The Big Four (En El Mundo Actual).

{ Capítulo Once }

¡Chicas! Antes de empezar, les aviso que dejé el link de las dos canciones del capítulo Nueve y Diez en mi perfil :)

¡Espero que les guste, y perdón por la tardanza! :D

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• Capítulo Once: Epílogo - Somos The Big Four.

~2 meses después...

{ Narra Merida }

- ¡Merida, dale! ¡Hace media hora que estás ahí!

- ¡JÁ! ¿Mirá quién habla?

- ¿Qué? ¡Si yo no tardé nada!

- Punzie, tardaste 40 minutos reloj en probarte vestidos, más otra media hora de elegir cuál te gustaba, y encima terminaste eligiéndote el primero.

- Bueno, sí, tardé un poco... ¡Pero vos ya me conocés, y eran todos MUY lindos...! Que vos te tardes ya es raro.

- Pero es que... No me gusta. Es muy corto... y apretado... y escotado... ¡y muy rosa!... No te ofendas, Punzie, pero no puedo creer que uses esto.

- ¡Que no es escotado!

- ¡Sí!

- ¡No!

- ¡Sí!

- ¡NO!

- ¡Sí que lo es!

- ¡No! ¡Es que a vos no te gusta nada!

- No, a ver... Los vestidos no son FEOS... Sólo que no me quedan bien, y no son mi estilo. Me siento deforme.

- Uy, Dios... A ver, mostrame.

Salí del probador blanco con espejos de la habitación de Rapunzel, tratando de respirar con el vestido rosa que traía puesto. Faltaba poco para la fiesta, y todavía no estaba lista, a pesar de que Rapunzel me tenía acá desde las dos de la tarde.

- Mmm... Nop, es que el problema es tu pelo... No te ofendas.

- Mi pelo es genial. - Ella rió.

- Bueno, bueno... A ver... ¡Ah, ya sé! ¡Tengo uno perfecto para vos!

Corrió hasta su armario y comenzó a revolver, sacar y tirar ropa por todos lados. Tuve que esquivar dos remeras, tres shorts, y casi me da un zapato de tacón en la cara.

- ¡Acá está! - Cerró las puertas del ropero blanco y se acercó a mí. Me entregó un vestido y un par de botas. "¡Sí, botas! ¡No más tacos!", pensé.

- Rapunzel, sabés que no soy muy fan de los vestid...

- *Interrumpe* Basta de protestas, ponetelo. Vas a ver que te va a encantar. Si querés, usás tus shorts mañana. - Dijo sentándose al borde de su cama, con un oso de peluche en sus brazos.

- ¿Mañana? - Pregunté mientras entraba otra vez en el pequeño probador.

- El cine, duh.

- ¡Ah, sí! Al final, ¿qué película vamos a ver?

- ¡Divergente!

- ¡Genial! Theo James es TAAAN LINDO.

- ¡Lo sé! - Dijo y las dos reímos. - Mavis y Anna ya la vieron, y dicen que está muy buena.

- ¿Anna?

- La nueva, la de Arrendelle.

- ¡Ahh! La hermana de Elsa.