Manuela

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Casi besé a Nico, o mejor dicho casi me besó Nico. Bueno, en realidad fuimos los dos... No sé qué se me cruzó por la cabeza en ese momento pero, sea lo que sea, se sintió incorrecto... lo que no hacía que mi deseo disminuyera.

Luego de ese episodio seguimos con la clase y ¡Dios! Cómo me gusta pasar tiempo con ese chico... Al finalizar nos dirigimos a nuestras respectivas habitaciones. Cuando entro, cierro la puerta y me encuentro con una pelirroja caminando de un lado al otro

-¿En serio yo hice eso? ¿Cómo pude?- eran unas de las preguntas que repetía

-¡Ámbar! Para de caminar que me estás mareando y empezá a hablar ¿Qué paso?- nos sentamos en el sillón

-Le dije que no...

-¿¡Qué!?

-Pero después le dije que si...

-¿¡QUÉ!?

-¡Si ya sabés de que hablo! Lucas y yo somos novios- dice

-¿Y entonces por qué parecés preocupada? Pensé que te gustaba él y que querías que se te declarara...

-Sí que me gusta, pero eso no hace que el miedo que tengo se vaya...

-¿Miedo? ¿A qué?- le pregunto

-A que solo esté jugando conmigo; a abrirle mi corazón, a compartirle mis demonios para que después de unos días me deje y se vaya a reír de mí con sus amigos...

-Acepto que hace poco que conozco a Lucas pero sé que él no sería capaz de hacer algo así. Y menos a vos

-¿A qué te referís?

-Ya debés saber que ayudé a planear todo, y si lo hice fue porque él mismo me dijo lo que sentía por vos y luego los chicos me lo confirmaron. Si pensara que va a dañarte no lo hubiera acercado a vos. Otra cosa que sé, es que si él fuese esa clase de persona, vos no hubieras sido su amiga por tantos años. Ahora dejá de preocuparte y disfrutá que tenés al chico que amás y que te ama a tu lado...

-Amar es una palabra muy fuerte

-¿Me vas a decir que no es eso lo que sentís? ¿Y que él no te dijo que te amaba en el picnic?

-Siempre tenés la razón...

-Y ese es uno de los motivos por los cuales me amas- digo y la abrazo- tranquilizate y viví la vida

-Siempre das buenos consejos...

-¿Me parece a mí o estás enumerando las razones por las cuales soy tan genial?- con ese comentario logro hacerla reír -¿Qué te parece si te quedás a dormir conmigo?

-No lo creo, eso no se puede...

-¡Ay por favor! No me vengas con el tema de que soy princesa y vos no porque te ahogo con la almohada mientras dormís- le digo haciendo que ambas riamos a carcajadas para luego quedar tendidas en la cama

-¡Manuela!- escucho varias voces masculinas gritando desde la puerta aunque parece que a mi amiga le puede pasar un tren por al lado y va a seguir durmiendo

- ¿Qué mierda quieren?- digo abriendo la puerta encontrándome con Lix, Lucas y Nico

-De qué humor amanecimos hoy...- dice el pajarraco

-¿¡De qué humor querés que esté si me despiertan a los gritos!?- digo enfurecida

-Solo queríamos saber si sabías algo de Ámbar- dice el novio

-Y también si estabas viva ya que dijiste que si no aparecías a desayunar era porque tu amiga te había matado

-Exacto- digo mientras me adentro en la habitación dejando la puerta abierta para que entren y voy al baño –si no iba a desayunar...

-Ya es la hora del almuerzo Manuela

-¿¡Qué!?- dice asomándome del baño- ¡¿Por qué no me despertaron?!- digo, voy a la cama y le grito en la cara a Ámbar – ¡Arriba pelirroja! Ya es la hora del almuerzo- y me pongo a buscar ropa olvidándome de que hay tres chicos en el cuarto

-Ámbar- dice Lucas petrificado

-Ho... hola- responde la chica

-Sí, sí, ya todos sabemos que se aman y todo pero les pediría- miro a los chicos- que nos esperen en el pasillo, y vos- esta vez me dirijo a la enamorada- apurate

Empujo a los chicos fuera para poder cambiarnos y luego salimos

-¿Y? ¿Qué están esperando? ¡Vamos!- ¿¡qué onda que nadie se mueve!?

-En realidad...- empieza Lix

-...falta una hora para comer- continúa Nico

-Ahora sí los mato- y empieza una persecución por todo el palacio.

Dos chicas tratando de agarrar a tres chicos. Recorremos todo el interior y luego seguimos corriendo por las afueras hasta llegar a la pileta donde, sorpresivamente, los chicos se detienen y nos miran

-¿Qué tal si...?- empieza Lix y se tira vestido al agua

-Estás loco- dice la pelirroja la cual es arrojada al agua por su novio que cae con ella

-Pobres niños- digo mirándolos cuando veo que Nicolás se me está acercando con una sonrisa pícara en el rostro –Ni. Se. Te. Ocur...-Y no alcanzo a terminar porque él me coloca sobre uno de sus hombros y me tira

-No... sé... nadar...- y me hago la que se ahoga, en seguida veo que Nico se tira a agarrarme y cuando me sujeta me coloco arriba de él dejándolo abajo del agua

Cuando sale yo sigo riendo –No fue divertido Manuela

-Sí, sí lo fue- digo y suelto otra carcajada a lo que él me agarra y me tira más lejos riendo

-Casi me muero cuando vi cómo te "ahogabas"- me dice cuando estamos cerca

-Bueno, ahora sabés otra cosa de mí, el único deporte que hice en mi vida fue natación y no era tan mala, hasta gané algunas competencias...

-¿Qué dicen si esta tarde venimos, esta vez con trajes de baño, y jugamos un poco?- pregunta Lix

-Buena idea- le responde Lucas que está abrazando a una sonriente Ámbar por la espalda. Todos asentimos (por suerte me habían hecho trajes de baño)

Cuando salimos del agua los chicos se sacan las remeras que estaban empapadas y las tienden al sol, quedando así en cuero y ¡Santo Dios de los Abdominales! ¿Por qué? ¿Por qué me torturás de esta manera?

Sabía que tenían buen cuerpo pero ¡Wow! Igual, al único que me le quedo viendo es a Nico, ¡Dios! sí que está bueno... ¡¿Qué te pasa Manuela!? Controlate

Él parece que se da cuenta de que lo veo ya que me dirige una sonrisa matadora. Okey hormonas, creo que es tiempo de que se tranquilicen...

Luego se ese momento volvemos al palacio ya que se había hecho la hora de almorzar.

Qué tarde se viene...



Ya sé, me atrasé, pero tengo una muy buena excusa: Tuve que estud... a quién engaño, me olvidé. 

Perdónnnn


Amor RealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora