A la edad de 14 años fui adoptada. Una vez instalada con mi nueva familia. Decidieron inscribirme en la secundaria a la que iba el hijo de los vecinos que eran los mejores amigos de mis padres, Scott. Scott y yo nos hicimos amigos de inmediato. Scott era la clase de niño estudioso y yo era una niña callada y tranquila hasta que en mi primer día de clases, un típico brabucón de la escuela al vernos a Scott y a mí caminando juntos, comenzó a molestarnos y le solté tremenda patada en el estómago que cayó sin rechistar.
-¡Sorprendente! –gritó un chico emocionado que se acercó corriendo hacia nosotros.
-Hola James –dijo Scott al chico que se acababa de acercar.
-Hola, ¿Quién es tu nueva amiga Scott?
-Es mi vecina, se mudó reciente y sus padres la inscribieron en esta secundaria.
-No me dijiste que se mudara familia nueva.
-Es hija de los Evans.
-¿Cómo tendrían una hija y nunca nos enteramos de eso?
Scott se quedó en silencio y un tanto incomodo, por lo que me adelanté a decir:
-Fui adoptada por los Evans.
Cuando James estuvo a punto de decir algo, sonó el timbre y todos los estudiantes empezaron a entrar. Scott me llevó para conseguir mi horario de clases y por suerte toqué en su misma aula. Desde ese día Scott, James y yo hemos sido amigos.
Luego pasaron los años y tuvimos que decidir que profesión escogeríamos. Scott decidió ser médico forense. Nunca supe si realmente escogió esa carrera porque le gustase o porque todos en su familia son médicos. En cuanto a James y a mí, nosotros decidimos unirnos a las fuerzas policiales, ambos soñábamos con ser detectives. Debido a nuestras elecciones de carrera, no nos juntábamos muy seguido con Scott, pero si pasaba la mayor parte del tiempo con James, bueno, literalmente llegamos a ser pareja de detectives oficialmente.
James y yo empezamos a salir luego de un año de trabajar como detectives y todo nos iba genial, éramos la pareja más aclamada de detectives, especialmente porque resolvíamos los casos en menos de tres días. Recuerdo haber sido apodada Ira por mi baja tolerancia con los criminales y en cada interrogatorio digamos que me desesperaba un poquito al punto de dejarle un ojo morado al criminal, aunque ahora que lo pienso, tal vez por eso resolvíamos los casos tan rápido.
Pero luego, las cosas se comenzaron a complicar con la llegada de un nuevo criminal. Le llamamos el ¨ignoto¨, puesto que no lo conocemos, me refiero a que no conocemos si es un asesino o un secuestrador. Al principio encontramos dos cadáveres de mujeres que tenían características similares y fueron asesinadas de la misma forma, ahogadas. Pero a la vez han ido desapareciendo mujeres, con las mismas características que las asesinadas. Todas están en las edades entre 20 y 30, son delgadas, tienen el cabello largo, miden entre 1.57 a 1.70 y la característica principal es que son bailarinas de ballet.
La primera víctima había desaparecido y dos semanas después fue encontrada, una semana después desapareció otra chica, dos semanas más tarde desapareció otra y esa fue encontrada a la semana siguiente sin vida. Luego desaparecieron tres chicas más en un intervalo de tres semanas entre cada desaparición. Debido a estos patrones no sabemos si el ignoto es un asesino en serie o un secuestrador.
Luego de tener toda la información necesaria y de darnos cuenta de los puntos comunes de los raptos, descubrimos la zona en la que se encontraba el ignoto. Mantenía a las víctimas atrapadas en un almacén abandonado. Por suerte fuimos capaces de rescatar a las chicas que estaban cautivas, pero el ignoto logró escaparse con una de las chicas que había sido secuestrada.
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Detective Katherine.
AcakKatherine Evans es una detective que tras la muerte de su compañero su memoria se ve afectada, lo que hace que olvide muchas cosas. Luego de un año, el criminal responsable de la muerte de su compañero vuelve a aparecer. Y la llegada de un nuevo det...