Quiero acercarme a ti [T.O.P y Tú] - Adaptada

Capítulo 32 ~ Nueva oportunidad

Después de vernos por unos minutos y sin perder las miradas, una sonrisa se formo en su rostro, se levanto y corrió hacia mi, estampo sus labios con los míos, haciendo que tirara la cesta al pasto.

— Dime que es verdad y no producto de mi imaginación — me dijo poniendo su frente con la mía y luego me abrazo.

Una risita me salió de la boca.

— Soy real Seung, mírame — le pedí.

El obedeció se separo de mi para mirarme de pies a cabeza por un largo rato.

— Perdón, sé que esto no es suficiente, sé que talvez ya no quieras nada conmigo, soy una idiota debí confiar en ti, pero me cegué por mi mente, te había prometido algo y no lo cumplí, me di cuenta gracias a Ji, tus palabras resonaban en mi cabeza y una canción hizo que reaccionara, quise volver pero ya estábamos volando, le pedí a Ji que regresáramos y así lo hizo.

— G Dragon, ¿te lo dijo? — me pregunto.

— Sí, pero déjame terminar... Por favor — él asintió y continué.

— Llegué a buscarte pero ya te habías ido, sentí que mi corazón se rompía, pensé que te perdía, comprendí el dolor que pasaste cuando te deje en el aeropuerto — suspire — Hye Yoon me dijo que te fuiste de la casa, y supe en donde estarías, Min Ho me trajo aquí, pero si ya no quieres verme solo dímelo, para avisarle y que venga por mi, no te voy alejar de nuestros hijos — le dije con lágrimas en los ojos.

Se quedo en silencio, algo incómodo de mi parte, lo había perdido, saque mi celular, ahogando mis sollozos que estaban apunto de salir, y camine hacia la carretera, unos brazos me rodearon apretándome hacia él.

— No te vayas (...), no me dejes solo — me susurro.

— Pensé, que de no confiar en ti ya no me querías a tu lado — le dije llorando.

— Has vuelto, dejaste tu proyecto por mi, estas aquí y eso significa que confías en mi, te amo (...), seria un estúpido si no te perdonara, aunque aquí los dos nos debemos de perdonar — me dijo dándome la vuelta.

Puse mi rostro en su pecho, acaricio mi cabello, llevando sus manos a mi vientre, mis bebés empezaron a moverse, no quería separarme de él, quería estar así por siempre.

— Ya no llores, recuerda que ya has llorado bastante, le hará daño a los mocosos — me dijo acariciando mi vientre.

— Tienes razón — le dije limpiando mis lágrimas.

— Veo que traes una cesta, ¿le apetece comer conmigo preciosa dama? — me preguntó con una sonrisa.

— Claro, es un placer príncipe — le dije dándole la mano.

— Debo avisarle a Min Ho, debe estar desesperado, bueno no solo él, todos — le dije.

— Tienes razón, yo le llamo — sacó su celular, lo prendió y minutos después estaba hablando — Gracias Min Ho — fue lo que alcance a oír.