❀ S I N O P S I S
《Vi como Sasuke, a quien más amo se alejaba paso a paso de mi y no había nada que pudiera hacer, tal vez debí rogar, pero sabia que eso no serviría de nada. Me quede parado en silencio hasta que lo perdí de vista.
Y cuando ya me en...
Naruto sintió un pequeño escalofrío bajar por su espalda mientras saltaba de árbol en árbol. Llevaban varias semanas viajando para volver a Konoha (al parecer se habían alejado bastante del pais del fuego) y ultimamente se habia sentido bastante inquieto. No sabia por que.
—Parece quehayunpueblomasadelante— la voz de Kurama lo saco de sus pensamientos —Es mejordetenernosadescansaryconseguir mas provisiones.
—Eso estaria bien.
Se detuvieron en dicho pueblo y recorrieron el pequeño mercado que tenia para recolectar todo lo necesario para el duro viaje. Kurama noto como la noche comenzaba a caer sobre ellos y ofreció buscar algun hotel o posada para pasar la noche y poder descansar apropiadamente. Naruto aceptó alegre aquella oferta.
Luego de buscar alguna posada encontraron una perfecta para ambos el cuál incluía una cálida fuente termal que Naruto estaba gustoso de probar.
Mientras en la posada Naruto se relajaba en la fuente termal que esta poseía, Kurama se había quedado en el cuarto arreglando las provisiones que lograron obtener. Habia silencio en la habitación que solamente era opacado por los levea movimientos que hacia el zorro para guardar las cosas. Movimientos que se detuvieron inmediatamente para dirigir la mirada a la persona sentada en el marco de la ventana.
—¿Como vanlascosas?— preguntó Kyuubi, desviando la mirada para seguir con su trabajo.
—Todo va en orden, justo como usted queria— respondió aquella persona con respeto. —Sasuke Uchiha esta siendo buscado por la aldea de Konoha por ataque y violación a su compañera de equipo, Sakura Haruno. Hace un mes del ataque aún no logran atraparlo.
—Hmm...— el pelirrojo, aunque fingía desinterés por la reciente información adquirida, por dentro nadaba en regocijo. Iba a despedir al sujeto cuando una idea llegó a su mente. —A Narutolegustaríatenerunbebé, aunquenolodiga... Yolose— divagó, su mirada se desvío hacia la figura de la ventana —¿Deberia cumplir sudeseo?— sonrió maliciosamente.
El sujeto, entendiendo la orden indirecta, se inclinó respetuosamente para despedirse. —Como ordene— y desapareció en una silenciosa nube de humo de la cual vislumbraron levemente sus ojos carmesí.
Al mismo tiempo, la sombra que habia permanecido fuera de la puerta también se retiró.
* * *
En el hospital de konoha las enfermeras presentes revoloteaban de un lado a otro atendiendo ninjas heridos y uno que otro civil.
La puerta de la habitacion 241 se abrió para dar la pasada a la pechugona Hokage que en sus manos mantenía un informe del paciente. Se acerco a la blanca camilla en donde dicha persona se mantenia recostada, sus ojos chocaron con aquella mirada jade de su alumna.
—Ha pasado un mes Sakura...aun no es tarde. No importa lo que decidas, no seras juzgada — dijo, desviando la mirada al estómago levemente abultado de la kunoichi. —¿lo conservarás?
Sakura estaba en un dilema, el bebé era de Sasuke... Era un bebé que nunca quiso y por desgracia ahora crecía dentro de ella.. ¿Que hacer? ¿como enfrentarse a esta situación? En el fondo sabía que si ese bebé nacía, Sasuke vendría por él despues de todo era su heredero, el heredero del apellido Uchiha... Pero ella... Ella no queria esto, nunca lo quiso. ¿Seria mejor escapar por el camino mas facil?
—Yo...— murmuró —tome una decisión... — sus manos apretaron aquellas pulcras sábanas blancas que la cubrían. —Yo...
Tsunade espero pacientemente por la respuesta que su alumna le iba a dar, después de todo esta no era un asunto de menor importancia.
Cuando Sakura iba a responder, sus ojos se desviaron al fondo de la habitación y chocaron con un destello rojo carmesí de un par de ojos que la observaban.
—ah...— los ojos de Sakura por un momento adoptaron aquel mismo brillo que Tsunade no noto.
—¿Sakura?
—Yo... Lo conservaré — respondió finalmente y la figura al fondo de la habitación se esfumó. —me quedare con el bebé.
—¿Estas segura?
—Claro— poso su mano en su vientre —despues de todo... No tiene la culpa de nada.
La quinta hokage sonrió ante aquellas palabras y continuó con el chequeo médico.
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