Poisoning the World : Envenenando al mundo

CAPITULO 193: Nunca había visto este tipo de ropa antes

'Será mi imaginación?'

En realidad sentía que este chico se había reducido un poco su tamaño y su cara un poco más tierna.

Antes su rostro parecía alrededor de 2 años de edad, pero ahora, sólo parecía un bebé de 1 año de edad.

No pudo resistirse a recogerlo. "¡Sí, es más ligero por 1 kilo también!"

Mientras lo sostenía entre sus brazos, ella lo miró con recelo. "¿No podría ser que usted realmente tiene un  envejecimiento inverso y cada día te vuelves más joven?"

El niño pequeño "......."

Estiró sus diminutas manos para frotarse la cara, la esquina de sus labios formando un gancho y por una vez, habló un poco. "Pequeña señora, es porque eres tan tonta que implicaste a este Ben*.... yo, por eso me volví más pequeño!"
*( Es el mismo ben (?) Como en bengong, benwang, bengongzi. Es una forma en que la realeza o la clase alta se ocupan. Aqui él estaba hablando el "yo" de emperador, y luego cambio a "yo" de normal)

Su pequeña mano era más suave y blanca que su rostro, pero, por el contrario, era tan helada. Ning Xuemo sintió como si su rostro estuviera en contacto con el jade de hielo, que se filtraba fría y lisa.

Su corazón dio un vuelco. Al ver que sus pequeñas manos estaban aún más heladas, parecía que, para realizar su ataque final, realmente perjudicaba su vitalidad.

Este niño podría haber escapado por sí mismo en ese entonces, sin embargo, decidió ayudarla. Parece que mantuvo sus palabras.

Pensando en cómo lo había atado, Ning Xuemo se sintió un poco culpable mientras examinaba sus manos.

"No está mal, sin duda es un pequeño espíritu de ginseng, su capacidad de recuperación es muy fuerte." Fue atado por ella durante más de 2 horas, pero ni siquiera una marca roja se quedó atrás. Su piel era todavía blanca y tierna, como si estuviera tallada en jade de carnero.

"Chico, dame un par de pantalones para llevar." Ella todavía no llevaba nada debajo de su bata!

"No hay nada adecuado para darte". El niño meneó la cabeza.

¡Incluso si no había nada adecuado, ella podría ajustarlo para adaptarse a ella! ¡Llevar un pedazo de ropa interior a mano era aún mejor que no tener nada!

Repentinamente pensó en su pequeño delantal ...

"¿Puedes darme tu delantal? Lo adaptaré a mi gusto."

El chico la miró y dijo con una voz que no era ni tacaña ni débil.
"No"

Podría darle un buen conjunto de ropa, ¿pero ese delantal estaba fuera de cuestión?

'¿Podría ser que el delantal fuera una especie de tesoro?'

"Entonces, ¿no tienes otra ropa? No importa el tamaño. Puedo coserlos juntos y sacar algo de él." Su demanda no fue muy difícil. Sólo quiere hacer un par de bragas. Si no llevaba nada debajo, no importaba si ella estaba subiendo o gateando, todo estaría expuesto!

El niño murmuró para sí mismo, luego buscó algo en su manga ...

Después de un momento, sacó un trozo de tela y se lo dio a Ning Xuemo. "Sólo tengo esto."

Ning Xuemo miró esa tela hecha de tejido blanco. La pieza de tela tenía una forma irregular y parecía un poco como si fuera la mitad de un pantalón ...

Ella lo miró mientras estaba un poco desconcertada en su mente. Tenía la impresión de que él sacó uno de sus pantalones de repuesto....

Esta vez no estaba de humor para preocuparse por las excentricidades de este pequeño niño. Inmediatamente, agarró la hoja de tela y usó su corta hoja para cortarla.

Tenía suficientes agujas para usarla y, después de un corto momento, terminó de coser una. Ella se fue detrás de una gran roca para usarla.

El niño estaba observando mientras ella estaba ocupada cosiendo su braga y, cuando terminó, él estaba mirando atentamente más de una vez a la braga.

Nunca antes había visto este tipo de ropa.

(T: Pues claro, ya que en este mundo las bragas son como pantalones, y lo que Xuemo hizo tenía una forma de "Y" XD)

¡Una chica rara, con manos y pies muy ágiles!

Finalmente, ya no estaba desnuda. Ning Xuemo sentía que su dignidad había sido restaurada un poco.

El material utilizado para la ropa interior era bastante bueno por lo que se siente muy cómodo.

Ella sonreía hasta sus cejas mientras sostenía la mano del niño. "¿De dónde sacaste este material?"

"Si sigues demorando, vas a ser comida para las bestias mágicas." El pequeño niño no parecía acostumbrado a estar tan cerca de otros como él sacudió su mano atrás, sin responder a su pregunta. Levantó la cabeza para mirar una montaña cercana. "¡Los halcones de ojos dorados están descendiendo!"