Emma
Me acosté en mi cama y me puse mis audífonos para escuchar música y estar más tranquila, pero quién puede estar tranquilo sabiendo todo esto? Estaba decidida a dar una pequeña siesta cuando algo cayó de mi armario, sonó muy fuerte que decidí levantarme e investigar qué había pasado. Era una caja que se había caído de lo más alto de mi armario, me agaché para levantarla pero todo lo que había adentro se salió de la caja, iba a guardarlas hasta que vi que eran fotografías, se veían muy borrosas pero se lograba ver parte de ellas. En una fotografía salía yo en un columpio con mi papá, otra donde mis hermanos me cubrían en arena, una donde salimos toda mi familia.
Sin darme cuenta una lagrima recorría mi mejilla hasta caer en una de las fotografías, sentí la mano de alguien en mi hombro pero cuando mire atrás no había nadie y cuando regrese la mirada a la caja, ya no estaba ahí. Lo único que quedo fue la fotografía que sostenía en mi mano. Use la silla que estaba en mi escritorio para mirar si en alguna parte de mi armario estaba la caja pero no había nada. Me convencí pensando que todo esto había sido parte de mi imaginación por el cansancio, me fui a dormir con la fotografía que aun quedaba en mis manos.
Después de una pequeña siesta desperté pero la fotografía ya no estaba en mis manos. Busque abajo de mi cama por si se me había caído, no había nada, la perdí.