Capítulo 4. No más lágrimas

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Jiwoo

¡¿Qué estaba pasando conmigo?!

Mi cabeza no dejaba de recriminarme mis actos impulsivos que me habían orillado a estar en donde me encontraba ahora, en los brazos de un desconocido, quien además era un chico bastante guapo, porque... Vamos, una chica sabe apreciar cuando un atractivo y sexy hombre está cerca, y BM realmente lo era.

Y si es que llorar no era lo suficiente humillante, el que las barreras que tanto había trabajado por mantener intactas, se habían roto por un descuido mío. Y aquí estaba, sintiéndome una completa idiota y a la vez también me sentía protegida o más bien "salvada" de que algo pasará con J.seph, aún no estaba preparada para afrontarlo.

Me separe de los fuertes brazos de Matthew, en este momento agradecia de que él fuera tan alto y no pudiera ver mi rostro en este momento, aún así no pude evitar ser cuidadosa de no mirarlo.

Él no puso resistencia ante mi separación.

-Podrías... tú podrías... - tartamudee al no encontrar las palabras adecuadas por mi comportamiento, me sentía tan avergonzada - ¿olvidarlo?

Al fin las palabras pudieron salir de mi boca, un tanto torpes y sin sentido comprendí cuando BM decidió contestar ante mi petición.

- ¿Olvidarlo? - pregunto confundio- El que quizá tu bello rostro este un poco manchado por esa cosa que usan en las pestañas - prosiguio-, no tienes que preocuparte por eso Jiwoo, al menos no conmigo.

Quise reír por su conjetura.

-No me referia a eso - negué y levanté la mirada -. No me importa que me veas de esta manera, pero quisiera que olvidaras que me viste llorar -confesé y de nuevo baje la mirada.

Nunca nadie me había visto llorar desde la 'despedida' con Taehyung, pues me había vuelto una roca sin sentimientos desde ese día.

Senti la mirada de Matthew taladrandome pero no le devolví la mirada, quería escuchar su respuesta pero lo único que pude sentir fue el silencio apoderándose de mi y de repente unas cuántas risas acercándose.

Entre en pánico, no quería que nadie me viera en este estado. Gire mi cabeza en ambas partes y calculé la posibilidad de poder esconderme en el casillero.

Las voces iban cada vez más cerca. Fue cuestión de segundos en los que BM me atrajo una vez más a sus brazos y comenzó a despeinar mi cabello.

-Eres tan graciosa -dijo y comenzó reír con fuerza.

-¡Oye! - me revolvi incómoda entre sus brazos y seguí su juego. Nuevamente cuidaba de mí y aun cuando no me gustaba la sensación, agradeci por ello. Cuando las voces se fueron alejando, él muy gentilmente con la manga de su chamarra comenzó a limpiar mi rostro.

Me quedé inmóvil por la sorpresa de aquel gesto.

-No más lagrimas de acuerdo - sonrió. Entonces entrelazo nuestras manos y comenzó a correr a la salida.

-¡¿Qué, a dónde me llevas?! - replique agitada por la poca condición que tenía y por los odiosos tacones que había decidió ponerme hoy.

BM no dijo nada, sólo se giro para mirarme y me regalo una maravillosa sonrisa.

No tarde en descifrar que nos estábamos fugando de la escuela, jamás lo había hecho a pesar de mi faceta de 'chica ruda' era una niña buena.

-Deje todas mis cosas atrás- volví a decir y de repente nos paramos y mi nariz se topo con su espalda.

-No te preocupes por eso Jiwoo - mencionó mientras separaba nuestras manos para sobar mi nariz-, regresaremos antes de que terminen las clases.

- Yo no quería saltarme las clases - solté con sinceridad y ahí estaba yo, de nuevo apareciendo con la Guardia baja y sincerandome.

TOCANDO EL CIELO (KARD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora