Recuerdos de un amor compartido.

Capitulo 1

-Michelle Morgado! Levantante en este mismo instante!, llegarás tarde a tu trabajo! Y recuerda que debes juntarte con Julieta hoy. -Dijo mi madre.

-De acuerdo mamá ya voy! -Dije gritando yo también para que me escuchara desde abajo.

Me levante y me dirigí directamente al baño a alistarme para mi trabajo.

Trabajo como secretaria en un despacho de abogados, mientras estudio para sacar mi titulo de Chef internacional (afortunadamente solo me queda un mes para salir así que sólo debía estudiar mucho para los exámenes finales), todo esto para poder independizarme. aquí mismo en los Ángeles, ya tengo 26 años es hora de hacer mi propia vida.

-Michelle que se te enfría el café

-Ya voy -Grite luego de terminar de arreglarme.

Tome mis cosas y baje por las escaleras, no me preocupe por la hora ya que mi madre siempre me mentía con eso para apurarme, llegue a la cocina y ví la hora en el reloj que cuelga de la pared, quedan 45 minutos antes de que deba entrar, típico.

-Mamá¿Cuanto tiempo seguirás cambiando la hora para apurarme?

-Mija, solo es para que seas un poco mas rápida. -Respondió ella simplemente mientras me servía una taza de café.

Me senté a tomar mi taza de café, me gusta el café negro al igual que mi corazón, me reí sola de mi chiste, al parecer mi madre se percató porque me dijo.

-¿Otra vez pensando en el chiste del café negro?

-Si, jamas pasa de moda.

-Ay Michelle ya cambia el chiste, ese está muy aburrido niña.

-Que pesada eres mamá -Dije en tono infantil-

-Y tu que infantil. -Dijo ella riendo.

-Auch, una taza de café negro hirviendo vertido sobre mi cabeza dolía menos.

-Exagerada -Dijo mi madre para luego salir de la cocina por su bolso. -Ya va siendo hora de que te compres un auto, ganas muy bien en tu trabajo como para que yo tenga que seguir llevándote. -Dijo cuando volvió a la cocina.

-No puedo tengo que ahorrar para poder comprarme un departamento. -Dije como si fuera lo mas obvio del mundo, porque para mi lo era.- Además ¿No puede comprarme papá uno?

-Él no te mantendrá todos tus caprichos Michelle.

-Pero solo es un auto, él dijo que me compraría un departamento, esos cuestan mas que un auto, el auto ni siquiera tiene que ser nuevo.

-Hablare con él pero no te prometo nada -Al ver que no me apuraba agrego.- pero si no te apresuras se cancela el trato

Apure el resto de café que quedaba en mi taza y salí de la casa con mi madre para subir a su auto.

-¿Para cuando el novio cielo?

-¿Que?, No quiero tener novio, tuve solo dos relaciones pero me basto para no querer saber nada mas de hombres en mi vida.

-Y ¿Que hay de mujeres?- La mire mal.

-No me gustan las mujeres, me parece bien que a Anastasia le gusten, pero no soy ella.

-A mi me parece que Anastasia es muy valiente por admitirlo ante todos.

-No todos -Dije recordando a mi padre, él es el único que no lo sabe.

-Lo sabrá pronto, cuando pueda aceptarlo.

No dije nada mas por el resto de camino que quedaba, solo me dedique a ver por la ventana.