Cap. 41: "Lo que el Corazón Siente"

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Saludos a todas y todos. Sé que esperaban la actualización la semana pasada, sin embargo tuve otra recaída con mi salud, lo cual está pasando cada vez con más frecuencia, pero ya repuesta, estoy aquí cumpliendo con lo ofrecido.

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CAPÍTULO 41

"Lo que el Corazón Siente"

Luego de un par de días Oskar había regresado a casa de Blaine, al comienzo hubo algo de tensión entre ellos, pero no tardaron en volver a la camaradería de siempre.

- ¿Qué tal si cenamos juntos? —Preguntó el de ojos grises— Yo cocino, y luego podemos ver películas toda la noche.

- No creo que sea correcto. —Blaine miró hacia un costado y jugó nerviosamente con sus dedos.

- ¿Y por qué no? Sólo vamos a compartir un momento agradable. Siempre lo hacemos.

- Sí, pero lo que propones es diferente.

- ¿Diferente en qué sentido?

- Se siente como si fuese una cita, Oskar.

- ¿Y qué hay de malo si lo fuese?

- Sabes que tengo novio.

- Un novio que se va por tres meses y te deja solo. —Negó con la cabeza mientras hacía un sonido con la boca— Mal, muy mal. Debió llevarte con él.

- Eso es absurdo. Él se fue por trabajo, ¿qué haría yo allá?

- Si fueses mi novio te llevaría conmigo a cualquier rincón del mundo y siempre encontraría tiempo para ti, para hacerte sonreír de esa manera tan hermosa, para estar a tu lado, para cuidarte y para tratarte como a un rey.

- Por muy hermoso que suene, sabes que no es realista. No puedes llevar a tu pareja a todas partes, menos si se trata de un viaje de trabajo.

- Tal vez tengas razón, pero sí te llevaría a todos los lugares que fuese posible, y cuando no pudiera y me tocase estar lejos, no te descuidaría. Te puedo asegurar que encontraría el momento para llamarte, para enviarte un mensaje. ¿Cuánto tiempo toma escribir: "hola amor, deseo que tengas un excelente día", "buenas noches cariño, te amo", "te extraño mucho, ya quiero volver"? Son mensajes cortos que se escriben en segundos. Rayos, ahora se pueden enviar notas de voz, las cuales toman menos tiempo todavía.

- Oskar...

- ¡No hay excusa alguna!

- No entiendes.

- ¡Entiendo muy bien lo injusto que es esto! —Gruñó— ¡Siento tanta rabia porque él tiene la suerte de que lo ames, y no lo valora! —Cerró los ojos— Y mientras tanto yo daría lo que sea por ti. —Comenzó a caminar en círculos— Eres magnífico en todos los sentidos, Blaine, y si estuvieras conmigo buscaría siempre el modo de demostrártelo. Sería el novio que mereces, y no uno que ni siquiera tiene un minuto para ti.

- Kurt tiene mucho que hacer, y los horarios son distintos.

- Estoy seguro que dispone de tiempo libre. Es imposible que esté ocupado las veinticuatro horas. No lo justifiques.

- Igual es...

- Nada, Blaine. No hay ninguna excusa para que se haya olvidado de ti. Puede que esté muy ocupado, pero no me digas que en casi dos meses no ha tenido ni un momento libre. Sabes que no está bien que se haya ido y prácticamente desde el comienzo te haya dejado de lado. No es correcto. Eso no lo hace una persona que ama a su pareja y la valora.

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