✔17 - Las lágrimas del mago-ladrón.

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Lucy Pov

Abrí mis ojos y noté a Natsu con unos cuantos rasguños a lado de mí, en una situación similar a la mía, acabando de levantarse.

Sting y Rogue seguían con nosotros, al parecer no había pasado mucho tiempo desde que nos desmayamos.

-Lucy, tienes que resolver los problemas con Janice.- Habló Rogue de repente, me sorprendí al escuchar aquello.

-¿Q-Qué? ¿Porqué?- Cuestioné mirándolo.

-Ella no puede luchar, de echo, parece estar arrepentida de habernos atacado- Respondió Sting con total neutralidad.

-¿Hablaron con ella?- Me levanté con pesadez -Auch!- Emití un sonido de dolor, pues aún me ardían los rasguños que tenía en los tobillos y en las muñecas.

-Ibamos a ir a detenerla, y cuando la encontramos y le propusimos pelear, simplemente dijo que quería platicar contigo, su rostro reflejaba tristeza.

Me quedé con cara de "ke" y comencé a pensar en Janice... ¿Para qué querría hablar conmigo?

Considerándolo bien...

¿Por qué debería "charlar" con el enemigo?

No sé, creo que tengo corazón de pollo y la compasión para mí es más común que el fanservice, y ustedes saben que eso ya es mucho.

Me encaminé acompañada de Natsu y el resto, ya que al parecer, el pelirosa no confiaba mucho en la palabra de Janice, puesto a qué él aún no había visto el gesto "arrepentido" del que hablaban Sting y Rogue.

Al llegar hasta dónde estaba, la ví, sentada sobre una roca de cemento destruido, en un lugar completamente sucio, el lugar donde Rogue y Sting habían derrotado a Coelum.

-Lucy Heartfilia...- Susurró ella mientras las lágrimas comenzaban a escurrirse de sus ojos. Tal vez realmente estaba arrepentida.

-Janice...- Me acerqué a ella, lentamente. Había una sensación extraña en mí, una indescriptible. Sentía que mi cuerpo estaba tembloroso, sin motivo alguno.

Janice me extendió sus brazos ¿Quería abrazarme? Esto es muy extraño. Sentía una penetrante mirada justo a lado de mí, pero no podía voltear.

Mis piernas se comenzaron a mover solas y era imposible que pudiera controlarlas. Coño ¿Por qué sólo me pasan estas cosas a mí? Janice lloraba, era mucho más extraño aún, caminar a alguien a quien le escurren lágrimas de los ojos, sabiendo que no puedes controlar los pasos que das.

Había reconocido que ellos no eran fuertes, si no que sus magias eran estratégicas, como si los hermanos Frigus hubieran querido deshacerse de nosotros 4 en un instante, sabiendo que el humo, el sonido, el cambio, la gravedad y ahora la aparente posesión de cuerpos, nos darían trabajo.

No estábamos agotados como cuando luchábamos contra los gremios oscuros, o como cuando derrotamos al Imperio Álvarez, pero era obvio que nos sentíamos pesados debido al esfuerzo que habíamos empleado.

Janice solía ser una niña temerosa en el pasado, que siempre se ocultaba detrás de Coelum y Sound. Era tímida, introvertida y siempre tenía miedo cuando alguien que a simple vista era "malo" se acercaba.

Según mi padre, ellos eran mis amigos de la infancia, a los 8 años. Sin embargo, nunca los considere mis amigos de confianza.

No por nada, si no por que ellos nunca me visitaban, al único que veía seguido era a Coelum y era al que más apreciaba. Sound y yo no eramos tan cercanos pero convivíamos, y con Janice, nunca tuve una relación muy abierta, siempre le daba pena hablar conmigo.

Shippeando Nalu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora