Caminos Destinados

cicatrices del pasado

Yuri
Recordaba entre sueños los toques repugnantes de aquellos tipos, sus risas al tocarme y deslizar sus manos por mi cuerpo se sentían presentes, cuando cursaba la secundaria algo similar me paso, aunque el lugar y las circunstancias eran distintas aún podía recordarlo, en ese entonces solo miraba a Viktor por la televisión, y yo era un patinador amateur que buscaba convertirse en alguien de su nivel como cualquier otro, pero a diferencia de los demás mi admiración por el fue algo nuevo para mi, cada vez que veía una de sus presentaciones no dudaba en apresurame e ir a la pista de hielo solo para después poder imitarlo, cuando lo hacia mi cuerpo experimentaba una sensación de conexión con él, un hormigueo recorría por todo mi cuerpo al observarlo, quizás era mi imaginación, pero siempre divaga en los gestos que hacia su perfecto rostro, ya que a mi parecer cada uno era especial.

Viktor
Me dirigía a la habitación de yuri cada cinco minutos, me ponía demasiado ansioso  el que no despertara, me quede observándolo en el marco de la puerta, cuando de pronto me percate de que algo extraño le ocurría, su semblante tranquilo se cambio a uno asustado, lo cual lo hacia sentirse inquieto y su respiración se veía sofocada, de inmediato me acerque para hacer algo, y entre delirios le decía a alguien que se detuviera, "era una pesadilla" verle tan vulnerable me tensaba el cuerpo, así que para calmarlo le inyecte otro supresor, el trauma generó que el efecto fuera mas rápido en salir de su cuerpo.
Inclinandome de poco en poco, y con intención desesperada de acaparar sus labios con tonalidad rosa, sentía que mi respiración se aceleraba, lo cual me sorprendió, ya que antes del acto el pelinegro acostado enfrente de mi, se despertó mirándome con tristeza pronunciado mi nombre en un gemido, acorto la pequeña distancia que nos separaba con sus temblorosos brazos alrededor de mi,  con poca fuerza me atraía, respondiendo de igual manera, lo rodee con mis brazos alrededor de su espalda, añorando su aroma.

Yuri
Los sueños y recuerdos que tenía con viktor, cambiaron a un ambiente que me aterraba, al cual recordaba constantemente, era desagradable tener que sentir las manos de aquellos tipos ajenos en mi cuerpo, me asfixiaba de manera que me sentía vulnerable y asqueado, solo el toque de viktor me aliviaba, entre sueños podía inhalar su esencia, deseaba que aquel infierno terminara pronto, la angustia asfixiada salía de mi mente, con temor de no despertar alguna vez,  lloraba con desesperación, para que alguien me ayudara, me asombro ver la cara de viktor tan cerca de mi, tras despertar de tal pesadilla, no sabia si seguía soñando oh ya estaba despierto, pero me afligió tenerlo justo aquí, con timidez y gran deseo me conforte en su regazo, iniciando con un beso reclamante, cada beso hasta ahora dado era algo especial, nuestra respiración compartida, nuestras danzas en mi boca, su sabor compartiendo él mio, fundiéndose en uno solo, podíamos sentir lo que el otro quería expresar, los sentimientos acallados que dejaba el silencio de nuestros besos.
Ese simple acto me extasiaba, sentir que ambos nos fundiamos en nuestro propio mundo, era como si nos deslizaramos de nuevo por la pista de hielo, una presentación única e indiferente hacia los demás, separándome de aquel beso, espete.
-Viktor, gracias por salvarme, gracias por estar conmigo en este momento y de a verme salvado, te lo agradezco.

Viktor
Yuri me soltó con debilidad, sus ojos me expresaban alegría con una leve tristeza, incluso en ese momento quería decirle que todo estaría bien si permanecía a mi lado, las palabras que después soltó de su juguetona y seductora boca, fue la gota que derramó el vaso, a la espera de expresar todo lo que puedo ofrecerle.
-Yuri, gracias a ti por corresponderme, te amo demasiado yuri katsuki, así que, por favor cuentame todo lo que te pone triste, lo que te agobia, lo que te gusta y disgusta, dime tu pasado lo que tu presente te depara, tus sueños, apoyarnos mutuamente, compartiendo lo que sentimos, quiero que estemos el uno al lado del otro, avanzar juntos hacia un futuro que forjemos los dos, así que ya no guardes nada para ti, porque me tienes a mí, comparte todo lo que guardas conmigo, ten confianza para decirme todo, si es difícil para ti, esperare el momento en el que tú, quieras hablar de ello.