Campamento zombie (Camren)

DIA 5: "ENTRADA AL CAMPAMENTO Y PELEA DE NUTELLA"

Diario de Camila:

Este era el segundo día que me levantaba en una casa que no era la mía, y me estaba empezando a acostumbrar.

Cuando abrí los ojos, lo primero que ví fue la gran habitación en la que me encontraba. Definitivamente, este no era mi cuarto.

Me giré y empecé a observar todo con atención, recordando mi fiesta de cumpleaños, mis regalos y... la canción. La extraña canción de Lauren. Hablando de ella ¿dónde estaba? Estaban todas menos ella.

Me levanté para buscarla, hasta que me dí cuenta de una cosa que no había captado antes: Dinah y Normani estaban abrazadas. Que raro, normalmente soy yo la cariñosa, no Dinah. Aunque entiendo que estén abrazándose, Dinah es muy abrazable.

Salí de la habitación y fuí al baño, esperando encontrarla ahí. Sin embargo, no estaba en él. Baje al piso de abajo un poco preocupada, me estaba asustando ( soy un POCO paranoica) y allí la encontré por fin. Estaba cocinando algo que no pude apreciar, tampoco me fijé mucho en ello, más bien me fijé en la increíble belleza que tenía, aún recién levantada.

Tenía el pelo recogido en un moño, iba con su pijama, que era una camiseta muy grande la cual me dejaba ver sus largas y bonitas piernas, y con los números 1975 (un grupo de música) grabados en ella. Me estaba perdiendo en su belleza natural, cuando de repente, la escuché carraspear, y me obligué a levantar mi mirada a su rostro. Tenía un brillo especial en los ojos y sonreía porque me había pillado.

C: Vaya, no sabía que te gustaba cocinar- dije riendo e intentando olvidar que me ha visto mirándola.

L: Sí, desde el primer ataque cocino mucho, siempre que dormíamos en casa de Ally yo hacía el desayuno, porque las demás son unas vagas, así que al final aprendí a la fuerza- explicó riendo- además, no sé si te has dado cuenta, pero los padres de Ally tienen contactos con los del gobierno- Claro que me había dado cuenta, ¡tiene una maldita piscina!- y por eso tienen esta casa y no siempre tienen que pedir la comida enlatada, algunos días le dan cosas para cocinar.

C: Se nota bastante- reí- ¿cómo has dormido?

L: Bien, pero me costó un poco con los ronquidos de Dinah- bromeó. Aunque tenía razón, Dianah tiene un gran problema, no sé como no se despierta ella misma al hacer ese ruido.

C: Te entiendo, antes a mí también me costaba, pero me he acostumbrado, ¿te puedo ayudar con eso?- pregunté señalando la cocina.

L: Claro, estoy haciendo creepes.

C: ¡Oh dios mío, Lauren! ¡ Amo las creepes! Bueno, en realidad, amo la comida en sí- bromeé, aunque lo decía enserio, ella soltó una carcajada. Casi me da algo al escucharla reír, he de decir que es el mejor sonido que puedes escuchar por la mañana.

L: Pues estás de suerte, y como ayer sobro un poco de nutella podemos echársela a las creepes.

C: Lauren, ayer no te lo pude decir bien, pero tus regalos fueron increíbles, y... la canción...

L: Ya, bueno... gracias- dijo tímida.

C: Enserio, ¡tu voz es increíble! ¿Eres consciente de que todas las noches te voy a pedir que me cantes?

L: ¿Me estás diciendo que quieres que todas las noches durmamos juntas?- preguntó alzando una ceja, yo me mordí el labio inferior. Mierda, sin querer le había mandado una indirecta, aunque, ¡claro que quiero dormir con ella todas las noches! ¿quién no querría?

C: No me refería a eso- reí, pero espera, en realidad si me refería a eso ¿no?- bueno, ¿ te ayudo? que tengo hambre- dije sacándole la lengua.