Yo soy especial [HopeV]

Amo ser especial

Como si papá pudiese aparecer en cualquier momento, me apresuré a salir de la escuela, caminando hasta un lindo parque cercano al instituto.

Había convencido a papá de que no era necesario que fuese a buscarme, pero no dejaba de pensar que él aparecería en cualquier momento de todos modos. Era muy considerado conmigo, y él hacía lo posible para que Hoseok hyung no me hablase fuera de clases, por lo que llevaba poco más de dos semanas, luego de lo sucedido fuera del auto, yendo a dejarme y buscarme a la escuela. Incluso si yo le dije que las cosas con hyung estaban bien, calmadas y arreglándose de a poco.

Pero papá no quería que yo estuviese con él por ningún motivo.

Caminé deprisa hasta aquel parque, miré cada uno de los árboles con ansiedad hasta que pude visualizar a Hoseok hyung recostado en el tronco de un árbol y una sonrisita se plasmó en mis labios.

¿Está muy mal que lo viera después de clases aunque papá me haya dicho que no?

Me acerqué a mi lindo hyung, nervioso, y sentándome frente a él cual indio.

Hoseok hyung me sonrió de vuelta, amable y maravillándome instantáneamente con la bonita forma de sus labios. Hyung es tan guapo.

—Hola, TaeTae —saludó, acercándose a mí para luego besarme la mejilla.

Solté una risita mientras me encogía en mi lugar y usaba el resto de manga que me sobraba del chaleco para cubrir mi boca.

—Hola, hyung~

Canturreé, él me miró con sus ojitos como dos líneas por la sonrisa en su rostro.

Noté que separaba sus piernas y palmeaba en espacio entre ellas, lo observé mientras sentía un calor atravesar mi cuello e ir por mis mejillas. No perdí tiempo y me senté entre sus piernas, acomodando mi espalda contra su pecho y disfrutando lo calentito de sus brazos en mi cintura mientras me abrazaba. Cerré mis ojos risueños, mientras que, relajado, me concentraba en la sensación de mi hyung oliendo mi cabello mientras lo despeinaba con su nariz.

Lo escuché llamando mi nombre, así que abrí mis ojos y me percaté de que su celular estaba frente a mí. Ladeé mi cabeza confundido, y luego la giré lo suficiente para poder verlo a los ojos.

—¿Para qué me muestras tu celular hyung?

—Solo ve, Taehyung.

Asentí, obediente, y al cabo de unos segundos, Hoseok estaba reproduciendo un video con su celular.

No entendía nada, y no era porque el video tuviese una canción en inglés de fondo, sino que hasta el momento sólo eran distintas tomas de algunas calles y estaba muy confundido. Mi ceño se frunció, era tan raro que ni siquiera podía concentrarme en la letra de la canción, hasta que Hoseok hyung apareció en la pantalla.

Y no iba solo.

Era un chico, y eso sólo podía hacer que mi ceño fruncido se profundizase aún más.

—Hyung, ¿qué...

—Shh, Tae, solo mira.

Hice una mueca. Las comisuras de mis labios curvándose hacia abajo.

Noté que en el video eran varias historias. Nuevamente, mi hyung estaba con esa persona, pero ahora era una chica. Confundido, quise concentrarme lo que más pude en el video, y pude ver que esa parte era un flashback. Otra escena con Hoseok y la chica, y después Hoseok le tomaba de la mano mientras ella hablaba con lo que supuse que serían los padres de ella —ya que era un chico y una chica con pelucas—.

Todo cambió, el video se enfocó en algo más, la canción era bonita. Hablaba sobre la aceptación.

El video fueron como cinco minutos de video, hasta que luego mi hyung aparecía en la pantalla, afuera de una peluquería y de ella salió el chico del principio, son riendo, y caminando hasta Hoseok hyung.

Una interrupción, y nuevamente ellos aparecían, de la mano, riéndose, detenidos.

Yo recuerdo haber visto esto, desde otro ángulo, sin música de fondo, y llorando después de que se besaron.

Me quedé pensando en por qué Hobi me había mostrado esto, y supe que en vez de inundar mi cabeza con suposiciones, debía esperar que me explicase qué significaba.

Su mano paseó por mi cuello hasta mi nuca, rascando allí con suavidad.

—Con quien me besé no era un chico —comenzó.

—Lo noté —susurré.

Me sonrió.

—De hecho, ella es una compañera de clases, como todos los que actuaron en el video.

Oh.

Eso no lo sabía.

—Ella se llama Jihye, y en el video actuó como una persona transgénero. Una chica, que no se identifica realmente como una, y que finalmente, con la ayuda de su novio, que le ama a pesar de todo, le cuenta a sus padres sobre cómo no se siente a gusto con el género que se le designó al nacer.

—Ya veo —lo miré de reojo y él me atrapó.

—Te muestro, y te cuento esa historia de todas las que hay dentro del video, porque yo no la besé porque me gustara. De hecho, nunca pensé que verías cuando grabábamos eso. No quise hacerte sentir mal, lindo.

—Entonces, ¿por qué la besaste?

—Porque este era un proyecto que nuestra maestra de inglés asignó. Estaba indignada con la paliza que recibió un universitario por su homosexualidad y quiso que realizáramos algo sobre la aceptación y el respeto hacia los demás. Nuestra propuesta fue la que ganó, así que hicimos un video musical con mini historias. El maestro de música al enterarse, también quiso ser parte y él mismo nos ayudó a componer la canción, que tuvo que ser completamente en inglés.

Mordí mi labio.

—Eso no significa que tenías que besarla, ¿o sí? —dudé.

—No, pero como algunos se encargaron de grabar, otros de componer la canción y el resto a actuar y cantar, muchos también tenían escenas de beso, y acordamos entre todos que sería injusto que porque uno no quería, no lo hiciera. Estábamos comprometidos y la calificación de todos dependía de que fuéramos cooperativos.

—Así que era eso —dije con alivio.

Hyung tomó una de mis manos, para besar los nudillos y subir después hasta el dorso.

—Solo quiero besarte a ti, TaeTae —murmuró en mi mano, dejando un último beso.

Tragué saliva avergonzado mientras él entrelazaba los dedos de nuestras manos.

Mis ojos viajaron a las pulseras a juego que traíamos y sonreí, acercándome para besar su mejilla. Amaba que hyung fuera tan romántico.

—Tú eres especial TaeTae —alcé una ceja—, eres especial para mí como no tienes idea. Y te amo, Taehyungie.

Pude sentir mis mejillas abultarse por la gran sonrisa que ahora mismo tenía en mis labios.

Apreté su mano, aprovechando que todavía no me soltaba.

—Tú también eres especial para mí, hyung. Te amo, desde hace mucho y más de lo que podrías imaginar.

Nos sonreímos, antes de compartir un beso.

Amo ser especial. 

Amo ser especial para Hoseok.