si" con la cabeza haciendo una sonrisa fingida
Salió en dirección a su auto y se fue. Alguien tocó la puerta de nuevo.
- Hoy es noche de chicas Sara FIESTAAAAA -dijo Emma.
- ¿Chicas que hacen aquí? Mamá todavía no me deja salir.
- Es por eso que vinimos aquí tontita, además tenemos media hora afuera esperando a que se vaya tu mamá.
- Pero no las invité, salgan de mi casa por favor
- Uy Sara, ¿Terminaste con Ian o estás en tus días? Eres tan antisocial que ni siquiera podemos hacer pijamada en tu casa, esta no es la Sara que conozco.
- No estoy en mis días pero si terminé con el, pero no tiene que ver con que este amargada.
- Por dios, tuviste una oportunidad que muchas chicas quieren y la desperdiciaste.
- No iba a dejar que un estúpido como el me tratara así.
- Ay ya, tranquilas todas, Meg, ¿Trajiste el tequila?
- Uff, fue una misión traerlo sin que mamá se diera cuenta
- ¿Emma trajiste los cigarros? - dijo Tiffany riendo.
- ¿Chicas que les pasa?, no pueden fumar aquí
- ¿Es enserio? Pareces mi madre -dijo Emma.
- Ya por dios, déjate llevar, además tienes mucho tiempo sin tomar alcohol.
- Está bien, solo uno -dije sin pensarlo.
¿Solo uno? ¿SOLO UNO? Sabes que cuando dices "solo uno" terminarás con resaca por semanas.
*
El dolor de cabeza me despertó de repente y ahí fue cuando me di cuenta que soy muy estúpida por hacerle caso a mis amigas.
- Chicas, ¿Que pasó? -dije quitando la baba de mi barbilla.
Al no escuchar respuesta por ninguna de mis tres amigas, me levanté del piso entre cigarros y botellas de tequila, bajé a la sala donde vi que los 100 dólares sobre la mesa ya no estaban, ni el dinero y tampoco rastro de las chicas.
Me detuve a pensar que fueron ellas quienes se llevaron el dinero, pero si eran mis amigas era porque les tenía confianza, ¿no?. Michael me sacó de mis pensamientos de un codazo en el brazo.
- Hey, ¿que te pasa idiota?
- Nada, pero te quedaste inmersa en tus pensamientos, ¿estás bien?
- Si, oye, a propósito, ¿No viste 100 dólares que estaban en la mesa ayer por la noche?
- No, pero no me sorprende que alguna de tus estúpidas amigas se lo haya robado.
- Por dios, siempre estás en contra de ellas.
- Es que es la verdad, parece que planearon la "pijamada" de anoche.
- ¿A que te refieres?
- Bueno, ¿no te has puesto a pensar qué tal vez te dejaron ebria para llevarse el dinero?
- Podría ser, pero no puedo culparlas si no tengo pruebas.
- Pues mira... - Michael me hizo una seña de que mamá iba bajando las escaleras
- ¿Por qué están despiertos tan temprano?
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Nada Es Para Siempre (sin editar)
Teen FictionSara es la chica más deseada del instituto, tiene la idea equivocada de que ser hermosa y la más popular es ser perfecta, su vida se basa en ser lo más superficial del mundo. Desde ese día en el que la vida de Sara da un giro inesperado, conoce a un...