EN UN REINO NO TAN LEJANO [TERMINADA]

Capítulo 3

-Mía el es Tobías, Tobías ella es Mía. Nos presentó mi tía.

-Encerio tu!. Exclamo Tobías, ahora que ya se su nombre.

-Eso mismo dijo yo. Dije mientras lo miraba con el ceño fruncido.

-Se conocen? Preguntó mi tía viéndonos a ambos.

-Que si nos conocemos, jajajaja. Preguntale como conoció a "piernas bonitas". Le dije a mi tía mientras le daba una  palmada en el hombro a Tobías y subí a la segunda planta.

Narra Tobías

-¿Como que piernas bonitas?, Tobías de que esta hablando Mía.  Preguntó Victoria, con cara de si le hubiera pasado encima un coche.

-Emmm.. No se de que habla. De seguro es el cambio de horario, o puede ser que tenga arena en la cabeza.

-Sabes que , olvidado. Ayuda la subir sus maletas y dirige la a su habitación. Dijo Victoria, mientras se retiraba e iba a la sala.

Agarre 2 maletas de... ¿Como se llamaba? A sí, Mía y subo las escaleras. Al final de las escaleras, veo a Mía que esta muerta de la risa. ¿De que rayos se ríe?

-Te gusta lo que ves? Le cuestiono a Mía.

-La verdad si.

-Son solo sentadillas, correr durante 1 hora, la posición de plancha y abdominales.

-Tranquilo hijo de Hércules. Me reía por que te ves chistoso cargando mis maletas. Dijo Mía mientras se reía.

-Gracias por lo de Hércules y aquí están tus maletas. Digo, mientras pongo las maletas en el piso.

-¿Cual es mi habitación? Preguntó Mía, mientras señalaba a dos puertas.

Mi habitación era la de la izquierda y la de ella era la de la derecha. Claro, que antes que le dijera iba a jugar un rato con ella.
Dentro de mi habitación esta Pongo mi perro dálmata. Pongo tiene como un don muy especial, cuando a mi me cae una persona mal, pongo le empieza a ladrar y lo persigue hasta que el mismo se canse. Así que... Empiece la acción..

-Es la de la izquierda. Dije, aguantado la risa.

Mía, se acerca más a la puerta de la izquierda, toma la perilla y la abre. Y me empiezo a reír muy fuertemente, pero me detengo al no escuchar ningún ladrido.

-Hola, sabes que estas muy hermoso. Haber ¿Como te llamas?... Pongo. Dijo Mía, en cuclillas acariciando la cabeza de "Mi pongo" y viendo su collar color rojo.

-Pero que?. Fue lo único que pude decir.

En eso escuchó que alguien sube las escaleras.

-Oh! Mía, ya conociste a Pongo. Tu habitación es la de la derecha. Dijo Victoria, mientras abría la puerta de la otra habitación.

-Gracias... Adiós Pongo. Dijo Mía, acariciando la cabeza de Pongo  por última vez, antes de entrar a su habitación con su Tia y cerrar la puerta.

-Gracias por tu Ayuda Pongo! Ven vamos abajo, te daré de comer.

5 horas y 30 minutos más tarde, me encuentro en la sala viendo Televisión aprovechando que ya termine de copiar toda la tarea. Todos pensaran " A que muchacho tan responsable, el si hace tu tarea". Pero no, termine de copiarle la tarea a mi hermano del alma Dylan, a el lo conozco desde que llegue aquí hace 1 año y medio. El es mi compañero de aventuras y la paso muy bien con el.

-Tobías, necesitó que mañana lleves a Mía a la escuela y le ayudes a que se acople con la nueva escuela. Dijo Victoria.

-Esta bien. La llevaré a la oficina del director.

-Gracias, ahora sube a tu habitación y ya a descansar porqué mañana vas a la escuela.

-Si apenas son las 9:30. Dije, mientras señalaba el reloj que esta pegado a la pared.

-Ya es muy tarde. Ahora a dormir.

Y sin más reclamos, llegue a mi habitación. Al llegar a ella, me acosté en mi cama y me puse a pensar, pero una voz proveniente de a lado de mi balcón, hizo que me parara...

Narra Mía

-Tranquila Mía, mañana por primera vez vas a ir a una escuela, todo saldrá bien. Me dije a mi misma, estaba algo nerviosa. A quien le miento, me estaba muriendo de los nervios! Cuando estaba en Amberlave, no iba a una escuela como tal, tenia una maestra que me daba clases en el castillo. Ella se llama Cindy, es muy amable, pero se tuvo que ir, porque su hijo iba a entrar a la preparatoria. Y en su lugar pusieron a una maestra que es lo contrario a ella.

Apague la luz de mi habitación y me fui a descansar.