Amor Con Un Dios.

OH NO

Isaac se había metido en un problema grande, si bien Anubis no podía más con la ráfaga de fuego, el se había puesto en peligro.

Sethna: bien chico, dime, ¿que piensas de Seth?

Isaac: pues... no se quien sea la verdad

Al parecer eso no le agradó mucho a Sethna, por lo que nos dejó de lado para ir contra el

Setna: ahora lo conocerás muchacho

Isaac: Espera!!!!!!!!!!!!! Creo haber oído de el.

Sethna: Dime, que es lo que sabes?

lo miré dándole señas de que debía hablar maravillas de el aunque no fuesen ciertas, y sin darme cuenta Anubis había caído el piso.

Isaac: Oh bueno, pues yo se que el fue el mejor rey de Egipto, había hecho maravillas con el

Setna escuchaba atentamente cada palabra de Isaac, mientras yo fuí a ver como estaba mi querido novio

Aaron: estas bien? ¿Tienes algo?

Anubis: estoy bien, solo necesito algo de mis aromas u ofrendas predilectas

Aaron: cuales son?

Anubis: el chocolate y la canela, esos son

No sabía de donde sacaría chocolate, y mas ya que estábamos en el desierto, por lo tanto no podría sacar esos aromas u ofrendas.

Aaron: Amor, no tengo nada de eso, lo siento *empieza a llorar*

Anubis: No es necesario, puedes darme algo que tienen todos los mortales, pero no querrás hacerlo

Aaron: claro que lo haré, eres mi novio recuerdas?

Anubis: bueno, lo que ocupo es sangre, con sangre podré recuperarme

Se me hizo raro, no solo por lo de la sangre, si no porque recordé lo de la noche pasada, como había enloquecido.

Aaron: esta bien 

Tomé una daga, que tenía el mango de mármol con piedra azul y la hoja de oro.

la tomé con decisión, y me la acerqué a la mano, para dar una tajada fuerte y precisa, Anubis me vió y me dijo.

Anubis: Espera, toma un poco de tierra y di lo siguiente 

Oh, poderosa y radiante Diosa Isis.

Madre del Universo que observas y guíasAtentamente mi camino, para que noMe desvíe de mi destino.Amorosa Madre a ti te pido y suplico,Cúbreme bajo tus alas doradas.

Aaron: esta bien

Repetí la oración y al cortarme, solo sentí como un piquete, sin algún dolor. Mi sangre brotó como agua, me acerqué y le dí a Anubis de ella, para así que pudiera recuperarse.

Anubis: tu sangre, tiene un sabor digno de los dioses.

Aaron: gracias, supongo

Cuando se levantó, vi un charco dorado donde el estaba, su ropa estaba también manchada de un color dorado vivo, el lino blanco estaba lleno de el, en su espalda se veía un corte grande, y se fue cerrando.

Anubis: gracias amor, ahora a salvar a tu amigo

Isaac estaba hablando puros halagos de Seth, y de como le "encantaba" su forma de gobierno. Sethna estaba tan atento que ni siquiera se molestó en ver hacia atrás. Pero esos malditos guardias, notaron que Anubis se había levantado, aunque no dudaron mas de 2 minutos, parecía ser que mi sangre le había dado mas fuerza. Anubis levitó y del suelo, unas vendas de lino salierón y ataron a los guardias, sin dejarlos poder mover. Su cuerpo se comprimió tanto que lo único que cayó al suelo fue polvo.Por su parte, Anubis dio un grito muy fuerte

Anubis: SETHNA! TU SEÑOR ESTA CONDENADO, COMO TÚ

sus vendas salieron de nuevo del suelo, pero Sethna fue más rápido, y su bastón sacó fuego, que quemó las vendas, pero eso no fué nada para el, más y más salieron del suelo, y de nuevo ahí estaba, Ammut la devoradora, lista para comer el alma de Sethna

Sethna: no te atrevas, hijo de Seth

Anubis parecía mas enojado, por lo que solo tomo un cuchillo curvo y se limitó a cortar el cuerpo de Sethna. Ammut, solo comía los pedazos que caían, dejando un aroma a cadáver en putrefacción, quizá los dientes de Ammut no estaban tan limpios pero eso, sin duda me perturbó un poco.