Nada Es Para Siempre (sin editar)

12. Creer o no

- En serio, no vengo aquí a hablar de lo qué pasó, solo dime si los has visto.

- Siempre has sido tan ingenua, y supongo que no has ido con la policia a contar todo.

- Eso es lo que menos me importa ahorita.

- Mira se que estás desesperada, pero no se nada de verdad, ayer cuando terminé mi jornada en la noche fue cuando fui a tu casa, los vi aquí pero cuando me fui ellos seguían aquí adentro.

- Mira Ian si est...

- No, de verdad no estoy mintiendo, y pienso que tú y yo tenemos que hablar de lo qué pasó, la verdad no quise infringir así en tu casa, estaba muy ebrio, ni siquiera recuerdo bien que hice.

- No quiero hablar de eso, no puedo buscar a mis papás enojada.

- Mira, le digo a mi jefe que me dé el día, te acompaño a buscarlos.

Aunque pensé mucho la propuesta, accedí, tal vez llegaba a recordar si los vio.

- Bueno, habla con tu jefe.

Ian se acercó a su jefe y el asintió.

- Entonces nos vamos -Dije- Ven acá Michael

Nos subimos al auto y el camino se hizo incómodo, yo conducía y mandé a Ian a los asientos de atrás, ni de broma pensaba tenerlo a un lado.

Comenzamos a recorrer todos los rincones de la ciudad, y al no dar con él paradero de mis padres, dejé a Ian en su casa y Michael y yo nos fuimos a la nuestra.

- Sara perdón pero yo no pienso bajarme de este auto sin saber en donde están.

- Ya veremos que hacer Michael.

Antes de bajarnos del auto nos dimos cuenta de que las luces de la casa estaban encendidas.

- ¿Tú las dejaste encendidas?

- No, yo me aseguré de apagarlas.

Nos bajamos del auto aún con el miedo de que alguien estuviera en nuestra casa.
Abrí la puerta y ahí estaban, mis papás con cara de desesperación.

- ¿EN DONDE ESTABAN? -Gritó mi mamá.

- Es inconcebible que no contesten sus celulares, ¿Que les pasó? -Renegó mi papá.

- Espera un momento, nosotros estábamos buscándolos a ustedes -Dije con mucha confusión.

- POR SUPUESTO QUE NO, y no trates de invertir los papeles Sara Jones.

- Mamá, ¿en donde estaban ustedes? Ayer que se fueron a cenar con Michael y lo dejaron en la fiesta, ya no regresaron a casa, me quedé esperándolos.

- Cuando cenamos un chico muy amigable en Jimi's se veía preocupado por ti Sara, nos dijo que no estabas en casa porque él te había llamado muchísimas veces y te buscamos en toda la maldita ciudad.

- IAN -Dije entre dientes- ese maldito los engañó, les dijo que no estaba en casa solo para qu...

Me quedé callada antes de decir que Ian vino a mi casa solo para golpearme y reclamarme que lo había dejado.

- Termina la oración Sara -gritó mi mamá.

- Eso no importa, yo estaba en casa anoche, solo les pido que no le crean, siempre miente.

- ¿Y cómo voy a saber si es cierto?

Lo primero que vino a mi mente fue que hablaran con Jessica, pero estaba segura de que se iba a poner como loca.

- Algún día tienes que creer lo que te digo mamá.

- Súbanse a su habitación.

Me subí muerta del coraje por Ian, había logrado engañarme una vez más, pero al mismo tiempo estaba recordando a la persona que me había salvado, y qué tal vez no era tan mala como pensé. Jessica.