Año 1298
La suave brisa marina rozaba sus mejillas, agitando a su ritmo el cabello castaño oscuro de la joven niña, su vestido blanco bailaba queriendo formar parte de él pero su delicado y cicatrizado cuerpo impedía su escape.
El crujido de esas tejas que formaban la superficie donde sus pies descalzos se apoyaban, era más evidente con cada paso que ella daba.
Al detener sus pies, fijó su vista al horizonte donde estaba la discusión eterna del mar y la tierra peleando por darse lugar en este mundo. Notando cómo el sol se cansaba de observar y decidía irse a iluminar otras zonas lejanas, dejando en su partida una inolvidable mezcla de colores, para decir adiós.
Era la mezcla perfecta para ella, amaba ver semejante escenario desde ese tejado, hasta que el último rayo de sol iluminará sus ojos y le advirtiera que la noche llegaba.
Cuando la oscuridad comenzó a predominar sobre ese cielo, ella bajó rápidamente de ese tejado y se dijo a sí misma –Ya es hora.
Dando su último salto al suelo, se levantó y corrió hacia los callejones, donde se encontraba su escondite.
Mientras sus pies se movían rápidamente, su mano llevaban una tela negra larga, que no dudó en colocar sobre sus hombros, cuyo propósito era tapar su cabello y parte de su rostro, para evitar algún problema en el camino.
De pronto sobre esas calles oscuras, un brazo sale desde uno de esos pasadizos que la rodeaban queriendo sujetarla, pero no logro su objetivo ya que ella alcanzó a esquivarlo sin detener sus pies.
Llegada al pasadizo al cual había enfocado llegar, subió por unas escaleras, terminando parada sobre una puerta de madera, cuyo espesor era bastante grueso, sacando de su cuello un collar donde su dije era la llave de dicha puerta, la abrió lo más rápido que pudo y entró, haciendo lo mismo del otro lado para sellarla.
Con su respiración agitada se dejó caer sobre un colchón de telas posicionada sobre el suelo, esperando que su corazón se tranquilizara.
Miró el techo y se quedó pensando en lo sucedido, provocando que el silencio que invadía ese cuarto se volviera en una ruido de carcajadas burlándose del pobre infeliz que quería sujetarla.
–te salvaste de que no te cortará la mano - dijo entre carcajadas.
Una vez cesando de ellas, giró mirando una esquina de uno de los paredones oscuros, donde una colección de libros bien apilados se exhibían.
Revolviendo los libros buscando uno en especial llego el momento en que se detuvo y gritó –te encontré- y su rostro demostró felicidad con una leve sonrisa que nadie puede ver.
El libro al cual sus ojos anhelaban ver detalladamente, cuya interpretación de sus palabras le hacían sentir melancolía y alegría a la vez, donde sus pensamientos no se enfocan más que en la historia que narraba y el sentimiento de miedo y soledad desaparecen por una noche más, se caracterizaba por tener en su tapa escritos brillante con hilos de oro, que resaltan de la confusión de colores que invadía el fondo, que aún en esa penumbra se podía leer perfectamente, " Mi extraño destino" .
Ella se sentó con los pies cruzados, donde anteriormente se había recostado, y se puso a leer en voz alta dicho libro.
" Mi destino fue tu desgracia, tu diversión yo quise destruir, pero tú me engañaste nuevamente al mostrarme la verdad. ¿Por qué me hiciste diferente? ¿por qué la ambición que los posee no lo puedo sentir?, o capaz yo tenga un concepto errado sobre ella.
Dios, ser superior se te considera, pero para mí solo eres una desgracia que juega con nosotros, sé que mandaste a tu sirviente para retirarme de tu juego de ajedrez pero nunca viste su odio hacia tí que yo pude controlar, volviendolo mi aliado, que se encuentra aún a tu falso servicio.
No sé de dónde provengo pero aún dudo que tú me hayas creado, soy alguien diferente a todas tus creaciones, alguien que también puede darle expectativas a las personas de realizar sus deseo o volver su gran deseo en su perdición.
Te mostraré querido enemigo que mis acciones las realice sin ensuciar mis manos, las escribí desde pequeña con temor de cambiar mi mentalidad con los años cuyo libro me liberaría de cometer un error por desesperación.Y darte el gusto de volverme tu creación.
Elica MosquevilleLa sabiduría me fue otorgada desde la edad de 3 años, ¿el porqué? capaz ni tú lo sabes.
La curiosidad mi gran compañera y quién me enseñó con detalle el mundo que me rodea.
Nací de una mujer que ayudaba a la barca a realizar su trabajo pero en vez de tu ser quien le diera los nombres, era la nobleza quien se los otorgaba.
Era inexperta sobre ser madre pero no lo hacía mal, me cuido bien.Luego un frío invierno invadió mi hogar, su congelada mano comenzó a helar mi corazón y supe que era ella, que me decía que no volvería.
Pero como ella se había marchado, dos hombres llegaron, ellos me comentaron que huían de algo llamado guerra, que cuyo propósito es dar muertes masivas a las personas en nombre de un rey.Yo les ofrecí un hogar en cambio de sus historias, y como espere ellos aceptaron pero su ida luego de unas cuantas lunas era inevitable.
En esos 5 días aprendí de las cicatrices que está maldita provocaba, marcas en sus cuerpo, tristeza en su corazón, y gritos en sus mentes, que en la noche cualquiera podía escuchar. Ellos eran buenos hombres pero sus acciones quebraron esa moral con la que habían nacido.
Llegado el día de seguir su camino ellos me hicieron una propuesta que no pude rechazar, volverme su compañera en su viaje en busca de su verdadero hogar que hasta yo creí que necesitaba buscar.
Pero llegado el segundo invierno, la guerra nos alcanzó, y me hizo experimentar los que era la debilidad, entre ello, la impotencia de no poder ayudar a lo que yo comenzaba a llamar familia. Sus piernas arrodilladas y un cuchillo bajo sus cabeza, con una mirada mutua como coordinando lo que iban a hacer me regalaron una sonrisa, ¡sí una sonrisa! que hasta hoy en día son las cuerdas que mueven mi corazón.
Luego de ver esa escena mis ojos llorosos no vieron más que esos horribles seres encapuchados que me llevaban contra mi voluntad...
La dulce niña bostezo, dejando el libro a un lado se arropó con las frazadas de su alrededor y sus ojos de diferente color se cerraron para poder descansar de su agotador día.
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Hola chic@s les presento mi nueva historia que sinceramente se me ocurrió antes del El diamante del destino que pensaba contar en ella pero no pude contenerme como pueden ver.
Espero les guste 😄
Ah sí ven algún error de ortografía, les agradecería que me lo dijeran en los comentarios para poder corregirlo 😊
Muchas gracias💕
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El Juego De Dios
FantasíaEsta historia se basará en tres jóvenes, pero más precisamente en ella, una joven de 12 años que creyó conocer todos los lados ocultos del mundo, pero la realidad le mostrará que no todo permanece igual, las personas cambian, el mundo tambien, ya se...