Abro los ojos ante el insistente Bip, Bip de un móvil. Mia, tumbada a mi lado, también se despierta.
—Mmm... ¿Qué hora es? —pregunta, apartándose un nido de rizos de su cara.
—No sé... toma, te están llamando —le paso su teléfono, y ella lo mira, asustada.
—¡Mierda!¡Es Alex!
No pasan ni dos segundos antes de que ambos oigamos la voz de mi hermana desde detrás de la puerta.
—¿Dave? ¿Estás ahí? ¿Puedo pasar?
—¡NO! —mi vo suena un poco más desesperada de lo normal—. Es que... me estoy cambiando.
Alex no se molesta en contestar. Apuesto a que sabe que es mentira.
Le hago gestos a Mia para que se meta debajo de la cama, y yo corro a por unos pantalones. ¿Dónde los dejé?
Vete tú a saber.
Al final me olvido de los pantalones. Total, solo es Alex. No es como si nunca me hubiera visto en calzoncillos.
—Ya puedes pasar —anuncio, y ella aparece en el marco de la puerta—. ¿Y bien? ¿Qué querías?
—Oh, nada, solo avisarte de que el desayuno estaba listo —mete la mano en su bolsillo, y saca su móvil. Va a llamar a Mia. Efectivamente, su teléfono comienza a sonar en mi mesilla de noche—. ¿Qué hace aquí el teléfono de Mia?
—Yo... no sé, se lo dejaría aquí ayer.
Los chicos silban de manera burlona desde la puerta. Alex pone sus ojos en blanco, se acerca a la puerta y la abre de golpe, causando que las marujas de detrás entren precipitadamente en mi cuarto.
—Lamentamos la interrupción —se disculpa Will, sonriendo—. Pero sigue con la historia, no te cortes porque estemos aquí.
—No, espera, espera ¿Dices que estuvo aquí Mia? —interrumpe Chris— ¿Y qué tal fue?
—Y a propósito. ¿Ese rizo pelirrojo que sobresale de debajo de la cama te lo dio de regalo? —mi cara palidece (si eso es posible, pues no destaco por mi moreno) ante su comentario, y me giro para comprobar que, efectivamente, uno de los mechones de Mia se ha quedado fuera de su sitio. Ella parece hartarse de la situación, porque saca su cabeza de debajo de la cama.
—Oye, esto ya es pasarse —comenta, con su mal humor habitual—. Las paredes aquí son muy finas, supongo que todos nos oyeron, así que no nos hagáis pasar un mal rato. Y agradecería que os fuerais para poder vestirme...
—¿Estás desnuda? —la emoción de Will ante esa idea es palpable en el ambiente.
—No tan rápido, Will —le frena los talones mi hermana. Lo coge por el cuello de la camiseta, y acerca su oído a su boca. Le susurra algo que lo hace palidecer y asentir lentamente, mientras tragaba saliva. Luego se gira hacia los otros —. Venga, vámonos.
—Solo una preguntita antes de irnos. Si ellos... bueno, subieron aquí antes de lo de Will y Alex...
—¿Cómo que Will y Alex? —salto, alarmado—. ¿Te acostaste con él?
—Ugh, no, que asco. Y aunque lo hubiera hecho. ¿Qué hubiera pasado?—me dice, respondona—. Tengo 18, puedo hacer con mi vida lo que me dé la gana, igual que tú.
—Chicos, calma, a lo que iba —vuelve a intervenir Mike el conciliador—. Si ellos dos adelantaron a Will y Alex... ¿Quién ha ganado la apuesta realmente?
—¡Yo lo seduje a él! —salta Mia.
—Mentira —replico—. Fui yo. No mientas Mia, caíste a mis pies.
Ella me mira, ofendida.
—Sí, ni en tus mejores sueños hubiera caído a tus pies —espeta.
—Shhh, en vista de que estos dos no se van a poner de acuerdo... ¿Qué tal si lo dejamos en un empate?
Mia me dedica una última mirada de odio, y para que la cosa no vaya a más termino asintiendo en dirección a Chris, que es quién tuvo la idea. Luego, mis compañeros, muy amablemente, se van de mi habitación para que podamos vestirnos.
—Reconoce que tú caíste a mis pies —comenta la pelirroja en cuanto Alex cierra la puerta, dándome un codazo amistoso.
—Nooo, fui yo. No te pudiste resistir a mis besos —le respondo, demostrándoselo.
—Te quiero —murmura ella, contra mis labios.
Yo la miro, sonriendo. Esos ojos verdes... me vuelven loco. Luego, sin previo aviso, frunce el ceño.
—¿Qué?
—¿Cómo que qué? Te digo que te quiero... ¿Y no tienes nada que decir?
—Yo... —me quedo sin palabras cuando Mia comienza a llorar. Nunca sé que hacer con las lágrimas. ¿Se supone que se las tengo que quitar, como en las películas?¿O mejor le doy un pañuelo?¿O un beso?¿O le digo que la quiero?
Esto de las mujeres es demasiado complejo para mí.
Antes de que me dé tiempo a reaccionar, Mia recoge sus cosas y sale precipitadamente de mi habitación.
Los siguientes momentos son confusos. Alex sube hecha una furia a mi habitación, yo apenas soy capaz de balbucear una breve explicación de lo ocurrido mientras le doy el móvil de Mia. Le pido a mi hermana que vaya a buscar a Mia, y cuando se marcha me tiendo en la cama, decidiendo pasar el día en estado vegetativo... al menos hasta que venga cierta pelirroja.
Llega un punto en qué me duermo de nuevo (al fin y al cabo la noche había sido bastante activa), y al cabo del rato Mark me despierta, diciendo que tengo la comida lista pero no le respondo. Unos minutos después oigo que sus pasos de alejan, y vuelvo a cerrar los ojos.
..............
—Dave... Dave. Despierta. —noto unos suaves golpecitos en el brazo, pero los ignoro y me encojo. Luego siento una fuerte bofetada en mi cada—. ¡QUE TE DESPIERTES!
—¡Ahhhh! ¿Pero qué...? —abro los ojos—. Mia. Esto... ¿Qué haces aquí?
—Alex. Me ha convencido para que venga aquí. A hablar.
—Tendré que agradecerle más tarde —murmuro, más bien para mí.
—Sí, la pobre ha pasado gran parte de la tarde sentada en el suelo, esperando que saliera de mi cuarto. —comenta bruscamente—. Dice que estabas en estado vegetativo. Por mí.
—Es cierto.
—¿Por qué?
—Porqué te quiero.
—Oh, ¿Ahora me quieres? ¿Cuántas veces ha hecho falta que te lo dijera yo para que tú te dieras cuenta? ¿Sabes lo mal qu... —me acerco a ella bruscamente, y al igual que hizo anoche conmigo, la beso, callándola—. Dave...
—Shh... tengo que reconocer que me encanta cuando te pones gruñona pero... solo dime que me quieres. Que me amas, y que estarás conmigo para siempre.
—Pues claro que te quiero, tonto.
Hola, Hola!!
Bueno, traigo una noticia.... que según lo veais puede ser buena o mala:
Este es, posiblemente, el penultimo capítulo de The Love of One of Them.
La intención era que fuera una historia corta, así que... creo que unos 14 capítulos, más o menos, ya está bien.
Y ahora dejando ese tema... ¿QUE OS HA PARECIDO EL CAPÍTULO?
¡Comentadlo! Supongo que os habrá resultado familiar... si estuvisteis atentas en She is NOT one of Them, claro!
Por cierto... quién me lo pida primero le dedicaré el cap, de momento no tengo a nadie que me lo haya pedido... ¡Poned un comentario por aquí y os lo dedico!
#TheLOVEofOneofThem
¡CIAO!
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The Love of One of Them
Kurzgeschichten¿Te gustó She is NOT one of Them? Si la respuesta es sí, ¡No te puedes perder esta historia! Dave Martin ha caído profundamente enamorado de una pelirroja que conoció en una fiesta durante el verano, pero ambos saben que es un amor imposible porque...