Extrañamente mi primer día de momento está siendo muy tranquilo a pesar de haber tenido que ir a vigilar un cementerio por un grupo de personas algo extrañas rondando por allí. Tenían pinta de ser góticos o algo así, la verdad es que no sé cómo se llaman las personas a las que el mundo de la muerte y la oscuridad les atrae pero si es verdad que a Burgess y a mí nos ha hecho mucha gracia verlos.
No he podido acercarme a hablar con Hank porque entre que se me olvidaba y que me mandaban a hacer cosas al final, he acabado dejándolo para más tarde y ahora que tengo un tiempo espero poder hacerlo. Seguramente esté en su despacho porque recuerdo que se pasaba la mayor parte del tiempo allí y aprovechando estamos subiendo por la parte trasera para decirle a mi compañera que quiere hablar contigo por si me busca.
- ¿Desde cuándo te gusta ver los partidos de béisbol? -pregunta Antonio al verme pasar por el pasillo- Pensaba que tenías unos planes mejores con tu mejor amigo, espera, él también viene a mi casa esta noche.
Río dando media vuelta para entrar en el baño donde a parte de él también se encuentran Jay y Adam.
- Que quiera estar con la gente que va al Molly's no significa que me guste ver el béisbol y no, no tengo ningún plan para esta noche.
- Ven si quieres, ya te sabes el camino pero no te sientas incómoda al ver cosas que no te gustan.
- Tranquilo, contigo ya estoy acostumbrada a ver cosas que no me gustan.
- Chicos, dejadme un segundo hablar con ella.
- ¿Seguro?
- Id tranquilos, va a decirme que sigue pillado por mí y qué no quiere volver a perderme. -respondo a Jay medio riendo- Es un cagado, no sé por qué me enamoré de él.
Los chicos se marchan medio convencidos de que no va a pasar nada malo.
- Diré que vas a venir pero no lo harás, no quiero verte cerca de Brett y tampoco de Kelly.
- Tengo una idea mejor, di que voy a ir pero solamente a contar todo lo que ocurrió entre nosotros y también lo que ocurrió ayer, ¿te parece? -pregunto con superioridad- No intentes dejarme en ridículo porque si yo caigo, tú vienes conmigo.
Ríe.
- Aún no te das cuenta de que me da igual caer y que lo único que me importa es hacerlo contigo. -río negándolo- Deja de negar que no me has echado de menos y que me odias porque en el fondo te odias a ti misma por haberte marchado.
- ¿Qué yo me odio? -pregunto incrédula- Dime Antonio, ¿cómo habrías actuado tú si yo me hubiera ido con Freddie a Nueva York?
- ¿Y cómo lo hago? -pregunta mientras me acaricia la mano- Trabajamos en el mismo sitio porque tú has decidido volver, tenemos los mismos amigos y ahora quieres venir a mi casa para ver un partido de béisbol que no te interesa, ¿aún crees que tú no me necesitas tanto como yo a ti?
Siento un golpe en el corazón.
Quizá tiene parte de razón. Podría haber elegido otro distrito y no este o uno cercano pero no, por algún motivo elegí volver aquí. ¿Por qué? Pues sinceramente no tengo ni idea y eso me jode. Desde pequeña he sido decidida y constante en todo pero ahora no me reconozco. Antonio, Chicago o haber salido de New York me ha cambiado por completo.
- Vete a la mierda.
Salgo corriendo hacia las taquillas para cerrar la puerta tras de mí. Me siento en el suelo abrazando mis rodillas y rompo a llorar en silencio. Me duele, de verdad que me duele la situación. Le he querido tanto y sé que él a mí también aunque decidiera intentarlo con Laura, que al final es la madre de sus hijos. En parte lo entiendo, ya que quería reconstruir la familia que tenía formada con ella y sus hijos pero lo podría haber echo diferente, no sé, decírmelo y no encontrármelo de sopetón.
- ¿Camila?
Levanto la cabeza.
Hank.
- ¿Por qué lloras?
Niego y él se sienta a mi lado.
- Si no es de alegría por volver, tiene que ser porque te duele el corazón, ¿me equivoco?
Vuelvo a negar.
Él suspira.
- Vale. -suspira- No soy muy bueno en este tipo de cosas pero voy a intentarlo. -me río débilmente- ¡Mira no voy mal! -reímos- El amor llega y por mucho que insistas para bien o para mal si tienes que tropezar lo harás pero no eres ni vas a ser la última en pasarlo mal por un chico. Eres joven, guapa, con talento y tienes mucha vida para estar así de hundida. Creo que no ha sido lo mejor volver aquí si tus sentimientos por Antonio aún siguen dentro de ti pero tengo que decirte algo, lo mejor para ti es dejarte llevar aunque implique que a mí no me haga gracia ya que eres una de las personas que quiero en mi equipo. ¿Y si es el amor de tu vida? -pregunta hipotéticamente- Sino lo compruebas nunca lo sabrás, sea con él o con otra persona.
Lo miro y me sonríe.
- Creo que es el mejor consejo que me han dado desde que llegué a Chicago. -admito- ¿Y si al intentar comprobarlo hago daño sin querer a terceras personas? No quiero hacer lo mismo que me han echo a mí.
- Nada que se haga con el corazón está mal, te lo dice alguien que la ha cagado mucho.
- Muchas gracias, de verdad.
Sonríe y se levanta del suelo para después de hacerlo conmigo.
- A trabajar.
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De Vuelta Al Distrito 21
FanfictionUn año después todo ha cambiado. Camila ya es un poco más mayor y por lo tanto debe de ser una persona más responsable, o al menos, eso deberían de pensar todas las personas que no la conocen. Las que sí, saben que ninguna persona de diecisiete años...