Darkness

X

Cuando ella despertó mire su cara aterrorizada. Sus ojos toparon con los míos y comenzaron a llorar.

—¡Mis llaves! — sollozo y se apretó a mi.

Su cuerpo comenzó a temblar y a llorar más fuerte.

—¡Los están lastimando! Lo vi, ellos están muy heridos, tengo que recuperarlas. ¡Ya!— grito desesperada.

La mire y pude ver dolor en su mirada, la abrace fuertemente. Sellando mi promesa de ir a recuperar sus llaves.

Podría ir solo, si ella no va, será más fácil que no nos capturen tan rápido.

—Iré por ellas, y tú te quedarás aquí. Eres lo suficientemente fuerte para protegerte sola un par de horas, así como me iré, regresare. No tardaré nada. Eres mi mujer, eres nuestra mujer. Los dos te amamos, y odiamos verte mal, prometo que regresaremos muy rápido— Ella asintió y me abrazo, enterrando su rostro en mi pecho.

La seguí abrazando hasta que la acune e hice que se durmiera.

La coloque en aquel lecho de flores.

Comencé a sentir un picor por todo el cuerpo, me acerqué al estanque y observe mi reflejo.

—Nos estamos sincronizando muy rápido, ese cabello rojo y rosa no queda tan mal— sentí la risa de mi contraparte.

Mire una última vez a Lucy, mis alas aparecieron y las marcas solo llenaron mis manos y antebrazos.

—No tardaré— y salí.

Lucy.

La oscuridad reinaba pero no había temor. Solo calma.

Camine entre toda esa penumbra y pude ver algo rojo, como si fuera una ligera flama. Me acerqué a ella y la toque, la pequeña flama comenzó a recorrer mi cuerpo, brincando. Dando leves saltos como si se tratara de una danza. Sonreí.

El fuego antes le tenía temor, ahora he aprendido a amarlo. Es tan Hermoso, algo tan pequeño y ligero puede ocasionar un caos total.

Algo tan puro y ardiente, tan salvaje que no puede estar quieto. Tan pasional.

El temor se convirtió en respeto, amor y cuidado.

La flama creció y me envolvió en ella como si de una capa se tratara dándome calor.

Me abrace a mí misma y aquel fuego se hizo más denso. Pude sentirlo. Se adentró en mí y la calidez recorrió completamente mi cuerpo.

Sonrei. Así es cuando me siento con Natsu, todo es cálido. Nada es frío.

Mis ojos captaron un nuevo resplandor. Me acerqué a él con cuidado y mi pulso comenzó a acelerarse, mi respiración comenzó a ser lenta y mis ojos comenzaron a picar.

No podía creer lo que veía. Mis llaves eran destrozadas para después fundirlas.

Grite. Grite tan fuerte que me desgarre.

Corrí hasta ella y todo había acabado. Mis llaves ya no existían. Los chicos ya no existían. Jamás los volvería a ver.

Me dejé caer en un mar de lagrimas y grite. La impotencia eran tanta que no me di cuenta que todo el fuego que me había recorrido comenzó a apagarse. Un frío extremo recorrió mi cuerpo hasta el punto de temblar.

Alcé la mirada y lo que vi me dejo en shock.

Mi Natsu era brutalmente asesinado gracias a una decapitación.

Su cabeza salió volando a mi dirección y comenzó a golpear el suelo. La sangre salpicó mi rostro y grite.

Su cabeza quedo justo a unos treinta centímetros de mi.

Sus ojos apagados me veían fijamente.

Acerqué mi mano con lentitud y cuando lo toque una ventisca de nieve comenzó a caer. La oscuridad se hizo mucho más densa y la luz se perdió para siempre.

El dolor se hizo presente.

Caí de rodillas y comencé a llorar desconsoladamente.

Ya no puedo vivir.

Todo se acabó.

Natsu.

Volaba entre las nubes mientras mis alas rodaban la humedad de ellas.

Observe a lo lejos que estaba a nada de llegar a Magnolia.

Comencé a bajar.

Pude observar lo que quedaba del gremio. Tragué saliva nervioso.

¿Dónde están los chicos?

Aterricé cerca del gremio y comencé a caminar, olfatee para poder encontrar a alguien.

El olor a sangre y sudor hizo que frunciera mi nariz.

Guarde mis alas y busque entre los escombros.

Un ligero olor perteneciente a Lucy me puso alerta. Las llaves están cerca.

Camine hacia un monto de escombros y comencé a quitar los enormes pedazos de piedra de la estructura del gremio.

Escuche un ruido y enseguida voltee. No había nada.

Hay mucha paz.

Me mantuve serio, continúe hasta poder llegar al final. Lo que vi me dejo de piedra.

Las llaves estaban en el suelo protegido por runas encerrándolas. Rayos atravesaban el cubo.

Mi oído se agudizó y pude escuchar los gemidos de dolor de las llaves celestiales.

Tome el cubo y descargas eléctricas atravesaron mi cuerpo.

En cuanto menos lo supe, sentí como algo atravesaba mi abdomen.

Sangre salió de mi boca y mire hacia abajo. Una lanza me había atravesado mientras una energía muy luminosa salía de ella.

¡Mierda!

N/a: Hola mis niños y niñas, hace mucho que no nos leíamos, yo se que se espantaron porque creyeron que ya no iba a regresar.

Mala hierba nunca muere. Les pido una disculpa por no haber dado ni señales de humo, he estado con varias situaciones en mi casa, creo que se los comente, la están ampliando, aveces nos quitaban el agua, luego la luz, luego el gas, luego todoo!

Es súper cansado, y apenas me puse mala, me he enfermado súper feo, como saben, soy asmática desde hace por lo menos 11 años. Y como últimamente hay mas polvo en mi casa gracias a la ampliación, eso hace que me enferme mas fácilmente y me den muy fuertes los resfriados.

Ya me puse varias inyecciones, tantas que ya les perdí el miedo (al menos las inyecciones en las pompis)

Estoy muy dolorida, no hay lugar en mis pompis que estén moradas.

Pero ya voy saliendo. Quiero avisarles que esta novela ya no le falta mucho, ya que estamos casi en la recta final, no se aun cuantos capítulos faltan. Pero tal ves no pase de diez.

Quiero leer sus comentarios, me alzan el animo. Por supuesto voten.

Por cierto, quiero hacer una dinámica algo ligera.

Yo se que hay fans nuevos en busca de respuestas de algunas cosas. Ya sean de las novelas tanto mi persona.

Si quieren hacerme una pregunta, con gusto la responderé.

Nos vemos.