LATIDO/ El león, la bruja, la profecía y los guardianes (LCN#1)

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- ¡Peter! - escuché a Lucy y a Susan mientras iban a abrazar a Peter, yo no sabía qué hacer, Edmund no reaccionaba, mi corazón se detuvo y empezaba a doler, un nudo en mi garganta se empezaba a crear y las lágrimas empezaban a brotar de mis ojos

- ¿Y Edmund? - le preguntó Susan a lo que Peter nos señaló y ellas se acercaron corriendo - ¡Oeste! - grito Lucy; vi a Susan lanzar una flecha, voltee y vi que el enano de la bruja estaba en el suelo con una daga en mano y despertando de mi shock mi llanto empezó a surgir

- ¡Oeste! - escuché gritar a Norte el cual venía corriendo junto a Sur y Este. Los dos grupos llegaron hacia donde estábamos nosotros y Sur le quitó el casco a Ed mientras que Lucy le abría la boca para verter el líquido del ojo de la flor del fuego, le dio un par de gotas pero no reaccionó lo que hizo que mi llanto aumentará, mientras Peter consolaba a Lucy y Susan, Este me abrazó comprensivo pero de repente, sentí como se movía y me separé de Este para acercar mi cabeza al pecho de Ed, pude escuchar su corazón latiendo y un momento después levantó su cabeza la cual chocó con la mía provocando una leve risa, él se incorporó lo suficiente para que lo abrazara y él me correspondiera con un ligero beso en la mejilla que no provocó más que aferrara mi abrazo

- ¿Por qué nunca haces lo que te ordenan? - dijo Peter riendo mientras que ayudaba a Ed a levantarse para acercarse a abrazarlo mientras Susan y Lucy se unían a el abrazo; yo me separe de ellos solo para ir con mis hermanos

-Nunca vuelvas a asustarnos asi- me dijo Este serio mientras me abrazaba tan fuerte que dolía -Por Aslan pequeña, a la próxima comparte tus planes- me dijo Norte una vez me solté de Este - ¿Próxima? - dijo Sur riendo y abrazándome rápidamente

-Nos estamos volviendo cada día más humanos- les dije un poco más seria al notar la temblorosa mano de Este que intentaba esconder y me di cuenta que su corazón también se había descongelado -Y eso me preocupa- dijo Sur y los cuatro nos quedamos callados observándonos unos a otros, mientras más humanos nos volviéramos más dependeríamos de este cuerpo, tendríamos más hambre y la sed se haría más fuerte, el sueño nos debilitaría y aunque los corazones de Norte y Sur siguieran quietos tendrían que empezar a temer sangrar ya que las heridas tardarían en curar y la muerte nos devolvería el alma más difícilmente a nuestra forma material

Aslan se acercó a los ocho y soplo sobre un soldado de nuestras tropas convertido en piedra que acto seguido se des petrificó, Lucy comprendió el mensaje y se dirigió a curar a las demás tropas mientras nosotros ayudamos a todos los demás.

Pasadas varias horas me acerque a Este

-Déjame ver tu mano- le pedí y él, rendido me la paso, podía sentir el sudor frío en esta -Pasó por mi culpa- susurré, ahora podía tener una idea de la culpa que sentía Norte -No se porque, sabía que no habías muerto, sabía que en cierta forma regresarías pero...- Este titubeaba -Ya lo dije, nos estamos humanizando- lo interrumpí -Quiero huir y no sé porque- dijo tembloroso, me dolía verlo así, siempre había sido muy seguro, la mente fría y no dudaba pero ahora era solo un tembloroso niño -Tranquilo, solo tienes miedo y está bien- dije acercándolo a mí para abrazarlo -Nos tendremos que ayudar mutuamente desde hoy- susurré en su oído mientras acariciaba su cabello -Juntos- agregué, no lo dejaría solo con esto, no podía.

Dos semanas después:

Era el día de la coronación, el día en que los cuatro tronos de cair Paravel serían ocupados otra vez, el día en que la paz volvería a reinar por toda Narnia

Durante esas semanas anteriores Edmund y yo habíamos estado juntos todo el tiempo que podíamos y a veces nos escapábamos a montar en las noches por la costa, el sentimiento que tenía hacía él se hacía cada vez más grande.

Susan, Lucy y Sur me obligaron a ponerme un vestido a lo que acepte de mala gana, el vestido era tan largo que arrastraba y era de un verde muy clarito con flores de color verde oscuro y dorado y una capa verde oscuro, Sur usaba un hermoso vestido violeta claro con detalles plateados y capa morada, Lucy portaba un vestido liso plateado con una capa roja y Susan usaba un vestido color plateado y una capa de color azul

-Nos encanta la idea que se queden a reinar Narnia- dijo Sur mientras terminaba de peinar a Susan -Es nuestro hogar ahora- dijo Su animada - Y con su consejo haremos de Narnia lo que una vez fue- continuó

-Van a ser unas grandes reinas- dije desde el balcón

-Psss- escuché que alguien me llamaba -Psss- se volvió a escuchar y al voltear me encontré a Ed, a medio arreglar, a dos balcones de distancia, me hizo varias señas hasta que entendí que quería que nos viéramos afuera

- ¿A dónde vas? - preguntó Lucy -Tengo que arreglar unas cosas- dije nerviosa -Una cosa y se llama Edmund- dijo Susan lo que provocó una ola de risas de parte de las demás chicas.

Una vez en el pasillo vi a Ed esperando en el pilar de un arco

- ¿Qué pasa? - dije mientras me acercaba - ¡Vaya! estás bellísima- dijo acercándose más a mi -Y a ti te falta terminar de arreglarte- reí nerviosamente mientras arreglaba el cuello de su camisa -Solo quería darte esto- dijo sacando una pequeña caja de madera de su bolsillo, al abrirlo pude ver un collar con una ligera cadena dorada y una pequeña esmeralda en forma de hoja como dije

-Ed, es preciosa- dije mientras lo abrazaba -Déjame ayudarte- dijo separando el abrazo, me voltee y alce mi cabello, el paso su mano con el collar y lo coloco delicadamente sobre mi cuello -Yo sólo quería decirte que...- lo interrumpí antes de que siguiera -Tienes que terminar de arreglarte, después de la coronación tendremos tiempo para hablar- le dije poniendo un dedo en sus labios y él riendo se alejó hacia su cuarto mientras que yo volvía al mío.

Estábamos esperando a los chicos para poder pasar cuando veo a Peter haciéndome señas desde la esquina del pasillo y yo me acerque cuidadosamente

-Hola- me dijo

-Hola- respondí -Necesitaba hablar contigo urgente- me dijo rascando nervioso su cabeza -¿Que está pasando?- le pregunté -¿Qué tal tu corazón?- preguntó -Pet...- empecé a decir, sabía que él podía ayudarme, al único que le había contado como me sentía era a Este pero con su corazón apenas latente no había podido ayudar mucho y él sr Tummus había estado en enfermería para después estar ayudando a las preparaciones para la coronación

- ¿Qué pasa?- ladeó la cabeza -¿Alguna vez has sentido como mariposas revoloteando en tu estómago cuando ves a alguien?- le dije y escuche risas donde había dejado a las chicas y ambos nos asomamos a ver y vimos a el resto de chicos platicando -Es por Ed ¿Verdad? - preguntó -¿Qué?- dije un poco nerviosa -Eres obvia- dijo sonriendo -Es que lo que siento por él lo cual no se ni que sea- dije riendo un poco -No lo he sentido nunca por nadie- concluí -Es amor Oe- dijo sonriendo -Y eso ¿Cómo puedo curarlo?- dije a lo que él soltó una carcajada -No es como una enfermedad, no se cura, solo puedes enfrentarla al igual que con el miedo o los nervios- me explicó -Gracias Pet- dije abrazándolo -De nada cuñada- me dijo y me dio un beso en la cabeza para después acercarnos a los demás.