T r e c e

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¿Conoces ese amor al veneno, saltar por un abismo sin visualizar lo peligroso que es, nadar en un mar de tiburones, comer 25 jalapeños o enamorarse de alguien que nunca te corresponderá?

La necesidad de sentirte vivo haciendo cada una de esas cosas. Así es como me siento cada vez que la veo.

Miro el reloj que hay encima de la pizarra y a penas faltan 15 minutos para que se acabe la clase. En 1 mes y medio sólo he visto a esa chica un par de veces y no han durado más de unos minutos. No me lo pienso dos veces y salto al abismo. En realidad sólo salgo de clase buscándola pero así es como me siento. Camino por el pasillo y cuando me acerco a la zona donde está mi taquilla escucho su voz. Pero no esta sola.

—Bonitos pantalones Diaz

—¿Tú crees?— responde ella riéndose

—Joder que si, no se como tu novio te ha dejado salir de casa sin...— lleva unos pantalones que le quedan anchos y no marcan para nada su silueta salvo un poco en el trasero, no se que le ve de sensual a eso.

—Menudo pervertido está hecho nuestro amiguito ehh — ella sigue riéndose y a mi el corazón y la vida se me han quedado en esa palabra. Novio. No sabía que ella tuviera novio, parece la chica imposible de conquistar.

—A mi novio no le ponen unos pantalones, le ponen unos buenos modales y un bueno porro

—A él y a cualquiera, a todos nos gustan las chicas buenas— le guiña un ojo — Hablando de porros, creo que me debes uno

—Tampoco tienes porque devolvermelo ahora, igual lo necesito otro día

—Como tú quieras, de todas formas, ¿Que le ha pasado a Mike? He ido está mañana y tenia la tienda cerrada. He tenido que buscar a otro

—Pues no sé, no lo he visto en varias semanas, tenía pensado ir este fin de semana a hacerme otro tatuaje y de paso pillarme algo

—Es muy raro, nunca había cerrado la tienda— hace una pausa —igual alguien le ha dado un chivatazo a la policía

—No creo, es imposible, Mike lleva ahí más años que tú y yo juntos, seguro que ha tenido éxito ayer en la discoteca y hoy no abre hasta más tarde

—Puede ser

He escuchado demasiado a escondidas y me adentro en el pasillo donde se encuentran Dylan, apoyada en su taquilla, y Hunter, apoyado en la suya en frente de Dylan. Cuando pasó al lado ambos se callan y siento sus miradas quemandome el cuerpo.

—Seguro que a éste también le ha echado el profesor — Hunter comentandolo todo. No sé como Dylan aguanta ser amiga suya. Aunque me cueste admitirlo, es sin duda mucho más atractivo que la mitad de lo considerados "buenorros del instituto" y vosotros me diréis
¿Por que te molesta a ti eso Connor?

Y yo os contestaré, porque al ser más atractivo, es considerado una amenaza. En este mundo de superficiales, siendo guapo, puedes gobernar el mundo sin tener ni idea de política.

—Tampoco me importa mucho— dice ella — Dave estaba de muy mal humor hoy.

Abro la taquilla y la miro de reojo, pero más que de reojo, la miro disimulada y detenidamente. La forma de su mandíbula, como algunos mechones de su pelo se le caen de la coleta, su perfil sin defectos mostrando uno de sus ojos menta y sus pestañas, ¿probablemente postizas pero a quien le importa?, todo. Ella se gira y me mira sonriendo y yo no dejo de mirarla, arquea una ceja desafiandome y yo pongo los ojos en la taquilla.

—¿Te vienes a fumar?

—Claro— dice ella y pasa por mi lado inundiandome en su aroma. Cuando pasa la miro y veo por qué  Hunter había dicho eso de su pantalon, tenía un corte enorme justo debajo de la nalga derecha. 

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⏰ Última actualización: Dec 29, 2017 ⏰

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