También me cansé...

3 0 0
                                    

Su caminar se tornaba frío, era tan inevitable una mirada a lo ojos entre ambos, pero (sí, ese maldito pero), el no tendría el valor de hacerlo...
Ella confundida empieza la conversación - ¡Hey! ¿Sucede algo? Desde que nos hemos encontrado no has dicho ni una sola palabra- él la escuchaba y en silencio seguía caminando, de pronto la incertidumbre recorría por ella- ¡Oye ya basta! ¿Me hiciste venir para que simplemente no me digas nada? - alzandole la voz colocándose frente al él- ¿Qué sucede contigo? - le volvió a repetir- ¿Es que a caso tienes algo que decirme y no tienes el valor de hacerlo?
Discúlpame - respondió él- tengo que confesarte algo. Tú sabes que en estos últimos meses lo nuestro se ha ido debilitando, a penas hablamos, en nuestras conversaciones están las típicas respuestas cortantes... - ¡Ya basta con tu discurso! ¿Qué tienes que decirme? - dijo ella con una voz prepotente- Ya no te quiero - dijo el con voz interrumpida y una mirada perdida- ¿Es una broma verdad? ¿Hay otra? - respondió ella sarcásticamente- No, no hay otra, es la verdad, y para ser sincero, no entiendo tu risa - respondió incómodo- ¡Bien, está perfecto! -respondió ella- ¡No, no está perfecto! Mira tu actitud, ni eras así cuando te conocí, parece que a penas te importara lo nuestro, parece que nunca te importó- respondió confundido- ¿A caso hay algo más que no esté perfecto en mí? Porque por casualidad te recuerdo que no soy perfecta, ¡Y nadie lo es! -replicó ella girando en dirección a su casa, el tomando de su brazo la gira delicadamente y le responde- Sé que no lo eras desde aquella vez que ingresé a nuestra salón de clases, y te juraría que amé tus imperfecciones, pero también me cansé - respondió mirándola a los ojos y soltando de ella - ¡Perfecto! - repitió ella tirando del brazo y arrojando al paso una cadena que él le regaló...

Estaciones grisesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora