— Pero y ¿Bom? — logré decir.
— Supongo que fue algo pasajero con ella, cuando la lleve a su casa, le dije que ya no quería salir con ella que debíamos terminar, se negó aceptarlo, le dije que ella tan solo era una compañía, esto que siento es muy fuerte, esto es amor (...), amor verdadero y puro.
Tomó mi rostro con sus manos y me dio un tierno beso, sentí como me desconectaba, era como si estuviera en un cuento de hadas, era como un sueño del que no quería despertar, así que agarre su cabello para creer que era verdad, empezaba a necesitar aire y él lo noto, alejo sus labios de los míos y su mirada me asombro, ese brillo en sus ojos, nunca en mi vida la había visto, era cierto me amaba como yo lo amo a él.
— Te amo, quiero que estemos juntos los cuatro — sonreí ante sus palabras — Pero no sé, que es lo tu quieres — me confesó, acariciando unos mechones de mi cabello.
— Yo también quiero estar contigo, siempre te he amado. ¡Te amo Seung!
— ¿Qué? — preguntó.
— Si… Desde que te conocí, desde que éramos unos niños, sentí algo por ti.
— ¿Por qué nunca me dijiste nada mujer?
— Porque que sabía que no sentías lo mismo por mí, cuándo quería decírtelo llego Min Ah, luego Krystal y Bom, así que pensé que el amor solo era de mi parte e intentaría ser feliz con lo que tenia.
— Mujer no sabes cuanto me arrepiento por no haberme dado cuenta antes, las cosas hubieran sido diferentes, pero ya el pasado no cambia, pero si el presente y el futuro — me volvió a besar, me atrajo hacia él y bajo su mano acariciando mi vientre — Serán los pequeños Choi — dijo con un gran orgullo.
De repente sentí un golpecito dentro de mi vientre, seguido por otro más, como si supieran que su padre les hablaba.
— ¿¡(...) no es fabuloso!? Lo has sentido — me dijo emocionado.
Voltee a ver mi vientre y le dije.
— ¡Claro! Recuerda que yo los llevo — le dije con una risita.
— Me conocen.
— ¿Seung cómo sabes eso? — cuestioné.
— Por que he pasado mucho contigo, se han acostumbrado a mi voz.
Me volvió a besar, me cargo hasta llevarme a la cama, me coloco delicadamente.
— Ya deberías de descansar mujer.
— No te vayas ¡por favor quédate! — le pedí y sin resistirse acepto.
Se metió dentro de las sabanas atrayéndome hacia él, con sus manos hacia círculos en mi vientre, sentía tanta tranquilidad.
— No puedo creer que estemos juntos — me susurro.
— Yo tampoco, te amo — le dije dándole un beso.
— Duerme mi princesa, duerme mi (....) — me volvió a susurrar — ¿Quieres que te cante? — preguntó de pronto.
Pero de que hablaba Seung, ya no había cantado desde que Krystal lo dejo.
— Claro — le dije con una sonrisa, empezaba a ser el mismo Seung, del que estaba enamorada, alguien feliz y contento con la vida, aun que no lo crean.
Empezó cantar, una canción suave hasta que me quede dormida, desperté entre sus brazos, el brillante sol entraba por la ventana, era como un sueño tener lo así, con sus manos acariciando mi vientre, veía en sus ojos un sentimiento muy profundo, que me hacia suspirar.
— Buenos días princesa, no te quise despertar, he estado charlando con mis hijos — decía con una sonrisa orgullosa — Dicen que tienen mucha hambre — y volvió a sonreír.
— ¿Tus hijos?
— Si, mis hijos, buenos nuestros hijos, te amo tanto mi futura señora Choi.
No pude evitar sonrojarme.
— Se oye tan lindo, pero en verdad si tenemos mucha hambre.
— Bueno, te quedas aquí mientras yo preparo el desayuno — se levantó.
— Pero Seung…
— Pero nada es una orden mujer — me dijo sonriéndome.
Unos minutos después llego con una bandeja en las manos, huevos revueltos con jamón y un jugo de naranja y con unas pastillas las cuales me tomaba para el embarazo, vio mi cara y sonrió.
— Es por tu bien — dijo acariciando mi vientre.
— Lo sé.
Terminamos de almorzar y empezaron a sonar los celulares, Seung me hizo una seña diciéndome que iba a salir para hablar, yo tome mi celular para contestar.
— ¿Diga?
— (...), hermanita — me dijo Leo un poco desesperado.
— ¿Qué paso Leo? ¿Qué te ocurre? — volví a decir.
— Es Eli, ya es hora — decía nervioso.
“¿La hora?” pensé para mi, ¡oh! Dios, él bebé.
— Tranquilo Leo, dime donde están — le dije tratándome de calmarme.
— En el hospital TID
— ¡Ok! Ya voy para allá, todo saldrá bien hermano — y colgué.
— Princesa, Elizabeth acaba de ser ingresada — me dijo Seung que venia hacia mi.
— Lo sé cariño, Leo me acaba de hablar, debemos irnos.
— Si, cielo.
Me levante para ir al baño, cuando Seung paso rápidamente delante de mi, entrando al baño y cerrando la puerta, lo oí vomitar, me sentí muy mal, acaricie mi vientre con una sonrisa.
“Miren como traen a su padre pequeños”
Salió en unos minutos y fui hacia él, lo abrace y él también me abrazo.
— Ya se te pasara — le dije.
— Lo sé amor, no te preocupes, estoy mejor que nunca — me dijo dándome un beso — Ahora te dejo para que te cambies, iré a cambiarme yo también, regreso por ti en una hora.
— Si cielo, cuídate — le dije.
— Si… Te amo.
— Yo igual Seung — le di un beso tierno de despedida.
Me metí a bañar, estaba feliz, la vida me favorecía, la dedicación de amar a Seung, era la correcta, él era el amor de mi vida, pero me sentía terrible por no decirle la verdad. Terminé de alistarme y Seung paso por mi, cuando llegamos al hospital, Seung y yo llegamos agarrados de la manos y todos se quedaron sorprendidos.
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Quiero acercarme a ti [T.O.P y Tú] - Adaptada
RomanceKwon Ji Yong se va a casar con (...), todos sus amigos están listos para que se celebré la boda. ¿Podrán casarse? ¿Tendrán muchos hijos? Está historia no es de mi propiedad, todos los créditos a su autora.