Slowly seduced by your curls /Larry Stylinson/ [P A U S A D A]

Capítulo X

El sonido de las sirenas hacia eco por todo el lugar que recorría mientras el vehículo de los policías avanzaba a toda velocidad hacia su destino.

Otro cuerpo.

Otra víctima más.

Otro humano que perdió la vida a manos de otro.

Otro policía yendo con los familiares a dar la triste noticia.

Otra noticia de primera plana.

El mismo asesino.

Todos en la cafetería quedaron en silencio al ver el camino que habían tomado aquellos agentes, justo la calle que llevaba hasta el pequeño departamento del rizado, y todo estaría bien si aquel rizado estuviera trabajando en la cafetería, cosa que no había pasado, pues ese era su día de descanso.
Comenzaron a creer lo peor.

La noticia del nuevo cuerpo encontrado corrió tan rápido que todo Londres se había enterado. Parecía ser que los últimos en enterarse eran los oficiales.

Christopher, asustado, tomó su teléfono y llamó lo más rápido posible  al chico, rezando para que contestara. Los pitidos  del artefacto indicando que estaba sonando del otro lado comenzaban a desesperarlo, cada segundo. Nada, no hubo repuesta y el castaño jefe frunció el seño, comenzando a teclear el número de nuevo buscando tener suerte, consiguiendola después de unos cuantos pitidos.

-¿Sí?-

-Por Dios Harry, ¡estas bien!-

-Uh sí; parece que lo estoy-

La, aún más, ronca voz de del ojiverde a través del teléfono le indicó al treintañero que el chico tenía poco tiempo de haber dejado el mundo de los sueños.

- Bien, sigue descansando-
Y terminó la llamada.

El ojiverde, bastante confundido, dejo su móvil en la mesita que había a su lado, justo donde estaba antes de tomarlo.

-¿Ocurrió algo?-

-Mi jefe me llamó y sólo dijo un "estás bien" y un "sigue descansado" después cortó la llamada. -

-Bueno, yo opino que le hagamos caso a ese hombre y sigamos descansando.-

Harry no estaba muy convencido de volver a dormir, no después de que  su jefe le  llamara y actuara como si estuviera feliz de que el chico aún dormia.

- No pienses en el misterio detrás de esa llamada, estoy seguro que no existe. Ahora a dormir. -

La noche anterior Harry y Louis acordaron salir, cosa que salió mal por la intensa tormenta que se desató justo en el momento en que el castaño abrió la puerta, así que después de pensarlo un poco, decidieron quedarse en el departamento del rizado para disfrutar la compañía del otro mientras veían algunas películas, cenaban algo y al final dormir.
Y sí, vieron una terrible película mientras cenaban una pasta instantánea, se burlaron incontables veces de la película y fueron a dormir. Eso último lo hicieron después de la intensa sesión de besos y caricias que compartieron, situación que duró más de lo previsto.

-No creo poder dormir más. -

-¿En serio? Yo estoy agotado, tú deberías estarlo también. -

-Uhm-

Un tono rojizo se apoderó del adormilado rostro del menor.

-Eres un bebé, te sonrojaste por recordar lo que paso en la noche. - 

-No, claro que no. -

-Oh, claro que sí bebé. -

Y sin más que decir, Louis se acerco y poso sus labios sobre los suaves y carnosos labios de Harry, dejando un beso largo y dulce, haciendo suspirar a ambos.