EN UN REINO NO TAN LEJANO [TERMINADA]

Capítulo 19

Aviso:
Este capítulo será algo diferente. Este capítulo será un poco más largo que los anteriores y mientras escribía este capítulo me di cuenta que, la canción que se encuentra en la parte de arriba ☝ le queda perfectamente al capítulo. Cuando les avise, pongan la canción.
Bye 💖💖💖
Voten 👍👍👍👍

Eran las 8:00, pronto me vendría a buscar Tobías. A la vez estaba algo nerviosa y contenta, no sabía que decir o hacer durante nuestra cita.

Salgo de mis pensamientos, al escuchar un ruido proveniente de mi puerta. Me levanto de mi cama y abro la puerta.
En cuanto abro la puerta,encuentro a Tobías el cuál se ve más guapo de lo normal.
Lleva una camisa color roja a cuadros, con una chamarra de cuero color negro, con un pantalón color negro y nos zapatos de vestir color negros,y lo qué más me llamo la atención fue lo que lleva en su mano derecha.

-Son para ti, esperó que te gusten. Dice Tobías, extendiendo su mano derecha, entregándome un ramo de rosas.  En cerio que Tobías me encanta!

-Me encantan gracias. Dije mientras tomaba las rosas.

-Bueno, vamos. Dijo Tobías mientras me agarraba de la mano.

Al término de las escaleras, se encontraba mi Tía con el semblante muy serió.

-Tía pasa algo?

-Llego una carta, cuando regreses necesitó hablar contigo. Dijo mi Tía, mientras ocultaba algo atrás de ella.

-Es muy importante? Si no podemos hablar unos minutos.

-No, vayan a divertirse. Cuida de Mía, Tobías. Dijo mi Tía, mientras me daba un abrazo.

-Si, no regresáremos tan tarde.

Y sin más salimos de la casa, Tobías me abrió la puerta y emprendimos nuestro viaje, a quien sabe donde, ya que Tobías no me quiso decir a donde iríamos.

(Play al vídeo)

Tobías se estaciona, enfrenté de la orilla del mar. Se baja del carro y me abre la puerta.

-Que caballero, señor Tobías.

-Como debe de ser, señorita Mía.

Caminamos rumbo a la Playa, a lo lejos se podía ver una manta colocada en la arena, en compañía de una caja de pizza, una botella de vino y unas luces con jaulas de color dorado alrededor de la manta.

-Te gusta? Se que no es algo glamuroso, pero hice lo mejor qué pude.

-Me encanta, pero lo que más me encanta eres tu,Tobías. Dije, y al término de la oración Tobías me dio un beso.

-Te dijo que es lo más hermoso que he visto en mi vida?

-La playa? La comida? Los perritos pug? A ya sé... Stranger Things?

-No, eres tú. Con esos hermosos ojos que a cualquiera enamoraría. Y bueno, quieres cenar ya?  Dijo Tobías, cambiando de tema.

Asentí con mi cabeza.

Acto seguido, nos sentamos arriba de la manta. Tobías abre la caja de la pizza, corta una rebanada de pizza y la acerca a mi boca.

-Ummmm... Esta muy rica.

-Dylan, la preparó para nosotros. Su papá estudió gastronomía y ahora el le esta enseñando a Dylan.

-Pues, esta aprendiendo muy bien.

-Bueno,te voy a ser sincero. Yo nunca había tenido una cita. Con las otras chicas, era muy diferente. Solo una noche de diversión y bye, adiós por siempre. Pero contigo es muy diferente, a tu lado me siento completo, es algo inexplicable lo que siento por ti. Dijo Tobías, mientras me agarraba mi mano y la unía con la suya.  Por consiguiente, Tobías se paro de su lugar y me ayudo a pararme.

-Todo esto lo prepare, para que te pudiera decir : Mía Conte, ¿Te gustaría ser mi novia? Dijo Tobías, el cuál en su cara se podía ver su expresión de temor o de que tal vez yo me negara a su propuesta.

-Siii!! Y sin más, me abalance a él y le estampe un beso en los labios. Durante el beso Tobías sonrió, cosa que me causó un poco de hormigueo. Pero no quise comentar nada, ya que estaba más entretenida con algo o mejor dicho: Estaba entretenida con alguien.

Después de unos minutos, siento en mi cintura unas manos que me cargan y me lleva a la parte izquierda de su hombro. !!Me siento un costal de papa!!

-Tobías que crees que haces?! Dije, al ver que Tobías se dirigía a la playa.

-A hora lo vas a descubrir.

Tobías, se adentro a la playa y me bajo. Después de unos minutos, comenzamos una guerra de agua.
Tengo que admitir que la idea al principio no me gusto, pero después de ver a Tobías con la playera mojada y que se le adhería a su trabajado abdomen, me pareció muy buena idea esta guerra de agua.

Unos minutos más tarde, nos encontrábamos recostados sobre la manta, viendo las estrellas.

De verdad que me agrado esta cita, pero lo que más me gusto fue que estaba con la mejor compañía y que ambos empezaríamos a escribir una nueva historia, juntos....