CAPITULO 190: El misterioso hombre vestido en blanco (3)

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Su piel era más exquisita y más blanca que antes y su pecho había llegado al tamaño de una bola de masa cocida al vapor ...

Su piel era más exquisita y más blanca que antes y su pecho había llegado al tamaño de una bola de masa cocida al vapor

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(T: Bola de masa cocida al vapor XD)

Si hubiera sido un hombre normal seguramente contemplaría esta encantadora vista, tal vez habría sido despertado y su lobo interior podría haber surgido. Pero este hombre vestido en blanco era obviamente diferente de esos hombres. Para él, este pequeño cuerpo no era diferente de un pedazo de carne. Flotó junto a su cuerpo y agitó el agua con su palma para limpiarla.

A pesar de que era poderoso, nunca había esperado que un día usaría sus habilidades inexpertas y torpes para ayudar a limpiar a una persona. Eventualmente, se las arregló para lavar toda la sangre en ella, pero debido a su descuido, un montón de marcas débiles y magulladuras se dejaron en su cuerpo...

En medio de la limpieza, las pestañas de Ning Xuemo temblaron 2 veces, como si estuviera a punto de despertar.

El hombre miró la situación actual entre los 2 antes de simplemente golpear la parte posterior de su cabeza de nuevo con su palma. Como era de esperar, Ning Xuemo cayó completamente inconsciente. Parece que ella no se despertaría por un tiempo....

Incluso limpió el espacio debajo de sus uñas antes de finalmente llevarla de vuelta a la orilla.

La ropa que llevaba estaba muy desgarrada y hecha jirones. Era evidente que no tenía intención de volver a usarlos mientras sacaba una pequeña bolsa del interior de la manga. Sus dedos levantaron un conjunto de ropa blanca como la nieve, y sin prestar atención a nada más, la ayudó a ponérsela ...

Ese traje blanco era bastante extraño, cuando lo sacó, era un conjunto de ropa masculina, pero después de ayudar a Ning Xuemo a ponérselo, en realidad se encogió hasta que encajó en su cuerpo al instante.

Su pelo largo y húmedo se extendía desordenadamente sobre sus hombros, que parecían estar fuera de lugar en comparación con el manto de su cuerpo.

El hombre vestido de blanco era obviamente un perfeccionista, ya que no estaba acostumbrado a ver esto. Como resultado, tomó el peine que apareció de quién sabe dónde para ayudarla a peinarse el cabello.

(T: Ese peine seguro que siempre lo tenía guardado para que un día le sería útil XD)

Como no tenía experiencia en peinar a otros, sus movimientos eran inevitablemente bastante incómodos a veces. Unas cuantas veces, sacó varios mechones de su cabello por accidente. Afortunadamente, Ning Xuemo estaba inconsciente o de lo contrario estaría gritando de dolor.

Una vez que su cabello se había peinado adecuadamente, era suave y fluía. Después de peinarle el cabello debidamente, siguió peinando unas cuantas veces más mientras sus dedos rozaban su cabello. Como la estaba peinando, inconscientemente ató su cabello en un bollo de flores, e incluso le ayudó a ponerse una horquilla de perlas.

(T: ¿Cómo es que él, un hombre inmortal, trae consigo una horquilla de perla que era para mujeres? ( ͡° ͜ʖ ͡° ) )

Finalmente se dio cuenta de lo que hizo después terminar con su trabajo de peinarla, haciéndole mirar fijamente su pelo antes de mirar sus manos. Una expresión extraña brilló en sus ojos.

(T: Qué lindo (ฅฅ*)♡ )

Nunca había ayudado a peinar el cabello de una chica. A decir verdad, él ni siquiera podía ser molestado en cuidar de su propio cabello y por lo general sólo lo ata al azar con una cinta.

No pensó que, inesperadamente, logró ayudarla a atarse el cabello con un peinado tan guapa en tan poco tiempo. '¿Era este... un talento natural que tenía?'

(T: Biit~ [Habilidad desbloqueada] [Nombre: Peinar cabello] [Nivel: máximo])

La examinó una vez más. El actual Ning Xuemo era como un pan que acababa de salir del horno, limpio y sin una mota de polvo.

Finalmente quedó satisfecho. Se sentó sobre una gran piedra antes de levantar los brazos para abrazarla.

Su pequeño cuerpo y delicado sorprendentemente encajaba perfectamente en sus brazos, haciéndole sentir una sensación de satisfacción. Ella era mucho más obediente cuando estaba inconsciente, permitiéndole moverse alrededor con sus extremidades sin mucha resistencia. Después de un momento de esfuerzo, logró colocarla en una posición de loto sentado antes de cruzar los brazos en sus manos. Cerró los ojos cuando empezó a ayudarla a sanar sus meridianos dañados. Una débil luz blanca emanaba de su cuerpo y los envolvió, mientras circulaba a su alrededor como arroyos de agua ...

Era evidente que ayudarla a sanar sus meridianos era muy agotador, aunque no había transcurrido mucho tiempo, la frente del hombre vestido en blanco estaba densamente cubierta de gotas de sudor, que rodaba de su nariz y goteaba sobre su rostro.

Poisoning the World : Envenenando al mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora