Poisoning the World : Envenenando al mundo

CAPITULO 92: Castigo (1)

El corazón del emperador Le Xuan estaba nervioso. Con este niño aquí, no se atrevería a ser irrespetuoso ...

La mirada del emperador Le Xuan hacia ese niño se volvió débilmente complicada.

Ese niño parecía no haber notado mientras sonreía ligeramente. Desde que llevaba una máscara, incluso si estaba sonriendo, todavía no podía ver mas allá de su expresión. Sin embargo, por alguna razón, encontraron que su sonrisa era en realidad era muy agradame de vista incluso se sentía encantador ...

Ji Yunhao pareció sentirse atraída por esa sonrisa. Sintió que su corazón temblaba. Esa sonrisa le parecía muy familiar ...

Estaba a punto de entropear su cerebro para pensar en quién sonreía de esa manera cuando las siguientes palabras del niño lo dejaron atónito. "Su Alteza, el Príncipe Heredero, puede llamar a las parteras ahora.

Una partera fue una persona que se encargó de las mujeres embarazadas y les ayudó cuando estaban en trabajo de parto o cuando tienen un aborto involuntario.

Estas personas tenían una experiencia muy rica cuando se trataba de embarazos. Una partera de alto nivel incluso podría determinar cuánto tiempo una mujer había estado embarazada sólo por mirar su vientre ...

Ji Yunhuang realmente se había preparado bien. Después de que el emperador Le Xuan aprobó, él envió a las parteras esperando fuera del palacio ...

Las dos parteras que entraron eran parteras famosas en el país de Chang Kong. Uno de ellos había ayudado incluso a una concubina imperial a dar a luz.

Bajo las órdenes de Ji Yunhuang, se presentaron para examinar a Hu Diechang ...

Después de que tardara en quemar un palo de incienso*, una de las parteras contestó en un tono muy cierto. "La señorita Hu ya estaba embarazada hace unos 50 días".

*(El palo de incienso es aproximadamente de 30 a 45 minutos)

La otra partera especificó: "Debe ser alrededor de 49 días".

Cuando las palabras de las dos parteras salieron, causó que las caras de las otras personas cambiaran ligeramente.

El gran mariscal Hu se quedó atónito por un momento antes de que de repente se enfureció. "¡Mierda! ¿Cómo puede estar cerca de 50 días embarazada?! "

Ese niño dio una sonrisa superficial. "Si el niño en el vientre de la señorita Hu era del 6to Príncipe entonces ella realmente no podría haber estado cerca de 50 días embarazada. Esto se debe a que el 6to Príncipe había dejado la capital hace 2 meses y no regresó hasta hace 1 mes ... "Eso era para decir que si el niño era de Ji Yunhao, el feto debería haber estado desarrollándose durante un mes y absolutamente podría no haber superado más de 30 días ...

La única posibilidad que quedaba era que la señorita Hu había engañado a Ji Yunhao mientras él se había ido, dejándolo usar un sombrero verde*.

*(Este es un idioma para un hombre que está siendo cocinado por su esposa o amante. El idioma proviene de una historia de una esposa que engaña que siempre hizo que su marido llevaba un sombrero verde antes de que él se fuera, así que su amante sabría cuando era seguro entrar en la casa.)

La mirada de aquel niño era fría cuando aterrizó en la cara de Ji Yunhao. "6to Príncipe, ese día en la casa de té, las palabras de Ning Xuemo sembraron una semilla de duda en ti, ¿no? Por eso enviaste a la gente a investigar. Sin embargo, su gente era realmente capaz. En realidad, descubrieron no sólo el hecho de que Hu Diechang engañado a usted, si no que también encontraron de quién era su amante. Por eso usted se enojó y enviaron a los hombres a perseguir en secreto a su pareja para matarlo. Luego, buscó a Hu Diechang para saldar la cuentas. Después de matarla, incluso trataste de empujar la culpa a Ning Xuemo ... "

Esa conclusión era como si la hubiera presenciado personalmente. Ji Yunhao secretamente apretó los dientes. "Esta es sólo tu conjetura. ¡No hay prueba, por lo tanto, esta explicación no es sólida! "

La esquina de los labios del muchacho se levantó ligeramente. "Parece que aún no lo admites hasta que te empujan a un rincón y no renuncies a la esperanza a menos que estés en las orillas del río amarillo*. Bien, entonces tendré que convencerte."

*(Básicamente no resignarse a la situación hasta que estén muertos. El río amarillo representa la vida futura. En este caso se refiere a cómo Ji Yunhao no está renunciando a la esperanza, incluso en este momento.)

Miró a Ji Yunhuang. "Su Alteza, puede dejar que los otros testigos entren ahora".

'¿Todavía hay más testigos?'

La expresión de Ji Yunhao empeoró. Con el "niño inmortal" aquí, nadie se atrevía a poner fin a la situación y sólo podía permitir que progresara.

Muy rápidamente, entraron 3 personas. Dos hombres y una mujer.

Cuando Ji Yunhao vio a esas tres personas, su cuerpo se tensó en shock mientras su cara palideció drásticamente. Ahora, finalmente supo lo desesperada que se ha convertido la situación.