SEPARADOS

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Inevitablemente los mugiwara habían sido separados por el Shichibukai Bartholomew Kuma en el Archipiélago de Sabaody; ese día en el que la tripulación de Sombrero de paja había sido derrotada...

Cada uno de ellos había sido enviado a diferentes partes del mundo y por lo cual no había forma de encontrarse en ese momento pues no tenían idea de dónde se hallaba cada uno.

Roronoa Zoro al despertar del largo viaje se dio cuenta de que estaba en el reino Shikkearu, el lugar era muy tétrico pues había un castillo y además Perona, la chica enemiga en Thriller Bark estaba en ese mismo sitio.

Al parecer mientras él se encontraba inconsciente la chica se había encargado de curar sus heridas pero parecía que a cambio no solo esperaba las gracias por parte de él...

No tardo mucho en darse cuenta que ese lugar era precisamente el hogar de su peor enemigo o más bien su más grande reto en la vida: Ojos de halcón Mihawk. Sabía claramente que si quería cumplir su sueño de ser el mejor espadachín del mundo, debía derrotarlo.

Fue cuando llegó el periódico y miró a su capitán en la portada que supo que él les había mandado una señal, no fue sino con ayuda de Perona que comprendió el mensaje. Pero eso no era todo, después de pedirle a Mihawk que lo entrenara y dejar a un lado su orgullo, comenzó a entrenar duramente, pero para su desgracia tenía que soportar a Perona.

Esta chica insoportable que tenía una habilidad contra la que él no podía hacer mucho, claro sin tener que matarla; pero al parecer esta mujer lo que pretendía era que él se quedara con ella, tal vez le sirviera prácticamente como esclavo ya que según ella era una princesa y necesitaba a gente bajo su servicio...o quizá solo fuera porque en realidad no deseaba estar sola, sin importar cuáles fueran sus verdaderas razones parecía divertirle la idea de tener a Zoro sólo para ella.

La chica no sabía respetar el espacio personal en cuanto a proximidad se refiere, pues cada vez que quería molestar o decirle algo a Zoro su cercanía era tal, que solo escasos centímetros de distancia separan sus labios de los de ella, era realmente incómodo y por más que él le decía que no se acercara tanto a él, ella parecía disfrutar de ese sonrojo que le provocaba al espadachín, o más que nada de esas situaciones un tanto comprometedoras.

Zoro entrenaba diariamente venciendo a esos simios que habían aprendido algunas de las técnicas de Mihawk, mientras que Perona, esa mujer le fastidiaba la vida, pues cada que podía le lanzaba uno de sus hollows para divertirse con cada una de las cosas que el peliverde decía quizá inconscientemente.

Por lo regular eran comentarios tan depresivos que a Perona le causaban mucha gracia.

Una noche mientras Zoro dormía, ella se paseaba por ahí al no poder dormir, entonces alcanzó a escuchar que él decía algo entre sueños, le dio mucha curiosidad y se acercó para escuchar lo mejor posible, pero para cuando eso sucedió solo alcanzó a oír que Zoro decía-: No pude decirle nada a esa mujer.

Perona se quedó pensando a quién se estaría refiriendo, creyó que quizá se trataba de una de sus compañeras de tripulación así que se dio a la tarea de averiguarlo a como diera lugar y que mejor forma que fastidiándole la vida al espadachín, atacándolo solo por diversión con sus negative hollows.

Así que durante todos los días siguientes se dedicó a torturar a Zoro con sus ataques para descubrir quién era la mujer a la que se refería el chico.

─ Horo horo horo No puedo creer que todo lo que digas tenga que ver con esa mujer─ decía algo molesta Perona ─, ¿pero cuál mujer? ─Preguntaba mientras le lanzaba otro de sus hollow a Zoro.

Perona recordaba que en un principio Zoro solo decía cosas como: "siento haber nacido" o "siento respirar tu mismo aire" o "soy demasiado débil porque no pude defender a mis nakama"...

Separados (One shot ZoRo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora