Puntadas

Capítulo 12

"¿Sabes qué? ¡Jódete! ¡No te necesito! ¡Ya ni siquiera me importa! ¡Solo vete a la mierda! ¡Vete con Rhian!" Gerard gritó a Frank, aventándole el vaso más cercano y fallando por centímetros.

"¡¿Así es cómo te sientes?!" Frank gritó de vuelta, esquivando el vaso de nata.

"¡Apuesto tu trasero a que sí!" Gerard gruñó.

"¡B-Bien! ¡Nunca quise estar contigo de todos modos! ¡Al menos pudo ser lo que quiera con Rhian! ¡Al menos ella se preocupa por mí!" Frank gritó de vuelta, sus puños apretados a sus costados.

"¡Jódete, maldito fenómeno! ¡Yo me preocupaba por ti! ¡Y-Yo te amaba y tú solo me dejaste por- por ella!" Gerard se dio la vuelta y se sintió tragándose las lágrimas.

Frank se quedó callado.

"¡Contéstame, Frank!" Gerard gritó, dándose la vuelta.

Frank ya no estaba discutiendo. Gerard sintió la ira hervir dentro de él, calentando su sangre y poniéndolo furioso. Vio cuando Frank se sostuvo de Rhian, jalándola contra él y explorando su boca con su lengua.

"¡Te odio joder!" Gerard gritó entre lágrimas y se aventó contra los dos-

Gerard se sentó en su cama, empapado en sudor frío y lágrimas calientes. Se dio cuenta de que apenas había sido un sueño, uno horrible.

Suspiró tembloroso y se apretó los ojos con los talones de las manos, frotándose las lágrimas y el sueño.

"¿Gee? ¿Estásbien?" Frank preguntó, su voz gruesa con sueño.

Gerard brincó, inconsciente de que Frank había estado en la cama a su lado. "S-Sí, lo estoy, Frank. Vuelve a dormir."

"Pero." Frank se esforzó por alzarse, abrazando a Gerard. "Estás molesto."

Gerard no estaba de humor para pelear, suspiró y descansó la cabeza en el pecho de Frank. "Te extrañé, Frankie."

"Nunca te dejé, Gee." Frank frunció el ceño y se alejó, mirándolo con confusión.

"Pero ya no estás cerca como solías estarlo." Gerard se encogió de hombros.

Frank lo soltó y se puso de rodillas frente a Gerard antes de acunar su rostro. Le sostuvo las mejillas y lo miró a los ojos. "Pero no te dejaré, Gee. Te amo."

Gerard miró sus verdes ojos y sintió un nudo en la garganta formarse por sus palabras.

"Yo- Yo-" Gerard empezó pero fue interrumpido por un par de labios resecos sobre los suyos. Gerard ronroneó y se inclinó, profundizando el beso.

Las manos de Frank bajaron por sus mejillas y descansaron en sus hombros. Lo empujó lentamente y Gerard entendió la indirecta, se recostó lentamente y lo miró.

Frank se puso un poco rosa cuando se montó encima de Gerard sobre sus caderas. Se inclinó de nuevo y colocó un suave beso en sus labios. "Por favor, Gee. Jamás pienses que te dejaré."

Gerard soltó un pequeño suspiro y sacudió la cabeza, sintiendo la mejilla de Frank rozarse con la suya.

Frank se sentó. "¿Gee?"

"¿Sí, cariño?" Gerard susurró.

"¿Qué puedo hacer?"

Gerard frunció el ceño. "¿A qué te refieres?"

"P-Para ti. Qué puedo hacer para probarte que te amo." Frank susurró, mordiéndose el labio.

"N-No lo sé." Gerard contestó con honestidad.