『Híbridos』➼BTS

【Prólogo】

Jin.

—T-tengo miedo... —susurró JiMin, acurrucándose más hacia mí.

Supongo que eso fue lo último que pudo soportar JungKook. Estalló en sollozos.

—Por favor, Kookie, no llores —supliqué al borde de la desesperación. Era el mayor, debía protegerles. Debía estar tranquilo y no dejar que nadie les dañara—. Si haces ruido, los malos nos encontrarán.

JungKook tragó grueso.

—¡He oído ruidos! —gritó un agente de policía, posando su mirada por el montón de cajas donde nos escondíamos. Y temí que ese fuera nuestro fin.

—¿N-nos han encontrado? —preguntó JiMin. Apenas podía hablar; verle tan aterrado me hizo sentir aún peor.

No quería decir esto. Verdaderamente no quería. Pero comprendí que no había otra opción.

—Chicos... Es hora de correr.

—¿Qué? —dijo JungKook escandalizado.

—Si nos quedamos aquí, nos encontrarán —expliqué, tratando de no parecer tan nervioso como realmente me sentía—. Cuando cuente tres, saldremos de aquí lo más rápido que podamos. Y no dejaremos de correr hasta que no hayamos alcanzado un lugar mínimamente seguro.

JiMin y JungKook se dieron una mirada, vacilantes. El miedo se reflejaba en sus ojos.

De nuevo, ambos se fijaron en mí. Esperando a que pasara algo. Esperando a que yo hiciera que ese algo pasara.

—No hay otra opción... —remarqué.

Suspiraron al mismo tiempo, cansados. No querían creer que esto fuera a pasar. Yo tampoco quería hacerlo.

Finalmente –después de darse otra de sus miradas– asintieron, sin ganas.

Cogí aire y me armé de valor.

—¡Uno... Dos... Y tres! —grité con todas mis fuerzas, y salimos de nuestro escondite.

Y, como les había dicho, corrimos.