Pensamientos de un Tsundere

No es fácil ser Tsundere (Parte 2)

*Agregar música loca de intro*

Sean de nuevo bienvenidos a este episodio especial de el Tsunderismo, el día de hoy contamos con algo muy especial...

Así es...

Tenemos aquí a un Tsundere en persona que nos contestará varias preguntas, bienvenido Andrew.

A: -Quiero decir, que solo hago esto porque soy el que escribe este libro-

Como usted diga, ahora continuemos con las preguntas:

¿En la escala del 1 al 10, en qué grado clasificaría su Tsunderismo?

A: -Uhm... Fácilmente lo colocaría en un 8-

Eso es alto, ¿Porqué lo coloca ahí?

A: -No es necesaria la formalidad, hombre ficticio narrador, verás... No lo pongo en un 10 porque lo puedo controlar, de cierta manera, pero el momento en el que te generas daño a ti mismo... Pues sabes que no es cualquier cosa-

A ver... Explique eso, ¿Cómo que te causas daño a ti mismo? ¿Qué tipo de daño?

A: -Es un daño psicológico, tranquilo, pero realmente afecta en mi vida... Me pone nervioso poco a poco, hasta que llega el punto en que exploto-

Por favor, háblanos de eso a detalle.

A: -Bueno... Verás, hay una manera muy simple de saber si un Tsundere es real o solamente fanático, lo sabes al verlos en su vida. Usualmente un Tsundere observa situaciones ajenas a el o ella, somos chismosos y lo sabemos, pero a consecuencia de eso solemos poner etiquetas fácilmente...

PERO LÓGICAS, ¡¿EH?! No damos un prejuicio por cualquier cosa...-

¿Y cómo afectan estas etiquetas de los demás? No son tu problema realmente.

A: -Pues solemos esperar acciones y solemos ser difíciles de tratar, pero no es una situación la que vemos... No... Una mirada, un movimiento de nariz, los puños...

Esos detalles son los que vemos, entonces el que la persona tenga posibilidad de cambiar es imposible, somos difíciles de complacer, entonces la gente se aleja de nosotros, entonces tenemos tiempo de observar a los demás y el ciclo se repite...-

¿Y porqué simplemente no lo evitas? ¿No puedes controlar eso?

A: -No realmente, es natural al 100%, como para un esquizofrénico le es imposible ignorar totalmente sus alucinaciones, o para un anoréxico verse como quiere, o para un depresivo no ver lo peor de sí... No podemos evitar esos pensamientos negativos de los demás.

"Ahí va de nuevo el idiota"

"Me pudre que no pueda razonar"

"Mira como se pavonea, ¿Qué tal si se pone algo que presumir realmente?"

"No intentes algo así y te preguntes porque fallaste, solamente remarcas lo tonto que eres"

En fin, esos comentarios tóxicos llenan nuestra cabeza-

¿Y porqué no los ignoras? Es fácil.

A: -Para alguien más, si, pero para gente como yo no.

No sé si solo me suceda a mi como tsundere o habrán otros que piensen así... Bueno, si algo odio es que alguien no esté en la madurez debida de su edad, y sí, odiar puede sonar fuerte pero así lo siento.

Cada vez que veo a alguien discutir por algo tonto, repetir los mismos errores... Simplemente no madurar; Bueno, mi cerebrito empieza a generar esos pensamientos negativos y tóxicos, pero el caso es... Es que no puedo dejarlos ir, se quedan ahí flotando, se acumulan... Como una batería-

Y cuando esa batería se llena, ¿qué sucede?

A: -No suelo ser alguien molesto o irritable, pero mientras más llena la batería más fácil me enojo, hasta llegar al punto que... Bueno, que las palabras de mi amigo se los diga-

"Neta bueh, da miedo intentar pedirte algo, no importa que sea un simple vaso de agua, tengo miedo de que te enojes conmigo sin hacerte nada"

A: -Y si... Realmente llego a perder el control, pero es algo que no sucede fácilmente, tienen que pasar meses para eso, inclusive un año, pero la persona que derrama la gota del vaso libera toda la ira contenida, duele mucho ser tu pero que esa voz negativa, ese otro yo tome mi lugar-

¿Y porqué simplemente no les dices a las personas en el momento lo que piensas?

A: -Por dos simples razones, primero, no son mis problemas los que me molestan, son discusiones ajenas, por lo tanto solamente me traeré problemas a mi persona y arruinaré otra oportunidad de amistad.

Y la segunda... Es la que más odio...

Realmente es una actitud infantil la que tendría si lo hago, ¿Qué diantres sabrá la otra persona de mi necesidad mental de desahogarme al momento? Me tachará de criticón e inmaduro.

Y recuerden que solamente hay un tipo de actitud que realmente odio-

Bueno, gracias por explicarnos... ¿Y eso realmente solo te afecta mentalmente?

A: -Desearía que fuera así, pero no, tengo problemas de espalda por heridas pasadas que a causa de la tensión me generan dolor muy agudo, terrible, llegando a dejarme inmóvil por un día o dos.

Aparte en mis relaciones personales suelo ver a la gente así:

Me agradas o te odio.

Sin grises, sin puntos medios, y la oportunidad de cambio solo existe cuando realmente me interesa relacionarme contigo... Realmente no quiero ser así, me intereso mucho por los demás, me gusta saber que están bien, hacerlos sentir bien, pero no es fácil hacerlo cuando te tienen miedo o te odian-

Sentimos escuchar eso, te deseamos todos una mejor vida, joven Andrew.

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Lo siento por este capítulo medio depre, pero de esto se trata el libro, saber cómo piensa la gente como yo.

Si eres tsundere de verdad, cuéntame tú historia, ¿Coincidimos?

Comenten y voten, ya saben que me gusta que lo hagan.