DULCE PECADO │EDITANDO│❀

Capitulo 25. "Hubiera olvidado"

*Lean la nota del final, por favor*

-Muy bien, Niall, puedes dejar tus cosas por aquí. –Me indicó hacia una esquina de la habitación la chica que me había recibido.

El “centro de rehabilitación mental” prometía quitarme de la cabeza mis pensamientos suicidas y mi obsesión con Liam en tan solo tres semanas, en realidad, eso parecía un tiempo record. Según Louis, este centro era el mejor de Londres, había buena atención y garantizaba resultados. Pero yo no sentía que fuera así. No dudaba de que el centro fuera bueno –porque habían millones de reconocimientos otorgados por el gobierno en casi todas las paredes-, de lo que dudaba es que pudieran curarme, claro, me quitarían los pensamientos suicidas y malos, pero jamás me sacarían de la mente a Liam, y pensar en Liam era Malo, Liam era malo.

Coloqué en el suelo la única maleta que había llevado y escuché las indicaciones que me daba la chica –que al parecer era una enfermera y se llamaba Kate- Luego de decirme todo lo necesario sonrió por última vez y se marchó.

Me dejé caer en la cama y solté un enorme suspiro, me lleve mis manos al rostro y lo sentí húmedo, estaba llorando, y por Liam, de nuevo. Tal vez el problema no era Liam, tal vez el problema que yo extrañaba demasiado a Liam, uh, yo era el problema.

El problema también era que las personas hicieran bromas de mal gusto, llamando a mi casa diciendo que eran Liam Payne ¿Qué no sabían que con eso no se jugaba?, el dia anterior había recibido esa llamada que me había dejado helado, espantado, “Soy Liam” me habían dicho, ¡QUE DEMENCIA!, Liam estaba en prisión, el no podía llamarme…el no… no podía…oh, tal vez si lo había hecho.

-No… no podía ser Liam. –dije para mi mismo con el ceño fruncido.

Liam.

Hablándome por teléfono desde prisión.

¡Que demencia!.

*

“¡No, Niall! ¡No volverás a ver a Liam, jamás! ¡ENTIENDE!”

“PERO YO LO AMO, LOUIS! ¡no puedes hacerme esto!”.

“ES MI DECISION, ¡jamás estarás otra vez con ese enfermo, Punto!”.

“¡TE ODIO!”…

Me desperté con la respiración entrecortada y bañado en sudor, otra vez el mismo sueño. Suspiré y mire la hora, 7:30pm había dormido desde las dos de la tarde. Me levanté de la cama y me puse mis pantuflas para salir de la habitación, Salí al pasillo y sentí nostalgia al pasar frente al cuarto de Niall… pobre Niall, estaba mal, y yo no podía hacer nada.

Era demasiado, siempre lo había sido, había adquirido la responsabilidad total sobre Niall desde que nuestros padres habían muerto, pero, nunca me había sentido tan impotente, tan inútil, y tan cansado. –tal vez porque siempre conté con la ayuda de Liam-, Liam, que irónico, el había iniciado todo este problema.

Me dirigí a la cocina para prepararme algo de comer, no había comido desde la mañana –y no me apetecía hacerlo- me sentía demasiado cansado. Cuando estaba preparando unos sencillos macarrones con eso me sobresaltó el timbre de la entrada. Me sequé las manos en el pantalón del pijama y fui a abrir la puerta.

-¿Harry?, ¿Qué haces aquí?. –le pregunté al amigo de mi hermano.

Harry Styles, 17 años, cabello rizado y un completo berrinchudo. Lo conocía bien, había sido amigo de Niall desde los ocho años y siempre se pasaba por la casa, eran como uña y mugre. Literal.

-Yo… uhm… ¿Puedo pasar?. –lo miré con el ceño fruncido.

-Claro, ¿Niall no te dijo que se iba a… que no iba a estar?.

-Si…

-Oye, Harry, no me mal entiendas pero, ¿Qué haces aquí entonces?. –le dije cerrando la puerta.

-Quiero hablar contigo. –contestó decidido.

Otra cosa que caracterizaba a Harry Styles –además de sus rizos- era su estúpida e insoportable timidez, pero esta vez no había ni rastro de ella, se había esfumado, ahora hablaba con fuerza, y claramente lo que hacia remarcar su voz que siempre había sido gruesa… uhm, si, su voz me gustaba.

Debo admitir que cuando estaba pequeño y Harry venia a casa a jugar con Niall, me gustaba jugar con ellos, me gustaba jugar a los piratas y Harry siempre era la damisela en apuros esperando a ser salvada por su héroe –y no era Niall- creo que llegué a tener un enamoramiento de niño hacia Harry, pero debía olvidarlo, porque el era seis años menor que yo, y lo superé. –Liam debió de haber hecho lo mismo con Niall-.

-Adelante, ricitos. –me tiré al sofá. –Soy todo oído.

Y el muy descarado se sonrojo hasta las orejas.

Había olvidado lo lindo que se miraba sonrojado.

*Trece comentarios, seis votos y sigo. Les pido disculpas por no haber subido antes pero el colegio no me deja y ayer tuve una cena, lo siento. tambien disculpas porque el capitulo es corto )): pero bue, aqui esta, intentare que el otro sea largo ¿vale? muchas gracias por leer. mi twitter @katxnialler IG: katxlouis