- Bruno, creo que deberíamos regresar ya esta oscureciendo. - Dijo Junior mientras se levantaba.
- Es cierto, creo que ya te llegó la hora de decir toda la verdad hermanito. - dijo Julio con un tono burlón de "te lo dije".
Empezamos a caminar, los chicos trataron de animarme para correr un poco pero no puedo, necesito tiempo para pensar lo que le diré a Abigail no puedo llegar y decirle "hola abi, lamento haber huido pero es que tenía miedo de que tu amiga Cammy no me pudiera ver ¿Sabes? Es que soy un fantasma".
"Okey eso no sonó tan mal".
Conciencia no vengas a molestar ahora, gracias.
Nos acercamos a la casa, puedo ver la luz de la cocina encendida, aceleramos el paso, llego a la puerta de la cocina.
"Tranquilo, todo saldrá bien, Abi te entenderá".
¿En serio?
"No, la verdad es que se pondrá como loca y querrá matarte y luego recordará que estás muerto y le dará mas rabia".
Sacudo la cabeza para no seguir escuchando al enemigo que tengo como conciencia, abro la puerta y ahí está la mujer de mi vida
"¿De tu vida? Querrás decir la mujer de tu muerte".
¿No puedes callarte un momento?
"Si ya, me callo".
Ella está cocinando, me mira y me ignora, se nota lo enojada que está. Julio y Junior me miran con una mirada de "buena suerte" y se desaparecen por las escaleras, me acerco y la abrazo por la cintura y le susurro al oído.
- Lo siento - noto como su piel se eriza al instante, beso su cuello y rápidamente se gira hacia mi.
- ¿Por qué te fuiste Bruno? ¿Cuál es ese secreto tan grande? Quiero que me digas toda la verdad. ¿Tienes problemas legales?.. - Mientras Abigail hace sus preguntas sin darme tiempo de responder una sola de las tantas que ha formulado yo solo me quedo mirando sus hermosos ojos que aún luciendo preocupados se ven preciosos, noto como mueve sus labios con cada pregunta, ella nota que estoy mirándole los labios, se sonroja y esa carita sonrojada es lo que me impulsa a estampar mis labios contra los de ella, empiezo con un beso tierno, la tomo por la cintura y el beso se intensifica siento como ella me acaricia por encima de los pantalones, tengo una potente erección y sé que si no paro esto ahora nunca le podré decir la verdad.
- Espera Abigail, tenemos que hablar. - digo con la voz entre cortada. - tengo que decirte la verdad.
- Okey dilo.
- No, vamos a un lugar más cómodo. - la tomo de la mano y la llevo al jardín.
Nos sentamos en la hierba, ya la noche había caído con toda su belleza, las estrellas adornaban el cielo de una manera especial, la luna nos alumbra, miro Abigaíl y mi corazón late desbocado, trago en seco y trato de mirar hacia otro lado para no saltar encima de ella y hacerle el amor aquí mismo en el jardín.
- Ya estamos aquí, ¿Qué me ibas a decir?
- ¿Abi tú crees en cosas sobre naturales?
- Mmmm no sé, ¿Cómo cuales cosas Bruno?
- Fantasmas. - Abigail me mira y por un instante pensé que saldría corriendo, se puso pálida y un poco nerviosa.
- La,la verdad es que si, - cuando dijo que si mi corazón dio un vuelco de alegría y esperanza. - la gente siempre me ha dicho que tengo mucha imaginación pero cuando niña vi uno, mis padres me aseguraron que no había visto nada, que era producto de mi imaginación pero no es así, sé perfectamente lo que vi y - me mira y sacude la cabeza - no sé porque te digo estas cosas.
- No, está bien continúa.
- Solo es eso. - Me mira y sonríe como solo ella lo sabe hacer.
- ¿Confías en mi?
- Claro que confío en ti. - dijo mientras me miraba fijamente tratando de averiguar lo que planeaba.
- Vamos. - dije extendiendo mi mano.
- ¿Adónde? - dijo para luego tomar mi mano y levantarse.
- Te llevaré a un lugar y luego te contaré toda la verdad.
- Vale.
Empezamos a caminar, es increíble que ella siendo dueña de la casa y del terreno nunca halla caminado por aquí. Un sonido extraño me sacó de mis pensamientos.
- Bruno, ¿Qué es ese ruido? - dijo un poco asustada.
- Tranquila. - miré a mi alrededor y me di cuenta que solo era un conejito. - es solo un conejito Abigail.
- Awww mira que tierno es - se agacha y lo toma en sus manos. - Es hermoso, tómalo.
- No, abi no creo que - Antes de que pudiera hacer algo Abigail puso el conejito en mis manos transparentes para todos excepto para ella, traté de sostenerlo pero fue inútil el conejito traspasó mis manos cayendo fuertemente en el suelo. Mientras el conejito se quejaba de dolor por caer en una piedra Abigail trataba de calmarlo mientras yo solo estaba ahí paralizado.
- Bruno
- Abigail yo - me interrumpe.
- ¡Abigail nada! Quiero que me digas la verdad, ¿Por qué el pobre conejito traspaso de tus manos al suelo? Y no me digas que vi mal porque sé perfectamente que no es así. - Estaba muy seria pero pálida como un papel, sus labios temblaban de rabia o quizás miedo pero creo que ya es hora.
- Abigaíl yo soy un fantasma.
***
Holaaaaaaaaaaa chiquitines de mi vidaaa lamento todo el tiempo sin publicar he estado enferma pero ya estoy aquí y les dejaré un adelanto pero mañana subiré el próximo capitulo más largo, lo subiré mañana como compensación por todo este tiempo sin subir capítulos. Quiero agradecerles por todoo ¡Dios ya somos 4k!😱😍😍 los amo mis chiquitines.
Aquí mes dejo mi Instagram por si quieren saber o interactuar conmigo. @Wandalypatricia .
Chaitoooo no olviden compartir la obra con sus amistades para que seamos más y conquistemos el mundo guajajaj😂🙈
Lo sé, no soy para nada normal.🤦
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Embarazada de un fantasma.
Fantastique¿Nervios? Quizás, tal vez no... ¿a quién engaño? Estoy más nerviosa que el día que tuve que dar un discurso en mi graduación; estoy a punto de bajar rápidamente las escaleras como hago de costumbre, pero algo me detiene, sonrío, empiezo a bajar las...