Seis grandes amigos enfrentarán a la gran ciudad de New York tras sus pasos en una vida adulta.
Ryan, Amy, Trent, Hannah, Elijah y McKaley vivirán experiencias nuevas que lo formarán como personas, contándolas todas las noches en la terraza del edi...
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Elijah
En la vida, he ido a fiestas aburridas, muy aburridas, demasiados aburridas, sinónimos de funerales, pero para ésta no encuentro descripción. En las demás aunque sea estaba con McKy, pero justo hoy tenía una exposición en Brooklyn y no podía faltar.
Amy estaba bailando feliz con su hermanito, bueno, el diminutivo queda de más ya que el pequeño Ari es todo un hombrecito. Hannah bailaba con un rubio que al parecer se conocían, y Trent, bueno, el moreno no apartaba su vista de los hermanos, seguramente Ryan le ordenó que vigile bien a ese par. Siento que todo el mundo tiene su papel en esta fiesta, ¿y el pobrecillo de Elijah? Bueno, él se jode por nacer tan sexy.
Ni siquiera sé porqué acepté venir, jamás me gustaron las fiestas de universitarios, bueno quizás a los diecinueve años, pero son tan aburridas; grupos de amigos que no sirven para socializar, parejas pegadas como chicles, solteras feas, solteras que buscan matrimonio, y las más tristes para un hombre como yo: las solteras sexys lesbianas.
Dudando si ir con Trent o huir, decido optar por la primera, teniendo en cuenta la segunda como una misión suicida. Él solo bebía de una lata de cerveza, la misma desde hace tres horas.
-¡Felicidades amigo! ¡Conseguiste la lata de cerveza sin fondo! Eres mi héroe-. Bromeo cruzando un brazo por sus hombros, él ríe y agita la lata para hacer presente su líquido.
-¿Acaso no viste a esos dos? Están perdidos de ebrios así que debo continuar al margen-. Se encoge en hombros volviendo a su papel de niñero. Qué aburrido.
-Oye Trent, ¿por qué no te he visto ligar más desde el año pasado? Digo, cuando Ryan estaba en pareja con Jessie, tú y yo vivíamos de cacería. ¡Qué fue lo que pasó con esos maravillosos tiempos! -me exaspero con total exagero.
-Digamos que... le hago un favor a Ryan-. Contesta dudando si escogió las palabras correctas.
-¿Un favor a Ryan? -interrogo confuso.
-Pues sí, justo su hermana llegó cuando Jessie lo dejó, en cierto modo no sabe cómo cuidarla. Ahí es donde entro yo como niñero de tiempo completo.
Ahora que lo pienso, es cierto; Trent siempre está con Amy a pesar que sólo discuten, se encarga de llevarla y traerla de la universidad, le acompaña de compras, es su chofer personal, le prepara la comida... En fin, la cuida demasiado. ¿Por qué en vez de llevarse bien por eso, viven discutiendo?
-Debe de ser frustrante para ti, vivías follando-. Golpeo su hombro pero su desinterés no se inmutaba.
-Cuando uno estudia sabe darles un lugar secundario a esas cosas.
-¿Estás de broma? ¿Cuándo fue la última vez que besaste a una chica siquiera? -aquella pregunta lo incómoda al punto de atorarse con su bebida.
-Ya no recuerdo-. Su nerviosismo es tan evidente, está mintiendo.
El peor defecto que tiene nuestro amigo Trent es que se convierte en Trent el honesto con tan poco alcohol ingerido. Claro, como buenos amigos que somos nos hemos aprovechado de ello en tantas ocasiones.
