-Ed, ven- dije levantándolo bruscamente de su silla - ¿Qué pasa?- me preguntó nervioso -Tenemos que practicar- le dije observando a Norte el cual le susurraba algo a Peter y este lo miro confundido - ¿Segura es solo eso?- me preguntó sonriendo, una sonrisa que me erizaba los vellos de mi cuerpo -Bueno, no, pero ven, te explico en el camino- le dije riendo y lo sujete de la mano para que me siguiera.
Llegamos a donde estábamos entrenado antes y ahí ya estaban Peter y norte esperándonos
- ¿Es una buena idea? - preguntó el chico nervioso -Vamos Ed, eres muy bueno, seguro ganas- le anime mientras nos acercábamos
- ¿Listos? - preguntó Norte dándole una espada a cada uno de los hermanos -Solo, tengan cuidado- dije para ir junto con Norte a un costado
-Solo que no lo harán como están acostumbrados- dijo norte y todos lo miramos confundidos, y él, con una sonrisa triunfante, lanzó un silbido para que acto seguido apareciera este sobre un caballo marrón y la pequeña Lucy en un unicornio -En la guerra tendrán que pelear arriba de sus caballos, asi que es mejor que se acostumbren desde ahora- dijo sin dejar de sonreír -Eres un tramposo de mierda- le dije solo con el movimiento de mis labios y él soltó una carcajada
- ¡Miren es un unicornio! - decía Lucy emocionada
-Yo seré el testigo y daré la última palabra- dijo Este mientras le entregaba el caballo a Ed; él cual se veía con una sonrisa de nerviosismo y emoción
- ¿Necesitas ayuda? - le pregunté, pero él negó con la cabeza y subió al caballo fácilmente -No pongas el caballo de frente al otro, ponlo un poco diagonal a este y mantén la espada siempre arriba- le sugerí
- ¿Y si me caigo? - preguntó -Te vuelves a levantar- le dije acercándome a donde estaba Este, Lucy y Norte -Esto me parece una mala idea- dijo Este y todos, menos Norte, asentimos con la cabeza mientras veíamos a los reyes intentando mantener el equilibrio sobre los corceles.
-Recuerda Ed, la espada arriba, - le dijo Peter a Edmund, ya se habían adaptado bien a la montada y después de un par de pequeños combates de adaptación iba a empezar el definitivo - ¡No aconsejes al contrincante! - le regañó norte provocando las risas de todos
-En guardia- dijo Ed y empezaron a chocar espadas, Peter atacaba con fuerza, pero Ed era más rápido y esquivaba con facilidad. Todo apuntaba a que Edmund ganaría, cuando, note que a lo lejos venía el Sr. castor bastante preocupado, el caballo de Ed al ver a él castor se levantó en dos patas alterado y me acerque rápidamente para cuidar que no cayera de forma que se lastimara demasiado -Tranquilo chico- le dijo Edmund acariciando su costado -Mi nombre es Philip- le dijo el caballo y este se sorprendió; Norte, Este y yo nos reímos al ver su cara de sorpresa -Lo siento- dijo Edmund
- ¡Hey, chicos! - dijo el castor para que todos le pusiéramos atención y todos nos acercamos a él -La bruja blanca quiere una audiencia con Aslan, ¡Viene hacia acá! - nos dijo el castor, todos nos miramos preocupados y fuimos corriendo a ver cuándo sentí que alguien me sujetaba del brazo, pensé que era Norte, pero no.
-No vayas a hacer ninguna estupidez- dijo este mirándome seriamente -Haré lo que sea necesario para proteger a Edmund- dije lo más segura que podía, pero ese sentimiento, ese miedo me empezaba a invadir, carcomiendo mi seguridad -Habló en serio Oeste, mantente al margen y deja que Aslan se encargue- advirtió apretando su agarre, no conteste nada y con una mirada retadora me solté de su agarre y fuimos corriendo a la carpa de Aslan.
- ¡Jadis, reina de Narnia, emperatriz de las islas solitarias! - iba gritando un enano delante de los ogros que traían a la bruja en un trono, con una parte de sus tropas como guardianes. Los ocho ya estábamos ahí cuando la bruja paso delante de nosotros, Ed me sujeto nerviosamente de la muñeca, estaba sudando hielo, sabía lo nervioso que estaba así que lo empujé tras de mí, apartándolo de la gélida mirada de la bruja en señal de protección a lo que ella solo mostró una leve sonrisa burlona.
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LATIDO/ El león, la bruja, la profecía y los guardianes (LCN#1)
Fanfiction"-¿Que me harán?- tartamudeó y podía entenderlo... -¿Que me van a hacer cuando lleguemos?- Preguntó de nuevo, más nervioso y un poco alterado -Nada, no dejaré que te hagan nada, lo prometo- le dije tomando su mano..." Cuando la más pequeña de los h...