Alex una mujer lobo que junto a su hermana melliza Tracy y su mejor amiga Megan empiezan su primer día del último año en preparatoria, donde los hermanos Woods entran a sus vidas. Tres chicos que llegan a su escuela y revuelven las hormonas de cada...
Compramos unos brownies para Alex en la cafetería, no podíamos sacarla sin que coma algo Megan se quedó con ella a distraerla mientras yo y mis hermanos robamos batas y cubrebocas, ya disfrazados salimos del armario, robe unos papeles de recepción por supuesto nadie lo noto los chicos tomaron su papel de doctor en serio.
Uno por uno entró en la habitación de Alex yo fui el último en entrar, vi como Alex nos quedaba viendo muy confundida, ahogué mi risa no quería salir delatado solo sonreí gracias al cubrebocas ella no lo noto.
—¿Qué está pasando? — pregunta Alex viéndonos a nosotros y a Megan que actuaba estar confundida.
—Señorita la transportaremos a otra habitación— dice Jacob con una postura firme, como lo haría un doctor, Tracy estaría orgulloso de el en este momento. Alex lo vio dudosa.
—¿Por qué? — pregunta nada confiada.
—Porque otro paciente ocupará esta — dice Noah como si fuera obvio, ella lo fulmino con la mirada eso ya parece un hábito entre ellos.
Al final ella asintió y la ayudamos a sentarse en la silla de ruedas ya que estaba bastante débil para caminar.
La sacamos de la habitación actuando como si fuera lo más normal, Megan detrás de nosotros pisandonos los talones, disminuimos la velocidad ya al estar cerca de la salida, y nos aseguramos que no hubiese nadie.
Ya seguro me quitó la máscara y los chicos también, Alex al verme
—¿¡Ethan!? — me mira confundida.
—Tranquila princesa te sacaremos de aquí.
Dije ayudándola a pararse y colocando su brazo alrededor de mis hombros, la obligamos a ponerse unos jeans y camisa encima de la bata de hospital. Ya cambiando colocó de nuevo su brazo alrededor de mis hombros con suficiente peso para que caminara más rápido de lo normal.
Al llegar a los autos Megan, Jacob, y Noah se montaron en un auto yo y Alex en el otro, senté a Alex en el asiento de copiloto y luego fui y me senté en el de piloto.
—¿Puedes explicarme que rayos está pasando? — me exige ella.
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