Sacramento Bay

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** 31 de mayo, 9:20 p.m. **

Desciendo a toda velocidad por la montaña que lleva directo a Sacramento Bay. Me dejo llevar por el placer que siempre siento al pisar el acelerador. Dejo que los recuerdos lleguen y se reproduzcan en mi mente. Mis primeras carreras, cómo me enamoré de ellas y arrastré a mi hermana y amigos a ellas, la reputación que construimos y el respeto que nos ganamos.

Desacelero un poco al entrar en el último túnel para llegar a la ciudad. Salgo del túnel y las centellantes luces de mi ciudad natal me dan la bienvenida, mi último recuerdo en ella aparece en mi mente.


** TRES AÑOS ANTES: Distrito Alemania, J.S. Bach: Frankfurt Garden. / 10 de abril, 12:16 a.m. / Cuatro días para la Gran Carrera. **

Hace unos días, Dante me pidió de improvisto que corra en la gran carrera e insiste tanto con quererme prestar su auto que finalmente acepto. Parece complacido, pero no deja de advertirme que debo tener sumo cuidado con el auto. Un poco irónico viniendo de alguien que ha destrozado los últimos tres que ha tenido.

- No me hagas quedar en ridículo. –repite por quinta vez mientras me lanza las llaves del auto. –Intenta no rayarlo.

- No te preocupes. –digo tomando las llaves en el aire.


** Distrito U.S.A, M.L. King: El taller. / 12 de abril, 6:34 p.m. / Dos días para la Gran Carrera. **

Hope da el último vistazo al auto y cierra el capó. Sacude sus manos en un trapo mientras se acerca e intenta disimular una sonrisa seductora. Me fascina ver esa sonrisa y esa expresión de satisfacción por un trabajo recién terminado, sin ningún rastro de preocupación por si no sale bien porque sabe que hizo un buen trabajo; sin dejar de lado la manera de cómo se limpia las manos. –Todo parece en orden. Enciéndelo. –dice, apoyándose en el auto. Le sonrío de manera cómplice cuando su sonrisa se ensancha más, sabe en lo que pensaba.

Miro a Emma que está de pie un poco más atrás, con una expresión de impaciencia. Giro la llave y el auto ruge con fuerza. Los tres sonreímos de regocijo.


** Distrito Corea, Bulguska: Grand Industrial Park. / 14 de abril, 10:50 p.m. / Día de la Gran Carrera **

- Prométeme que no te pasará nada. –suplica Hope mientras me preparo para la carrera. Levanto la mirada para verla, mi atención termina en sus manos, están hechas un nudo, una clara señal de que está al borde de un ataque de ansiedad.

- Tranquila, Hope. Juro que lo cuidaré allá fuera. –promete Emma que se acerca a nosotros, Chris viene con ella. –Te lo traeré de regreso, sano y salvo. –asegura con un tono bromista. Me da un codazo en las costillas y me entrega el auricular con el que mantendremos contacto durante la carrera. Le dedica una sonrisa tranquilizadora a Hope y se marcha con Chris.

Hope y yo nos miramos mutuamente, mientras me coloco el auricular. –Jake... -musita, pero no la dejo terminar. Tomo su rostro entre mis manos con delicadeza y la miro fijamente a los ojos.

- Tranquila ¿sí? La cuidaré. –le aseguro antes de plantarle un beso en los labios. Ella suspira y asiente más tranquila cuando nos separamos.

Camino a la línea de salida donde el resto de los corredores se preparan y se aseguran de que todo esté en orden. Cruzo miradas con algunos de los corredores y no todas son agradables, en especial las de mis rivales principales. Llego a donde se encuentra mi hermana junto a nuestros autos.

- ¿Lista hermanita? –digo, pasando a su lado.

- Siempre. –contesta ella con una sonrisa de seguridad. Abre la puerta de su Célica Toyota. – ¿Me cubres las espaldas?

DishonoredDonde viven las historias. Descúbrelo ahora