1 ~| ¡Dónde estás! |~

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Sentía la oscuridad invadir mis pensamientos con temores e inseguridades. Sentía como mi enemigo me orillaba, me intimidaba. Eso me quebraba por dentro, sin tener ninguna piedad de mi.

¿Donde está tu Dios? –Preguntaba. –Si te ama tanto ¿porque te ha abandonado en esas condiciones? Sabe lo que esto significa...¡que no le importas!– Aquello me atormentaba.

De repente me desvaneci, llorando en silencio sin rispotar ninguna palabra, abracé mi almohada con tanta fuerza, aferrándome hacia ella para tratar de calmar el inmenso dolor que atrevezaba mi corazón. Sin darme cuenta caí en un profundo sueño, creyendo encontrar un poco de tranquilidad y descanso, ¡pero no era así! Era como estar despierta literalmente.

–¡Auxilio, auxilio! ¡Ayúdame, Por favor! ¡ayúdame! gritaba desesperada.– "Era un monstruo queriéndome devorar, pero gracias a Dios, solo era una pesadilla desagradable"

Me levante de la cama a buscar algo de comer porque cuando te siente así, de miserable no le encuentras sabor a la vida y hasta los deseo de respirar se desvanecen. Cuando alguien calla ante tus gritos de auxilio y guarda silencio a tu llamado simplemente te sientes morir!!!...es como nadar en contra la corriente sin ningún resultado. Razón tuvo el profeta Jeremías de exclamar: "¿Porque fue perpetuo mi dolor, y mi herida desahuciada no admitió curación? [Jeremías 15:18]

Porque cuando vives en medio del silencio no encuentras salida ni solución, llevas todo dentro, convirtiendo a un lindo ser en alguien desconocido y difícil acceso a su corazón...Es como navegar sin brújula, caminar sin sentido o razón, y si lo haces es:  ¿qué mas da? Es lo único que te queda, parecer un sombi... para no dejar de existir, Pues ¿como vivir sin tu amado, sin escuchar su tierna voz, pronunciando tu nombre?

Cuando amas de verás a alguien... Su ausencia te daña, su silencio te hiere como diciendo: "No me Importas" pero ese no es mi caso. El me ama y si calla no entiendo la razón. Solo entiendo que me consume por dentro...pero ¿como hago para vivir sin su amor? ¿Como puedo vivir si él no esta conmigo? ¡Si eres mi brújula, Mi guía, Mi todo!

Siento un escalofrío invadirme. ¡Es horrible esta sensación! "Te llamó y no respondes" Estoy en esta esquina esperando a que vengas por mi rescate."

De repente alguien me dice: –¿Dónde está Dios? ¿Acaso no eres tu la que lo exaltas tanto y dejas claro su fidelidad?

–Respondo con seguridad.  ¡El esta conmigo, es posible que no lo vea, pero te aseguro que nunca me ha dejado! – Susurraba en voz baja, mientras mis lágrimas calurosas se derramaban por mi mejilla.

–¡Nadie te quiere...todos te han abandonado!  ¡Mirate sola, sin nada, hasta tu familia  te rechaza y te culpa! ¿Acaso no tienes suficiente? – me confrontaba aquel desconocido.

No podía hablar, enmudecí y mis gemidos dentro de mi hablaban por mi, agravando mas mi dolor. Trate de gritar pero ningún sonido salió de mi boca.

–¿Que esta pasándome? – Dije en mis pensamiento si yo no soy así...pero en ese preciso momento recordé:

¿Se olvidara la mujer de lo que dio a luz,  para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidare de ti. He aquí que en las palmas de mis manos te tengo esculpidas; delante de mi están siempre tus muros. [Isaias 49:15]

Entonces respondí al que acosaba mis pensamientos. – ¡Dios está conmigo, en mi vida, a mi lado y en todo lugar! ¡Es cierto que me siento sin fuerza y ánimo de continuar pero, aunque, sin aliento y un poco de amor lo seguiré buscando hasta encontrar al que ama mi alma!

A veces los cruceros de la vida, son como la leyenda del Guardián. No lo ves, pero los susurros del silencio te dicen: ¡Allí está! No lo ves, productos de las heridas, insultos, derrotas o vergüenzas sufridas, pero ¡allí está!...Invisible a tus ojos, pero visible a tú alma.

No soy la mejor consejera pero los silencios te depuran, te examinan, te alientan o te encierran, sino estas dando el cuidado o atención necesaria para sacar lo que te llevará a la cima o al fracaso.

Vi abismos mientras caminé y pensé no lograr salir...observé a mi propia alma llorar y temblar a la oscuridad por tanto desierto y sin agua que quitarán su sed.Creí no volver a levantar mi mirada y reflejar valor, amor, paz y mucho menos inspiración. Me sentía seca, paralizada y debilitaba. Lo había intentado casi todo sin lograr resultado.

EN EL SILENCIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora