Quiero acercarme a ti [T.O.P y Tú] - Adaptada

Capítulo 2 ~ La llamada inesperada

Me levante del sofá y me fui hacer un sándwich, termine y me fui a bañar, salí y me acosté en mi cama a dormir, de repente suena mi celular, no deja sonar así que vi quién era decía "Seung" así que contesté a ver que estaba pasando.

— ¿Diga? — soné preocupada

— ¿Si? ¿Señorita (...)? — es una voz que no conocía.

— ¿Seung eres tú? — pregunté.

— No señorita soy un mesero del bar Tapion, el señor Seung Hyun me dijo que la llamara, lo que pasa es que él ya no tiene dinero y debe 700 dólares.

— ¡¿Qué?! Mmm… ¿Desde cuándo lleva bebiendo? — ésto es el colmo.

— Desde las nueve señorita.

— Voy para allá — colgué.

Mire el reloj y era 4 de la mañana no faltaba poco para que amaneciera, me vestí lo mas rápido que pude, agarre mi auto, prendí el GPS y busque el bar, llegue al bar, me baje y entre, pague la cuenta, y ahí estaba el tendido en una mesa. El mesero me ayudo a llevarlo al auto. En el camino le dije.

— ¿Seung qué es lo que te está pasando? — le pregunte preocupada.

— ¡(...)! Gracias por venir por mí.

Seung estaba muy pero muy borracho

— Seung te llevaré a casa — le dije.

Llegamos a su casa, batalle mucho para subir al séptimo piso, cuando por fin llegamos a su departamento le dije a Seung.

— ¿Las llaves Seung? — extendí mi mano.

Seung Hyun buscó en sus bolsillos y saco las llaves, me las dio, entramos a su cuarto y lo senté.

— Ahora me vas a decir ¿porque rayos estás en ese estado? — lo vi muy enojada y se le salió una lágrima que se deslizo por su mejilla.

— Soy tan infeliz (...), Krystal nunca me amo — sus palabras me dejaron perpleja.

— ¿De qué estás hablando Seung? — pregunté.

No sé si era por el alcohol o me estaba diciendo con toda sinceridad. Así que hablo de nuevo.

— Ya teníamos problemas hace unos meses, pero ahora fue el día que ya se termino todo, me había citado al bar para hablar, me dijo que estaba harta de mi, de la situación que nos encontramos y que mi trabajo no sirve para nada.

— Pero Krystal — murmuré porque no lo creía.

— Ella me dijo que ya no me amaba, que ya no quería esperar más. Había encontrado a alguien mejor que yo un tal Kai, ya no quería volverme a ver, así como si nada se fue, (...), cuatro malditos años no significo nada para ella — término de contarme con la cabeza agachada.