CAPÍTULO 4

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¿DE VERDAD ME HAS OLVIDADO?





Minutos más tarde de que Francisco se retirara llevaron a Eliet a un hospital y en lo que le hacían unos chequeos Luka llamó de inmediato a Javier... en la llamada le comentó que su hija tenía un romance con ese socio del que le había comentado.




-FRANCISCO-

Pensé jamás regresar donde Javier pero debía hacerlo para así ya no tener ningún vínculo con él, así que me fui a verlo para terminar con todo lo que teníamos...

Vaya, vaya parece que al fin te has dado cuenta de la verdad y has regresado –dijo Javier en tono victorioso y burlesco-

Dime lo que quieres obtener que no estoy de humor para aguantar tus caprichos –Dije fríamente-

Yo nada... pero creo que debes darme algo, ¿lo traes o no? –dijo Javier seriamente-

Sabes que no tomaría nada de allí, aunque signifique mucho, jamás haría algo así –dije algo triste-.

Ooh! Como quieras, total no necesito nada de un ladrón como tú si soy socio del padre de tu noviecita –Dijo Javier-.

¿Quién te comentó eso y cómo sabes de ella? ¡Pufs! Total, ya no importa quiero que me dejes en paz y no vuelvas a meterte en mi camino... ya el trato de teníamos es como que nunca existió –dije recordando todo lo sucedido de hace pocas horas-.

¡NO! Detente en este momento, Francisco, aún tengo una última propuesta que hacerte sé que no te arrepentirás de ello, mira podemos hacer una alianza y quizás... –dijo Javier tan confiado de si-.

Ask! ¡Ya olvídate de eso si quieres algo consíguelo tú solo y no me metas en tus sucios juegos... no! Ya lo he dicho una vez y es que no quiero formar parte de lo que estés tramando o trabajando, sé muy bien que estoy en deuda contigo por haberme recogido de las calles cuando aún era un crío, pero eso ya te lo he pagado con todos los robos que he hecho por ti y por ello es que me he metido en problemas así que es momento de que te olvides de mí -dije enojado por mi persona y por hacerle caso todo este tiempo, por haber dejado cegarme por este estafador-.

¡Ah! No Francisco jamás te podrás liberar de mí, jajaja... -dijo Javier con risa malévola al final, solo sentí que había puesto sus manos en mi espalda y me había empujado al precipicio que había, después de eso no supe nada y vi todo negro-.



Horas más tarde pasaron unos chicos que jugaban cerca del río que estaba bajo de ese precipicio, vieron a Francisco tirado e inconsciente no tuvieron otra opción más que llevarlo al hospital y la coincidencia es que estaba en el mismo hospital que habían llevado a Eliet.

Semanas después con Eliet aun en atención médica, ya estaba estable y su padre le cuestionaba de porque no le había confiado nada sobre su noviazgo con Francisco, su padre antes de darle de alta le comentó que Francisco estaba en coma por un accidente que tuvo, luego le dieron de alta y todo estaba como siempre había sido en casa pero ella estaba muy preocupada por Francisco; quería volverle a ver como lo hacían cada tarde hasta terminar por las altas horas de la noche, Eliet es consciente de todo lo que había pasado y esta vez no quería ocultarle nada a su padre por esa razón le pidió el permiso de poder ir a hacerle visita a Francisco...

Hasta que te conocíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora